SACRILEGIUM-| YURI ON ICE |

Capítulo IV : Chispas

<<Deja que el tiempo ponga todo en su lugar>>

Después de haberse presentado Viktor le menciono el porque estaba allí , en el transcurso del tiempo en el que se encontraba allí conoció a la mayoría de personas que apoyaban y querían a Yuuri eran bastante agradables.

Pero algo estaba mal no más bien alguien, Yuuri, viendo que tenía peso de mas le prohibió prácticamente que se acercara a una pista de hielo, pero viendo sus ojos y ver la tristeza en ellos no pudo resistirse y decidio que podria practicar solo un poco y ya  cuando se encuentre en su antigua forma practicaria todo lo que quiera eso logro que Yuuri aceptara un poco mas feliz.

Su tiempo con el pasaba rápido, tratando de entender varias cosas de aquel chico pero era sumamente difícil, Yuuri era alguien o demasiado tímido o no confiaba plenamente en él.

No entendía mucho su actuar pero al menos permitía que se le acercase.

Después de un tiempo fortalecieron un poco más su lado de compañerismo y ahora ya no era tan incómodo que se sintieran cerca el uno del otro.

Sentía que se olvidaba de algo tal vez no era importante pero algo le decía que debía recordar que era, mejor dejar que su mente se calme y pueda recordar quizás.

Muchos se sorprendieron al saber que seria el nuevo entrenador de Yuuri de por si llamo la atencion de todos con la rutina y ahora esto, los periodistas no los dejaban ni un minuto en paz teniendo que salir huyendo del hogar de Yuuri, la situacion se estaba saliendo de control y  no habia como solucionarlo.

Icluso relacionaron algunas cosass que no tenian sentido para que paresca que todo estaba planeado y que tienen un romance secreto levatando el odio de sus fans a Yuuri.

-Ah....Que complicado...-mencionaba observando su celular, lo que se encontraba alli no era algo bueno.

-Viktor,¿sucede algo?- pregunto inocentemente como no obtuvo respuestas se acerco un poco mas para observar lo que pasaba.

-Solo no hagas caso- trato de calmarlo, sus ojos demostrando tristeza.

Así termino la conversación sabía que esto estaba llegando a su límite, no le gustaba que Yuuri sufriera por las cosas que ponían en internet, justo como ahora.

Sus fans estaban excediendo su límite de pasiciencia, molestar a Yuuri de esas maneras eran demasiado bajo, no solo lo insultaban también creaban diferentes rumores acerca de quien era y claro no lo ponían bien parado de todo esto.

Algo que tenía que admirar de él era su fuerza cualquier Omega en su situación al recibir tantas agresiones entraría en un estado de depresión bastante malo pero eso no pasaba si podía sentir su aroma la depresión y tristeza pero solo por un corto tiempo después volvía a tener el mismo aroma tranquilizador que le gustaba, le causaba intriga saber cuál era la razón de esa forma de comportarse.

También estaban las que apoyaban y defendían  al  azabache dandole buenas vibras y felicitándole por su supuesta relación y que esperaban verlo volver a patinar, realmente les agradecía lo que hacían.

Quería ayudarlo a que la tristeza se le pase más rápido aunque algo que aprendió de tratar con omegas fue que ellos quieren ser consentidos y mimados por sus parejas cuando sus emociones cambian o se sienten vulnerables, tal vez era un poco egoísta y cruel pero estaba feliz que su querido cerdito no tuviera pareja así él mismo se aseguraría de calmarlo.
-Yuuuuri- llamando con una sonrisa la atención para que le escuché.Al ver que lo estaba escuchando decidió hablar- Hay que tener una cita.

-Eh?- su rostro estaba cambiando de colores todos los tipos de Malba posible.

-Claro será divertido- respondió feliz- tómalo también como un regalo por lo que has logrado.

-Yo...Mm...¿Estás seguro de querer salir conmigo?- pregunto con la mirada en el suelo.

-Claro que si , ¿hay algún problema acaso?- sonrió pero al ver que seguía con la vista fija en el suelo y no respondía su sonrisa poco a poco fue desvaneciéndose- ¿es que me odias?.

Esas palabras fueron suficientes para que levantara la visión del suelo encontrándose con un Viktor desanimado.

-NO!-grito-quiero decir no, yo no te odio solo me tomaste por sorpresa ..... va a ser divertido salir- termino de hablar.

- Genial - se veía en extremo feliz con una sonrisa que irradiaba lo que sentía en esos momentos lo que logro sacar una sonrisa también en él- ¿Que tal si lo hacemos mañana?

-Claro.... ¿Pero a dónde iremos?-
-Yo me encargo de todo, tú no te preocupes solo asegúrate de divertirte pero igual entrenaras mañana en la mañana-

Si sería divertido  poder pasar más tiempo de manera tranquila sin necesidad de ser molestados solo quería que SU ... que Yuuri se sienta tranquilo y con una sonrisa como a él le gusta ver.

Hablaría seriamente con sus fans para que dejen de hacer todo eso, no entendía porque tanto problema si salía con Yuuri.

Al día siguiente sería bastante interesante.

No mentiría al decir que se sentía extraño, no ya se sentía extraño desde antes pero la sensación de extrañeza iba en aumento y la parte en donde tenía esa extraña marca le molestaba a veces y no tenía idea de porque sucedía esto.

Pero sospechaba que algo tenía que ver el pelinegro, ¿la razón? simple solo la marca le molestaba cuando estaban cerca y mañana confirmaría i negaría si el es la razón.

Al día siguiente ya estaba ansioso por lo que no durmió mucho , eso y aquellos sueños extraños que tenía , se levanto temprano y viendo que era demasiado temprano fue al ice castle, primero se despidió de Makkachin después paso por la habitación de Yuuri pero como seguía completamente dormido decidió dejarle una nota para que se encontrarán allí no sin antes darle un pequeño beso en la frente para salir tratando de ignorar el ritmo en el que latía su corazón , los siguientes fueron la hermana y madre de Yuuri.

Al dejarlos practicar siempre al igual que Yuuri tenía una llave para que pueda ingresar a la pista de patinaje y todo estaba demasiado tranquilo y si seguía así era mejor.

Ingreso a la pista y comenzó a patinar no hacía piruetas giros o seguir una rutina solo patinaba como cuando inicio patinando porque le era agradable y le gustaba.

Por estar perdido patinando y recordando lo que pasó tiempo atrás el transcurso del tiempo fue rápido y cuando observo detenidamente se dió cuenta que aquellas trillizas estaban viendo como patinaba junto a su madre.

Ahora que lo pensaba el lugar era, por ahora exclusivo para Yuuri y él.

-Chicas, buenos días-  saludo cordial.
-Viktor,buenos días- devolvieron el saludo.
-¿Yuuri aún no llega?- si no llegaba antes de que las personas se acumularán estarían en problemas.
-Aun no - se notaba la preocupación en sus ojos y por su aroma, no era bueno tratando de calmar a las personas y no sabía qué hacer tal ves su esposo si sabría.
-S..Supongo que se quedó dormido habrá que esperarlo- trato de calmarlas, funciono un poco.

Volvió al centro de la pista y desde allí pudo ver que aquellas trillizas salieron , tal vez a esperar a Yuuri o evitar que ingresen o las dos.

Su mente volvió a divagar pero no por sus años de "juventud" sino aquellos extraños sueños parecían tan reales incluso podía observar las pequeñas  facciones de aquella pareja, la forma en que se miraban, hablaban e incluso algunas pequeñas partes en donde los veía discutir.

No salió de sus pensamientos hasta que escucho como una voz lo llamaba no más bien gritaba su nombre, sacudió un poco su cabeza y visualizo a un chico de cabellos rubios parado al borde de la pista con una cara que demostraba que no estaba feliz con lo que sucedía y detrás un cerdito preocupado por los gritos.

Supo dos cosas, no, talvez tres.

Allí supo que era lo había olvidado, Yuri Plisetsky y su promesa.

Estaba furioso, claramente por su olor eso era peligroso.

Y la más importante su cita estaba  arruinada.