SACRILEGIUM-| YURI ON ICE |

Capitulo XXII: Louis

<<Prefiero recordarte a no reconocerte>>

Ser salvado como una princesa fue poco menos humillante que encontrarse en una habitación encerrado mientras llamaba a aquel alfa.

No entendía que era lo que estaba pasando aunque después de cuatro días que duro su celo quería respuestas.

Recuerda que aquel alfa lo salvo después lo metió en su auto y luego...

Luego...
Luego...

No encontraba respuestas de lo que sucedió después, tenia ligeros recuerdos, unos en donde lloraba de dolor y otro siendo tocado produciendo una sensación agradable.

-Por lo que veo ya te encuentras bien- hablo desde el umbral.

Louis solo observo al alfa frente a él, un hermoso chico alto de ojos verdes y rizos castaños.

Tenia la sensación de ya haberlo visto pero lo único que hizo fue asentir.
Quería salir de allí, quería que su hermano estuviera con él. Lanzo un suspiro si su hermano se enteraba lo que había sucedido haría un gran escandalo.

-Yo...- intento decir algo.

El alfa se acerco y lo observo fijamente, algo le decía que estaba bien que si el lo tocaba estaba bien.

Mas no puede hacer eso, Nació en la tierra con un propósito y lo va a cumplir después de todo el no podría ser...¿Su destinado?

-Necesitas tomar un baño- su voz fue ronca y tranquila - Apestas -

Louis estaba mas que consciente que apestaba, olía a sudor, lubricante y mas sudor. Aquel alfa en cambio olía muy bien...Menta con Limón.

Su cuerpo se tenso al percatarse del aroma que desprendía el alfa, sabia que los omegas y alfas podrían reconocer a sus parejas por medio del aroma del contrario. Su madre había dicho que una forma de encontrar a su destinado era su aroma si resultaba ser tu aroma favorito esa persona...¿Destinado?.

Respiro profundamente sintiendo el aroma del alfa. ¿Era enserio? Lo busco tanto tiempo y ahora que no necesita de ninguna atadura ¿aparece?.

-Omega- hablo - ¿Estas bien?-

Bien no era culpa del alfa, el no manda en este ovillo de lana que es el destino pero aun así ahora el...

-Estoy bien- trato de tranquilizarse.

-Ten- le dio una bata.

Al observar la bata se dio cuenta de algo...estaba desnudo.

Acaso...¿Lo habían hecho?. Sus ojos se abrieron e intento taparse aunque el alfa ya lo había visto así.

Tomo las cosas y lo apego a su pecho, si su hermano se enteraba lo iba a matar y después bailar en su tumba.

Estaba en grandes problemas. Se empezó a colocar la bata con cuidado de que no se le notara alguna parte de su cuerpo.

Al terminar decidió pararse y dirigirse al baño, mas al intentar hacerlo sus piernas fallaron y por poco termina con la cara en el suelo.

El alfa lo había sujetado y en esos momentos hubiera deseado que lo dejara caer aunque tocar el suelo frío no era agradable como los brazos del alfa. Sintió las ganas de sentir mas el aroma que tenia, si era su favorito. Ese aroma le recordaba a su madre.

El alfa lo sentó con cuidado en la cama tratando de no causar daño en el omega.

-Ey no tan rápido, tu cuerpo esta calmándose - hablo con una ligera sonrisa.

Louis ya no quería mirar al alfa por lo que solo miraba sus manos ahí observo moretones suponía que era por aquellos alfas. Acaricio los moretones tratando de sanarlos aunque el no era una ángel para sanar.

-Yo... Gracias por ayudarme- hablo bajo.

Tal vez fue su imaginación pero sintió el aroma del alfa ligeramente mas fuerte.

-No tienes porque agradecer, ¿Cual es tu nombre?-

¿Podría decir su nombre? ¿Podía confiar en él?

Debía dejar de ser dramático y olvidarse de eso de destinados por ahora, si cuando el lo busco no apareció ahora que espere unos meses mas.

No, ¿Aceptaría la marca?

-Soy Louis - miro a los ojos verdes.

Trato de hablar sin que su voz sonara temblorosa, suspiro y recordó su misión. No era momento para destinados.

-Louis- repitió el alfa.

Escucho la risa del alfa y lo miro, observo sus ojos y por alguna razón se puso alerta, algo no le gustaba de todo esto.

-Louis - volvió a decir el alfa - Ahora usas nombres simples ¿no lo crees?. Batín -

(…)

Si le hubieran dicho que por realizar una coreografía de alguien a quien admira este terminaría buscándolo y que luego empezarían a salir para terminar siendo novios nunca se lo hubiese creído.

Pero era real, no simplemente un sueño, Viktor Nikiforov era oficialmente su novio.

Podría desmayarse a pesar de que habían pasado cuatro días desde que se lo pidió aun le costaba un poco el creerlo.

-Yuri- recibió un ligero beso en la mejilla - no me ignores.

Ambos se encontraban solos en la pista de patinaje, se habían quedado hasta tarde para practicar la coreografía.

-No te estoy ignorando - con las mejillas rojas.

- Entonces ¿Sucede algo? - se acerco a abrazarlo.

-No es nada- con su nariz hundiéndose en la ropa de su novio.

Después de esa ligera charla, Yuri siguió practicando y Viktor...Viktor no podía apartar su vista de su omega, su novio.

"Eres un... No puedo creer lo que quieres hacer.

No tengo dudas con respecto a eso.

Pero tus alas...

Les diré adiós "