Era año nuevo. En uno de los grandes salones de la academia se estaba realizando la última fiesta del año, para los alumnos que se quedaban allí a pasar las fiestas y para todos los profesores y directivos. Toda la familia Hyuga se encontraba presente, como también la familia Nogi. Jin estaba feliz de volver a ver a la pequeña Hyuga el día anterior, la abraso tan fuerte y le dedico tantos halagos que Ichirou lo miro con cara de pocos amigos, pero se trataba de Jin ¡Él alagaba a todo el mundo!
Luka al verla la semana pasada no podía creerlo. La pequeña, ya no era tan pequeña. Estaba cruzando los grandes portones de la academia con la clase peligrosa a sus espaldas y vio a Akira agitando sus delgados brazos en el aire con alegría, saludándolo; al comienzo no la había reconocido, pero al acercarse unos pasos más, aquel cabello y esos preciosos ojos eran imposibles borrarlos de su memoria, así que corrió lo más rápido que pudo y la alzo en el aire antes de que esta pudiera reaccionar. "¡Te extrañe tanto, pequeña!" fue lo primero que le dijo, a lo que Akira respondió "¡No soy pequeña, anciano!", fue como regresar al pasado sin necesidad de un alice.
La muchacha se había presentado a la fiesta con un vestido elegante pero fresco. La parte superior tenia piedras en todos grises y negras, mientras la falda era larga y de tul rojo. Sus zapatos eran rojos pero no se veían por lo largo del vestido. Su cabello estaba suelto y adornado por la corona de flores rojas que nunca se marchitaban o perdían su agradable aroma.
-¡Hotaru-san, Subaru-san!- Llamo la joven, cuando estos cruzaron las grandes puertas del salón.
Hotaru llevaba un elegante vestido violeta de gasa brillante algo ceñido al cuerpo que le llegaba hasta los tobillos; mientras Subaru iba vestido con un perfecto y nada arrugado traje gris, camisa blanca y corbata roja. Hotaru había perdido su alice de invención con los años, pero en su tiempo atrapada en el Espacio-Tiempo lleno diarios y diarios de inventos que se le venían a la cabeza y podían servir en un futuro, por lo que al salir y luego de adaptarse –lo cual no fue mucho tiempo- abrió su propia fábrica y negocio de juguetes y aparatos de entretenimiento vendiendo tanto a grandes parques temáticos o de diversiones, como a personas directamente de sus sucursales. Subaru luego de terminar la universidad –estudio todo el tiempo perdido por lo que las carreras se le hicieron fáciles- y ayudaba en los trabajos de su hermana, trabajando principalmente en la parte administrativa y en recursos humanos, rechazando a los que consideraba "idiotas" según su criterio.
-Buenas noches, Akira.- Dijo Hotaru, cuando esta la abrazo con cariño, acción que repitió con el otro Imai, quien sonrío y la saludo también. –Están bellísimos.- Exclama la chica mirándolos, los mayores agradecen.
Aunque Akira había olvidado su tiempo con ellos, parecía que sus sentimientos no habían cambiado ni desaparecido, ya que con unas semanas los tres se habían hecho prácticamente inseparables y su relación era muy parecida a la de antes. De cierto modo los hermanos estaban algo tristes por el hecho de que la pequeña a la que tanto habían cuidado ya no los recordara, pero no querían tirarle más presiones, ya había pasado suficientes cosas como para pensar en algo que olvido. Cuando le preguntan porque razón fue absorbida por aquel agujero negro y todo lo sucedido aquella noche, ella respondía "El destino intento castigarme por andar descubriendo el pasado de mis padres." o cosas similares, era como si le hubiesen contado una historia completamente diferente y en la que la existencia de Hotaru y Subaru era inexistente.
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El pasado de mis padres [Gakuen Alice]
FanfictionUnos años después de que Sakura Mikan se gradúo de la Academia Alice, comenzó a vivir junto a Natsume Hyouga. Estos tuvieron dos hijos, Hyouga Hibiki (16) y Hyouga Akira (15), ella es tratada como la princesa de papa; al tener hijos Natsume se ablan...