El pasado de mis padres [Gakuen Alice]

Episodio 33: Hinaki te perdona.

~*Por favor, leer la nota al final del cap. Graciias!*~ >o<

Aquel espacio era como un segundo piso del lugar en que se encontraban, algo así como un lugar secreto, pequeño y oscuro para que nadie lo viera. Akira y Rei trataban de caminar sin provocar algún ruido que podría escucharse debajo de ellos y se delataran sin más. Aun que allí arriba no pasaba ningún sonido o ruido de abajo, no sabían si allí era lo mismo.

Rei estornudo por milésima vez, tratando de que sea lo más bajo posible. El lugar no era uno por el cual pasaran personas, así que no se limpiaba y había una gran cantidad de polvo por todas partes, lo cual despertaba las alergias del oji-marron.

Akira: -Salud...- Respondió en un susurro, al estornudo de su amigo.

Rei: -Gracias...- Agradeció.

Aquella fue la única conversación en el comino, pues ambos iban atentos de por dónde iban y que pisaban. Sobre sus cabezas había una pequeña flama de fuego, que alumbraba a su alrededor; de vez en cuando esta amenazaba con apagarse, pues Akira no estaba muy estable.

Rei: -¿Estas bien?- Pregunto mirándola sobre su hombro.

Akira: Le devuelve la mirada. -¿Por qué preguntas?-

Rei: -Escucho tu respiración... algo agitada.- Contesto dudoso.

Akira: -Ah...- Se limitó a exclamar. –Estoy bien.- Finalizo cortante.

Siguieron con su camino. Rei paro de pronto, provocando que Akira chocara con su espalda.

Akira: -¿Rei? ¿Qué sucede?- Pregunto confusa.

Rei: -¿No lo sientes?- Pregunto mirando a todos lados. –Una corriente de aire...fría.- Dijo tratando de ubicar de donde provenía. Hasta que su amiga lo sintió...

Akira: -¡REI!- Exclamo, pero ya fue demasiado tarde.

Los paneles se rompieron, como si de cristal se tratara. Provocando que ambos cayeran al suelo, sobre los pedazos de supuesto cristal, que al sentirlos, Akira se dio cuenta que se trataba de hielo.

Akira: -Luka...- Susurro molesta con una mueca de dolor. Miro a un lado, observando a su amigo. -¿Te encuentras bien?- Le pregunto.

Rei: -Como recién levantado...- Le respondió sarcástico. Ambos sonrieron, tratando de volver más ligera la situación.

Era muy obvio, habían caído en una trampa.

X: -Bienvenidos Andou-kun, Hyouga-chan.- Dijo con alegría, pero su tono de voz era realmente escalofriante. Daniel se encontraba en lo que parecía una pequeña grada observándolos con una pequeña sonrisa. –Es grandioso ver como los premios se ganan solos.- Los miro con superioridad.

Ambos menores lo miraron con enojo, levantándose de apoco. Una vez de pie, se le quedaron mirando con firmeza.

Rei: -¿Quién es usted?- Pregunto con rudeza.

Daniel: -Daniel Nikkari.- Contesto tranquilamente. –Me sorprende ver que aun puedan ponerse de pie, luego de aquella caída ¿Necesitan ayuda?- Pregunto con falsa lastima.

Akira: -¡No necesitamos ayuda de una basura como tú!- Exclamo molesta. -¿Qué quiere de nosotros?- Pregunto brusca.

Daniel: -Tsk! Que niña más insolente... serias una linda marioneta.- Finalizo con una escalofriante sonrisa.

Akira: -¿Marioneta?- Pregunto desconcertada. Abrió los ojos de par en par cuando tomo conciencia de lo que había dicho aquel hombre. Rápidamente tomo la mano de Rei y frente sus ojos se pudieron ver unos tenues hilos brillantes chocar contra un escudo que se formó alrededor de ambos.