__ Yagami, una chica de 17 años que sin saberlo es hermana del más grande y temible asesino de la historia, Kira. Por otro lado L, el mejor detective del mundo, busca a toda costa atrapar a dicho asesino pero...
¿Qué pasará cuando los camino de __ y...
Es increíble que a pesar de todo aún podamos volver a rehacer nuestras vidas. Que toda esa pesadilla que fue kira y la death note por fin terminara.
Es una pena que no haya podido ayudar a Light, es algo que siempre voy a lamentar. Cuando mis padres se enteraron de la noticia quedaron devastados.
Sin embargo después de un tiempo empezaron a asimilarlo, yo también. Así que les conté de mi embarazo y ellos fueron muy comprensivos conmigo y Ryusaki, incluso mamá se puso muy feliz...
También se enteraron del embarazo de Misa y de igual forma se alegraron. Todos decidimos apoyarla en todo y hacerle saber que no estaba sola.
Dos meses de embarazo cuando Ryusaki me invitó a salir una noche. Fuimos a comer y él se encargó de que todo fuese perfecto. Había una mesa frente a un balcón exclusivamente para nosotros.
Y recuerdo ese increíble momento cuando el me regaló una rosa diciendo que había algo dentro.
Era una pequeña caja con un anillo dentro y una nota que decía: "Te casarías conmigo?" Aún puedo sentir lo emocionada que estuve y obviamente acepté...
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Pues bueno...
Ahora me encuentro, retocando un poco mi maquillaje ya que... Allá afuera se encuentra la persona con la que voy a compartir mi vida y de quien espero un hijo.
-___!-dijo mamá entrando a la habitación en la que me encontraba-,ya estás lista hija?
-Sí mamá, sólo retocaba un poco mi maquillaje-sonreí.
-Estás hermosa hija.
-Gracias mamá!
-En verdad, eres la novia más bonita de todas y el vestido te queda excelente.
Sonreí ampliamente ante su comentario. Ella se acercó a abrazarme y yo correspondí.
-Me alegra que seas feliz __, este es tu día, así que disfrutalo y recuerda que tu padre y yo te amamos.
-Gracias mamá!, yo también los amo-sonreí y una pequeña lágrima bajó por mi mejilla, estaba realmente emocionada. La limpié con mi mano y mamá sonrió.
-Bueno, es hora hija!
Salí de mi habitación y bajé las escaleras con ayuda de mi madre. En la sala se encontraban mi padre y Misa.
-Wow!!-gritó esta con emoción al verme-,__ te ves hermosa!
-Gracias Misa-sonreí.
-Es enserio-dijo ella soltando algunas lágrimas por lo que acudí a abrazarla, sabía que era difícil el ver que yo podía formar una familia con el padre de mi bebé y ella no. Por eso la comprendía, porque aunque ella misma se lo buscó, al final hizo las cosas bien y siempre le estaré agradecida.
