Me doy la vuelta en la cama y quedó de lado abrazando a Harry por la cintura entrelazando mis piernas con las suyas. Todavía es de noche, el sol ni siquiera a salido y agradezco por que me siento fatal. Unos síntomas horribles me amenazan con que salga corriendo al baño, pero intento controlarlo y seguir donde estoy. Harry duerme tranquilo con uno de sus brazos debajo de mi cabeza y con el otro en mi cintura. Su abdomen y el mio están pegados a si que intento dormir de nuevo con el calor de su piel. Unos minutos más tarde vuelven y está vez más fuertes. Quito el brazo de Harry rápido pero intentando que no se despierte y salgo corriendo al baño. Cierro la puerta y enciendo la luz deprisa para echarlo todo en el retrete... Vómito y vómito hasta que me duele el estómago. Con el dorso de mi mano aparto el sudor de mi frente y me pongo de pie pero de nuevo vuelven las arcadas. Las bisagras de la puerta se escucha abrirse y en décimas de segundos un Harry horrorizado viene hacia mí corriendo.
-______, cariño. ¿Que te pasa?-
Voy a responder pero ni siquiera llego abrir la boca para contestar. Mi garganta quema y echó lo último que me queda dentro mientras Harry me recoge el pelo y me lo amarra arriba de mi cabeza. Tira de la cadena y me coge a pulso hasta dejarme encima de la pica. Abre el grifo y me hace beber de su mano un trago de agua para aclarar mi boca. Cuando lo hago me lava la cara y me mira asustado y con una pequeña arruga en su frente.
-¿Te encuentras mejor?... vístete y vamos al médico-
Niego con la cabeza y lo cojo de la muñeca para intentar que no vaya a ningún lado. Lo único que quiero hacer ahora es beber algo y descansar, tengo una sed terrible.
-Me encuentro mucho mejor... Seguro fue por la cena que me sentó mal-
Vaya... Encima me he quedado hasta afónica por el esfuerzo. Su expresión no cambia a más calmado si no lo contrarió tiene un tono más asustado. Lo acercó a mí y lo abrazo con mis brazos y piernas. Mi cabeza descansa en su pecho y él me aprieta más todavía.
-Tengo sed y sueño-
Sin tener que darle más explicaciones me coge y salimos del baño y segundo después de la habitación. Me guía a la cocina y dejándome en un taburete va a la nevera. Esta de espaldas con tan solo un bóxer negro que le queda de toma pan y moja. Los músculos de su espalada se flexionan al coger el zumo y el agua que están arriba del todo y una vez en la mano se da la vuelta y dice:
-¿Zumo o agua?-
Espera mi respuesta con la puerta de la nevera todavía abierta. Carraspeo un poco y elijo el zumo de naranja... Espero que me quite este asqueroso sabor. Me lo sirve en un baso grande y lo cojo con ganas dejándolo casi vacío.
-Mucho mejor, Gracias, cariño-
Da unos pasó esta estar cerca de mí y acerca su rostro al mío uniendo nuestras frentes. Sus ojos esmeralda miran los míos oscuros y dándome un beso en los labios murmura:
-No tienes que dármelas, he venido al mundo a cuidar de ti y eso hago.-
Fascinada y en un mundo multicolor, me aferro a su cuello y me apego todo lo posible a él hundiendo mi rostro en su cuello mientras retuerzo los rizos que caen por su nuca.
-Llévame a la cama.
Me aúpa hacia arriba y pasa su brazo por debajo de mi culo quedando cargada como un mono. Me pregunto si alguna vez se cansará de cargarme a si, es pero que no, me encanta que lo haga y más cuando no puedo mantenerme casi en pies como en estos momentos. Subimos a la habitación de nuevo y me deja sobre el colchón, segundos después se acorruca contra mi y cojo su brazo pasándolo por mi cintura quedando pegada a su cuerpo por completo.