2 hora más tarde estoy de camino a la empresa de Harry. Que mareo, que si velo, zapatos, accesorios y diademas... Estoy que si veo un vestido más me entra algo. Pero al final Ainoha estará perfecta el día de la boda. Estaciono en el Parking de allí cerca y camino hasta cruzar la cera que da con la entrada. La recepcionista me saluda amigable y me indica que el señor está en su despacho. Me monto en el ascensor y le doy a la planta 19... Me lo sé de memoria, Harry me a enseñado a llegar perfectamente. Al llegar a la planta, salgo y veo a Sam el mano derecha de Harry. Le pregunto por él y me dice que está en su despacho con Elisa. Al escuchar aquel nombre me entra de todo menos bueno. Asiento sin que se me note el afecto que me a causado y sigo caminado esta llegar a la puerta. Se que debería llamar pero mi mano es demasiado rápida y abre la puerta sin educación.
Mis ojos conectan enseguida con los de Harry que al verme se espanta e intenta levantarse pero Elisa que la lleva casi encima suyo le bloquea. No puedo creer lo que ven mis ojos, ¡Harry, mi Harry!.
Nunca he visto a Elisa en persona, es la primera vez que lo hago. Inclinándose un poco más donde él, le da un beso en la mejilla dejándole la marca del pintalabios rojo.
Mis puños se aprietan y clavo mis uñas en la carne de mi palma de la mano. Esta asustado, sabe que le va a costar caro. Normal lo he pillado con el zorron del año. Elisa se levanta y empieza a caminar hacia mí para salir por la puerta.—Nos vemos luego, bollito —
Juró que la mato, ¡la mato!. Frente a mi me da una sonrisa más falsa que sus tetas y me ofrece su mano para que la estreche.
—Debes de ser la pequeña,______. Encantada, soy Elisa—
Me saca una cabeza y media. Me siento pequeña con mis converse. su vestido por los muslos la hacen parecer una prostituta barata a lo que no entiendo que pinta aquí. No me pienso acobardar y haciéndome frente contestó:
—Si... soy yo. Te imaginaba tal y como eres —
Baja la mano al darse cuanta que no le voy a ofrecer la mia. Su cara de sorprendida y mirándome chulesca se atusa el pelo.
—¿A si?—
—Si, una señora un tanto acomplejada con su edad—
Es mentira, nunca pensé que sería a si. Es mayorcita ya, unos treinta y pico nadie se los quita. Su cara se vuelve completamente sería y apartándome a un lado le doy paso para que se vaya. Ella y sus zapatos de plataformas cruzan la puerta y enseguida le cierto la puerta, espero que le allá dado en el culo.
—______, cariñ...—
Lo corto señalandolo con el dedo. Los nervios me pueden, los nervios me van a traicionar y lo sé. Tengo una tetera dentro de mi que está apunto de explotar. Se levanta y camina hacia mi quedándose enfrente.
—¿Que coño hacías?—
Le digo entre dientes. Lo que me da más rabia es que él no a echó nada por detenerla, no la a apartado, no se a negado al beso y tampoco a dicho nada cuando se a acercado a mí.
—No es lo que parece —
—La palabra mágica, ¡No es lo que parece!—
Subo el tono de voz. Acorta más la distancia entre nosotros y intenta cogerme para intentar relajarme. De un paso me aparto de él a lo que se pone todavía más nervioso.
—Me marcho—
Doy la vuelta y intento abrir la puerta pero él se pone delante bloqueandome la salida.
—Por favor, no te vallas. Déjame explicarte—
—¿Que coño vas a explicarme? Estaba encima de ti, te a besado y encima se pone frente a mí a presentarse... No te entiendo, Harry, no te entiendo ni te quiero ver hoy.—
Le doy un empujón para apartarlo de la puerta y no lo mueve ni siquiera. Me coge de las caderas y me atrae hacia él besándome. No creo que valla a decir esto pero, no quiero besarlo, no cuando lo he visto con esa zorra. Intento apartarme dando bandazos pero no logro conseguir nada.
—Apártate—Le digo contra sus labios. Con un subidon de rabia le estrelló mi mano contra su cara dejándolo bloqueado. A parado de besarme pero todavía me tiene agarrada. Una de sus manos la lleva contra su mejilla y aprovechó que no tiene tanta fuerza sobre mí para escabullirme. Lo consigo y salgo corriendo hacia el ascensor, agradezco que Sam lo allá llamado y a si me cuelo en el deprisa antes de que se cierren las puertas. Lo último que veo es a Harry corriendo. Espero que no sea tan rápido en bajar por las escaleras como el ascensor. En la planta de abajo me despido del amable Sam y salgo corriendo al Parking.
Voy de camino a casa de Ainoha, mi única amistad aquí es ella por ahora, A si que iré donde mi cuñada. La impotencia me puede y me echó a llorar en medio de la carretera. No puedo creer lo mal que me siento, los celos me pueden y no soportó ver a Harry ahora mismo. El teléfono me suena una y otra vez y no hace falta que mire para saber quien es. Me limpio con el dorso de mi mano las lágrimas y sigo el camino hasta llegar al portal de Ainoha. Aparcó en un aparcamiento que hay cerca y echó andar medió corriendo para poder entrar al portal si. Que nadie me vea llorar. Siempre me pasa igual, siempre me ponen los cuernos en la cara.
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Feliz cumpleaños GabyTejada. Espero que lo pases súper bien en tu día, amiga. Un fuerte abrazo. ❤