CRUSH | Tyler Joseph

XVIII

Narra Tyler

Desperté en una camilla de hospital. Había visto a Abby con ese chico que estaba junto a ella la primera vez que la vi. Ellos deben conocerse desde hace mucho más tiempo y ella debe quererlo mucho más que a mi. Podía notarse en la forma que ellos reían y se abrazaban... Y ahora que pienso bien las cosas, exageré.

—Imbécil...— dije entre dientes aclarando mi vista.

Creo que con esto ya no tenía duda de que ella me gustaba. Pero... claramente yo no creo que pueda hacer lo mismo. Me gustaría conocerla más.

Dios, que estúpido. Criticaba a Jenna por estas ideas de mierda y soy igual. Bueno, la verdad... Es primera vez que me pasa.

—Tyler, despertaste— Dijo mi madre acercándose a la camilla.

—¿Mamá? tuve un ataque, ¿verdad?— me senté para poder prestarle más atención.

—Si, hijo— acarició mis mejillas. —Pero mira quien vino a verte— Se giró para abrir la puerta y hacer una señal con su mano para que Jenna entrara.

Lo que me faltaba.

—Hola, Tyler— Jenna se acercó a mi y mamá salió de la habitación dejándonos solos.

—Hola— giré mi cabeza para evitar mirarla.

—¿Cómo te sientes?— tomó una de mis manos y la rodeó con las suyas.

—Bien— dije serio.

—Tyler, eres un idiota— Soltó mi mano con enojo y se levantó de la camilla enojada comenzando a caminar de lado a lado por toda la habitación. —Vengo aquí para verte porque me preocupas. ¡Yo! estoy aquí, y ella ¿Dónde está? No le importas, no como a mi. Dime, ¿Qué más tengo que hacer? ¿no soy lo suficiente para ti?— me gritaba con furia.

—Ella no sabe que estoy aquí. Si se hubiera enterado, estoy seguro de que vendría— en mis adentros sentí que de alguna forma eso no era cierto. —Jenna, tú eres una chica muy inteligente y muy linda, pero no eres la persona que quiero. Te mereces a alguien mucho mejor, y si, soy un idiota. Ahora déjame descansar...— Noté como mis ojos se cristalizaron y un pequeño susurro en mi cabeza me decía: "Idiota..."

—Está bien. Claro, como quieras... Adiós— Salió de la habitación dándole un fuerte golpe a la puerta.

Me quedé solo, el momento perfecto para comenzar a llorar sin que nadie más lo notara. Soy un idiota total ¿En serio creí que iba a aparecerme mágicamente y ella caería sobre mi? Ella si es muy linda, seguramente tiene una lista llena de chicos mucho mejores que yo.

Narra Abby

Luego de esperar unos 10 minutos más con Matt, llegó Melanie con una bolsa llena de comida.

—Hola, chicos. Los extrañaba— dejó la bolsa en el suelo y se inclinó para ayudarnos a ponernos de pie y abrazarnos a cada uno.

—Chicos, tengo muchas cosas que contarles. Necesito consejos y ayuda y sé que ustedes son los mejores en eso— dije comenzando a caminar hacia el parque.

—Slmos todo oídos— Dijo Matt adelantándose.