CRUSH | Tyler Joseph

XIX

Narra Abby

En el momento que intenté acercarme a Tyler el monitor comenzó a sonar repetidas veces dándome a entender que Tyler se estaba desestabilizando.

-¡Tyler!! Tranquilo...- Me acerqué corriendo a su camilla y tomé su mano con mucha fuerza. Acaricié su mejilla y el levantó delicadamente su mirada agotada hacia mí.

Poco a poco Tyler se estabilizó y sus padres entraron realmente alarmados y preocupados a la habitación.

-¡¿Que pasó?!- La mamá de Tyler cubría su boca con ambas manos preocupada observando a los ojos a su hijo.

-Estoy bien, mamá. Déjame solo un momento con Abby, por favor- Tyler se acomodó en la camilla y le hizo un gesto a su madre para que no se preocupara por él.

-E-Está bien, hijo- Los brazos de su esposo la rodearon y guiaron a la salida.

Tyler suspiró y tomó mis manos mientras las acariciaba lentamente. Tenía una pequeña sonrisa que no se lograba ver fácilmente, pero estaba allí. Me observó directo a los ojos y pude notar lo rojos y aguados que estaban.

-Viniste- Tyler intento regalarme su mejor sonrisa. Dios, no puedo verlo en este estado. No es esa sonrisa con la que él siempre está. Es una sonrisa rota, al igual que su voz.

-Tyle ¿Cómo no vendría?. Me preocupas, demasiado- Suspiré y me acerqué para juntar mi frente con la suya. -Me diste un gran susto-

-¿En serio, Abby?- Su tono cambio a algo sarcástico y confuso. -Por favor, dime, Abby. ¿Realmente te importo? Porque no recibí ningún mensaje tuyo. Yo... intenté ir a tu casa... pe-pero...- Su voz estaba quebrada y su labio inferior temblaba.

-Ty ¿De qué hablas? Claro que me importas, de no ser así, no me hubiera molestado en venir a verte. Lloré en casa imaginándome lo peor. No sabes lo aliviada que me sentí al entrar y verte en un estado mucho mejor del que imaginé. Tyler, me preocupas- tomé sus mejillas y las acaricié preparándome para limpiar cualquiera de las lágrimas que fueran a desprenderse de sus ojos.

-A-Abby...- Dijo casi sollozando.

-¿Tyler?-

-Por favor... abrázame- 2 lágrimas recorrieron ambos lados de su cara. -No me dejes, no te vayas... Las cosas empeorarán- Rompió en llanto.

Tyler se abalanzó hacia mi abrazándome realmente fuerte. Sus lágrimas empapaban mi camiseta y sus manos se clavaban en mi espalda.

-Estoy aferrado a ti- Apenas logré comprender aquellas palabras que salían de aquellos labios mojados en lágrimas y temblorosos.

Tomé la cara de Tyler y lo miré directo a los ojos totalmente confusa. Sequé sus lágrimas con las mangas de mi camiseta con mucho cuidado de no lastimarlo. Sus ojitos marrones estaban rojos y observándome con un brillo. Y entonces su llanto paró.

Narra Tyler

Se veía realmente hermosa, yo debo verme terrible en este estado. Sus ojos brillan y sus suaves manos acarician mi cara totalmente humedecida por mis lágrimas.

Ella realmente vino, esta aquí, conmigo. En serio le importo. Pero quizá porque soy su amigo. Le dije que estaba aferrado a ella, y lo estoy. Ella parece estar sorprendida por lo que dije. Me arrepiento. Debe estar pensando en como rechazarme de la forma menos dolorosa posible.