Rachel
Me levante temprano, pues tenia que ir a darme de baja de la universidad. También hoy comenzaría a trabajar con Scott y eso me ponía nerviosa.
Aunque ayer me divertí mucho, me sentía realmente cómoda con él.
Scott me dijo que abren la cafetería a las 8, pero me dio permiso de llegar tarde para que pudiera solucionar mis pendientes. Por que también tengo que devolver las llaves de mi antiguo trabajo.
Me ducho y me visto rápido. Me apresuro a tomar un autobús. Quería llevarme a Alex, puesto que Scott me permitió llevarlo al trabajo, pero mi madre insistió en que ella lo cuidaría.
Finalmente llegue a la universidad, de nuevo sentía las miradas de todos sobre mi, volvía a ser el centro de atención. Se escuchaban miles de murmullos, no quiero ni imaginarme lo que dicen de mi.
Cuando llegue a la oficina del director, me hicieron pasar rápidamente e hicieron los tramites necesarios, pero era horrible sentir como me trataban con lastima, como si por decirme una palabra equivocada yo me fuera a desmoronar. Por suerte termine rápido y me dirigí a mi antiguo trabajo. Ahí todo fue mas rápido, sólo entregue las llaves y listo.
Cuando ya me dirigía a la cafetería me comencé a sentir extrañamente nerviosa, ¿como seria estar todo el día al lado de Scott? ¿No se cansara de mi?
Finalmente estaba frente a la puerta, recuerdo la primera vez que entre en este lugar, en ese momento nunca me cruzo por la mente que terminaría trabajando aquí.
Abrí la puerta lentamente, estaba llena de nervios. Justo cuando la abría escuche un par de risas, una de ellas la reconocí al instante, era la de Scott, pero la otra parecía la de una chica.
Entre y lo primero que vi fue a Scott riendo muy animadamente con una chica, ella era mas bajita que yo y tenia el cabello negro, recogido en una coleta, pero aun así le llegaba abajo de la cintura.
En cuanto Scott me vio, dejo a la chica y se acercó a mi.
-Hola- me dijo muy sonriente.
-Hola- dije -¿no llegó muy tarde?-
-No, tranquila- me dijo y me ofreció su mano -ven para darte un delantal y explicarte lo que haras- yo asentí y tome su mano, pero al momento de que nuestras manos entraron en contacto no pude evitar sonrojarme y mas al verlo sonreír.
Me llevo a un armario enfrente de la oficina en la que nos besamos por primera vez, al recordarlo mi rostro se tiño completamente de rojo.
-Este es tu delantal- me lo dio en las manos, era blanco y tenia escrito Sweet Dreams -por hoy solo nos ayudaras a limpiar las mesas, pero primero te presentare a alguien-
Me llevo hasta donde se encontraba la otra muchacha.
-Ella es Molly-
-Mucho gusto soy Rachel- dije y ella me sonrió, entonces pude ver sus hermosos ojos verdes.
-El gusto es mio- me extendió su mano y yo la estreche.
-Bueno, Demián y tu se encargarán de la limpieza y Molly y yo estaremos en la cocina- dijo Scott, me sonrio y luego se marcho a la cocina. Con ella.
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Ni la muerte podra tocarte (Editando)
Romance¿Nunca has sentído que alguien te observa? No solo casualmente, sino cada segundo, minuto, hora, día, semana y mes. ¿Has sentído que no volveras a caminar sola? ¿Ha estar sola? Esa presencia siempre esta ahi. Pero no es algo que te de miedo, tal vez...