Esto es amor

Capítulo 41

Las 9 de la noche y como la primera vez que salieron a cenar cada uno se había vestido en su respectivo departamento.

Elliot vestido con su traje muy formal color negro y una camisa celeste, ingresó al departamento de Olivia y se sentó en la sala. Sus nervios habían regresado y no paraba de mover su pierna.

Olivia estaba terminando de arreglarse. Llevaba un vestido color negro, muy pegado a su cuerpo, le llegaba un poco más abajo de la rodilla y tenía un escote pronunciado en v, zapatos de tacón alto color rojo y una cartera del mismo color. Se veía espectacular, maquillaje sencillo y el cabello recogido a un lado.

"Vamos Olivia. Pon cara de felicidad. Saldrás a cenar con el hombre que amas. Luces increíble y apuesto a que él también. Si sólo pudiera dejar de pensar en la prueba de embarazo. No sé por qué llegué a tener esperanzas. ¡Basta! Saldré a cenar con Elliot y tendremos una maravillosa velada." pensaba Liv, respiró profundo y salió de la habitación.

"Tranquilo Stabler. Esto es lo que siempre quisiste. Olivia Benson esposa de Elliot Stabler. ¿Y si no quiere? No, no, no. Todo saldrá bien." se decía Elliot caminando de un lado a otro en la sala hasta que escuchó la puerta de la habitación abrirse.

Olivia se propuso sonreír y pasarla bien y eso haría. Salió de su habitación con una gran sonrisa. Elliot esperaba por ella y se quedó hipnotizado al verla.

—¿Nos vamos? —preguntó Liv un poco sonrojada el ver a Elliot embobado frente a ella. No decía una palabra. Sólo la miraba de arriba a abajo.

—Ell —llamó su atención moviendo sus manos frente a él.

—Te ves perfecta, hermosa, increíble.

—Gracias. Tú te ves muy guapo también —respondió ella acomodando su saco y se besaron muy apasionados—. Si seguimos así llegaremos tarde —sonrió.

—Ya no se si quiero cenar —bromeó él con una mirada sexy—. Creo que en el menú no está lo que quiero cenar hoy.

—¡Elliot! —exclamó sonrojándose. Sentía como su mirada la quemaba por dentro y le dio un leve golpe en el brazo.

—Esta bien. Vámonos ya o no respondo

Le dio un último beso y salieron del departamento.

En el camino ambos iban en silencio, un silencio cómodo. Los dos se iban recomendando como actuar. Elliot cero nervios y Olivia cara de felicidad.

Alex por otro lado no podía estar en un mismo lugar sin moverse. Estaba muy nerviosa. Entraba y salía de la habitación donde dormía Noah y le susurraba al pequeño que todo iría bien esa noche con Elliot y Olivia. Quería tranquilizarse y esa era una buena forma, repetirse eso hasta que lo creyera.

Llegaron al restaurante, el mismo de la primera vez. Un mesero los llevó a la mesa que Elliot había reservado, la misma de la primera vez. Estaban un poco alejados de los demás.

—La misma mesa —susurró Olivia al ver todo listo para ellos.

—La misma mesa de nuestra primera cena —repitió Elliot y ella le sonrió—. Han pasado tantas cosas que no hemos podido regresar.

—Lo sé y en parte es mi culpa.

—¡Hey! No. No hay culpables. Estamos aquí para disfrutar de esta noche y esta cena. Para disfrutar tu presencia y tu belleza... En fin, para disfrutar.

—Te amo.

—Te amo más, Liv. Eres mi vida, mi mundo —aseguró y ella se estremeció al escucharlo.