Capítulo 42 (+18)

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Llegaron a casa y Olivia no dejaba de mirar su mano y el anillo de compromiso. Seguía sin poder creer que se casaría con Elliot, seguía sin poder creer que había aceptado. Era una locura. Él había regresado hace menos de un año y habían pasado tantas cosas. No habían podido disfrutar tanto tiempo de ellos como pareja pero se amaban y aunque era una locura casarse tan pronto, sentían que era lo correcto, era lo que habían esperado por tantos años. 

El matrimonio se compone de dos personas dispuestas a luchar por su relación, que se comprometen a mantenerse juntos y que trabajan día a día para ser mejores personas para el otro. Ellos tenían eso, todo lo que se necesita para que un matrimonio sea feliz y duradero.

—Gracias —dijo Elliot tomando su mano y haciendo que Liv saliera de sus pensamientos.

—¿Por qué? —preguntó confundida, acariciando su rostro.

—Por hacerme feliz. Por aceptar dar este gran paso en nuestra relación. Por permitirme estar a tu lado. Por existir al mismo tiempo que yo.

—Te amo. No sabes cuánto te amo.

Se besaron. Un beso dulce, tierno. Un beso lleno de amor que poco a poco se fue convirtiendo en un beso intenso, desbordante de pasión y deseo. Sin dejar de besarse caminaron a su habitación. Olivia necesitaba de sus besos y caricias para olvidar lo malo, siempre funcionaba. 

Cerraron la puerta de la habitación y ella pegó a Elliot a la puerta. Devoraba sus labios con ímpetu. Elliot recorría su cuerpo por encima de la ropa atrayéndola más a él. Ella empezó a quitar la corbata y la camisa muy rápido pero él en cambio se quería tomar su tiempo. 

Se dio cuenta lo ansiosa que estaba Liv por hacer el amor. Elliot tomó sus manos que ya estaban bajando el cierre de su pantalón, no quería hacerlo rápido. Quería que ella disfrutara de sus besos, caricias, que disfrutara de su amor. Comenzó a besar sus manos y subió por una de ellas hasta su cuello, besando y mordiendo un poco. Se puso detrás de ella y bajó lentamente el cierre de su vestido. 

—Me encantas. Eres preciosa —susurró en su oído y bajó con besos y mordidas por su espalda haciéndola vibrar y desearlo aún más. 

Quitó su vestido sin prisa. Sin dejar de besar cada parte de su cuerpo y luego quitó su brasier. Hizo que Liv se acostara en la cama. Ella puso sus manos nuevamente en el cinturón y en el cierre del pantalón de Elliot pero él quería que disfrutara ella primero así que las quitó otra vez. 

—Ell —se quejó ella con la respiración irregular.

—No hay prisas, mi amor.

Se besaron apasionadamente y Elliot con una de sus manos recorría el cuerpo de Liv. Quería grabar su cuerpo en su mente. Quería guardar esos momentos con ella para la eternidad. Su mano rozó su sexo por encima de su ropa interior y ella arqueo su cuerpo. Sus caricias la estaban volviendo loca. Sólo pensaba en que lo necesitaba dentro de ella. Siguió subiendo por su vientre, luego llegó a sus pechos los acariciaba de uno en uno. Suavemente los estiró apretando un poco. Ella jadeaba y gemía con los ojos cerrados. Hacia movimientos circulares con sus caderas para rozar su miembro y él estiraba sus pezones más fuerte. Llevó su boca hasta uno de ellos y sentía como Liv se estremecía bajo él, amaba sentirla de esa manera.

Subió por su cuello y acarició los labios de Olivia. Ella respiraba más agitada y cada vez estaba más excitada. Volvió a sus pechos los masajeaba y torturaba otra vez. Bajó una de sus manos por su vientre mientras la empezaba a besar con vehemencia, metió su mano dentro de su ropa interior y acarició su sexo. Estaba tan lista para él. 

Introdujo un dedo dentro de ella sin dejar de besarla, gimió en su boca. Oleadas de placer recorrían todo su cuerpo. Con su pulgar rozaba su clítoris y ella jadeaba en sus labios. Hacía movimientos circulares y otro dedo acompañó al primero. Pronto llegó al punto máximo de excitación y se dejo llevar por su orgasmo. Pero ahí no terminarían las cosas. Elliot se arrodilló y Olivia hizo lo mismo después de regular su respiración un poco. Intentó otra vez quitar el cinturón y bajar el cierre de su pantalón, esta vez dejó que lo hiciera.

Se besaban a la vez que ella trataba de quitar sus pantalones y lo consiguió con ayuda de él. Liv seguía con la parte de abajo de su ropa interior y Elliot con su bóxer. Ella metió una mano dentro del bóxer de él y empezó a acariciarlo, de arriba a abajo. Quitó sus bóxer rápido, seguía ansiosa por sentirlo dentro de ella. 

—Te ayudo con esto —dijo mordiendo su labio y poniéndose detrás de ella para quitarle lo que quedaba de su ropa interior. 

Pegó su cuerpo al de ella y pudo sentir su erección en su trasero. 

—Ell... mmm —gimió. 

Estaba sorprendida y excitada a la vez. Nunca lo habían hecho de esa manera. Elliot la dejó completamente desnuda y pegó su pecho a la espalda de ella. Una de sus manos volvió a bajar a su sexo para acariciar su clítoris mientras que con la otra su miembro hacía fricción en su entrada. 

—Ell... ¡Dios! Por favor —suplicó. 

Movía sus caderas hacia atrás y en círculo. Elliot mordía un poco su hombro mientras seguía con su juego. 

—Otra vez... ahhh... Ell... ¡si! —dijo ella sintiendo otro orgasmo aproximarse. 

Puso una de sus manos por detrás del cuello de Elliot y se besaron. Liv tuvo su segundo orgasmo de la noche y sentía su cuerpo temblar con sólo el roce de sus manos en ella.

—Te amo. Te amo tanto, Liv.

Devoró sus labios con fervor y la acostó en la cama para que se recuperara de sus recientes orgasmos. Él no espero mucho por ella y se posicionó en media de sus piernas. Estaba con los ojos cerrados tratando de respirar normalmente cuando lo sintió ingresando en ella y dio un pequeño grito. 

—¡Dios! ¡Ell! —exclamó ella y por inercia cerró un poco sus piernas.

—Abre las piernas un poco cariño —pidió y ella lo hizo tratando de acostumbrarse a su miembro—. Se siente tan bien estar así contigo. Cada vez más increíble Liv.

Él empezó a moverse lentamente dentro y fuera de ella. 

—Elliot... vas a matarme... Por favor —pidió cuando él jugaba en su entrada. 

Aceleró el ritmo de sus embestidas y eso era lo que ella quería. Sus frentes estaban pegadas, sus cuerpos sudados y sus ojos no dejaban de mirarse. Iba lento y luego rápido hasta que después de un minuto sólo era rápido. 

—Ell... ¡Si!... mmm ya... ya no puedo —dijo ella sabiendo que otro orgasmo estaba por llegar a ella. 

Sentía su cuerpo vibrar. Calor y frío a la vez. Una corriente recorriendo desde la punta de sus dedos a la punta de su cabello. 

—Sólo... sólo un poco más, Liv —pidió él sintiendo que estaba por llegar a su clímax también. 

Ambos tuvieron a la vez un increíble orgasmo. Sus respiraciones eran irregulares. Elliot salió muy despacio de Liv y ella se quejó un poco, su cuerpo seguía sensible por aquellos encuentros. Tres orgasmos en una noche y se sentía en la gloria. Él con sus caricias y su amor borraba todo lo malo de su mente. 

"Es lo correcto. Lo amo y él a mi. Aceptar casarme con él es una de las mejores decisiones que pude tomar" se dijo abrazándolo y quedándose dormida.


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No sé de donde me salió esto pero salió 🙈 Espero no haber dañado la mente de nadie jajaja bueee en estos capítulos ya me aman ¿no?

Psdt: Feliz día de la mujer a todas 😘😍❤

Sweet ♡

Esto es amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora