A la mañana siguiente, me levanta con una fuerte preocupación.
Cuando pensé en mis nuevas habilidades, no pude evitar sentirme feliz. Pero...
Si yo puedo hacer esto... ¿Qué hay de los héroes?
Toda la noche estuve pensando en las habilidades que ellos podrían tener.
¿Ellos también recibieron Habilidades Únicas como yo?... ¿Qué hay de sus habilidades mejoras?... ¿También pueden tener armas divinas?
Esa mañana, la gaste en una innecesaria preocupación.
...
Cuando finalmente pude calmarme, tome agua y salí del cubo.
- ¡Ahora, a trabajar!
Ayer pude hacer algunas cosas imaginándolas. Ahora voy a ver hasta dónde llega esa capacidad.
- ¡Lo primero!, necesito espacio.
En un segundo deshice el cubo y empecé a arrancar lo arboles a mano.
- Aunque no es difícil. Arrancarlos es una tarea tediosa.
Después de arrancar algunos árboles, me aburrí y me puse a descansar.
- ¿Tal vez pueda quemarlos?
No, no... Eso sin duda llamaría la atención.
Después de deshacer esa mala idea, me hacer que a un árbol y antes de arrancarlo, pensé.
- ¿Y si?
Con una idea singular, puse mi brazo firme, como una espada y apunte a la base del árbol.
- ... ¡Aquí voy!
Después de relajarme, extendí mi brazo y corte el árbol.
- ¡Lo logre!
Después de eso, me deje llevar y corte más de lo necesario.
- Necesito aprender moderación.
Después de cortar lo arbole, los apile en un solo lugar.
Ya tengo el espacio.
- ¡Lo segundo!, hacer una casa.
Puse mis manos en la tierra y me concentre. Al minuto, la tierra se sacudió, hasta formar un piso lizo.
- ¡Listo! Ahora unas paredes... y finalmente un techo.
Cuando acabe, una casa un poco grande fue creada.
- Tal vez deba volverme arquitecto, ¿Verdad?
- ...
- ... Estar mucho tiempo solo... ¡No es bueno!
Después de acabar con el exterior, ingrese a la casa.
- Es más espacioso de lo que imagine... Bueno, ¡Manos a la obra!
- ...
- ... Estar mucho tiempo solo, realmente me afecta.
...
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¿MI TRABAJO?... ¡REY DEMONIO!
Fantasy¿Cómo?... ¿Cómo termine en esta situación?... Se supone que en esta situación, yo debería ser un héroe invocado para salvar el mundo. Pero... me dices que voy a ser el ¡Rey Demonio! ¡Nunca!, en ninguna historia que he leído ¡jamá...