33 "Fin del acoso"

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Di una vuelta por toda la planta pero no había encontrado a Jung Kook. Puede que no esté aquí de verdad y Ji Won solo ha visto una aparición.


Fui a la primera planta y también di una vuelta pero no he visto ni la sombra de Jung Kook. Cuando me cansé decidí salir del centro comercial y  volver al hotel. Estaba caminando hacia la salida cuando saqué el móvil. No estaba encendido por eso no sonaba ni vibraba dentro del bolso. 


Salí y busqué la parada de taxi. 


—Perdona, ¿es aquí la parada de taxi? —pregunté a la guarda de seguridad.


—No es aquí señorita, está es la salida norte. La parada está en la otra salida —contestó y di las gracias. 


Iba a entrar de nuevo cuando de repente sonó mi móvil. Es Jung Kook...


—¿J-Jung Kook? —dije en un susurro y me senté en los bancos cerca de la entrada. 


—(Por fin me contestas, mi amor) —Respiró aliviado desde la otra línea. 


No pude decir nada más y solo escuchaba su respiración. Sentí por primera vez que le extraño de verdad. Su voz, su mirada que me debilita las rodillas y sus caricias...


Me limpié la lágrima que se me había escapado. ¿Qué he hecho? Necesitamos hablar. Tengo que salvar nuestra relación mientras que haya una manera. Le amo y necesito confirmar si también es lo que siente. 


—(¿Dónde estás?) —pregunto rompiendo nuestro silencio. 


—E-Estoy en Busan —contesté mirando a la gente que entraba en el centro comercial.


—(Lo sé, ¿específicamente en que parte de este centro comercial estás?) —preguntó. Parece que un coche pitó detrás de él y escuché como cambiaba la marcha. 


—Según parece estoy la entrada norte —contesté y me levanté.


—Vale, quédate allí —dijo y colgó. Agarré bien la bolsa que llevaba en la mano. Cada vez que se paraba un coche delante me acerco, solo para descubrir que no es para mí. ¡Mierda! Jung Kook...


Unos minutos después un coche que venía del aparcamiento paró justo delante de mí. Se abrió la puerta del conductor y Jung Kook se acercó enseguida a mí. Mi corazón latió aceleradamente al verle. Quería reírme por su cara de cachorro abandonado pero me controlé porque aún tenemos que hablar para arreglar las cosas. 


Me abrazó con mucha fuerza.


—Me dejaste —susurró en mi oído y me dio un beso en la mejilla. Mordí mi labio inferior y le agarré del brazo. Nos miramos a los ojos. 



—Tenemos que hablar. 


Cautivada (BTS JK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora