Maldito Infierno +18 (COMPLETO, SIN EDITAR)

Capítulo 13. 🔥

Nate

Nathaniel Beckett es el nombre que me puso mamá, el que a ella le gustó, aunque papá no estaba de acuerdo, él nunca se involucró en nada que tuviera que ver con la educación de sus hijos, mucho menos con sus nombres. Casi todos o, mejor dicho, todos me dicen Nate y me gusta, también me encanta Nathaniel.

—No pensé que estuvieras aquí.

Seth se pone a mi lado y enciende su cigarrillo.

—Me sentía solo.

Me encojo de hombros.

—Siempre estamos solos.

Bota el humo y pone una mano sobre mi hombro.

—Nuestro padre me pidió que te convenciera, dado que ahora que estás tan cerca de Vera, para que uses a esa chica para destrozarla.

—¿Eso dijo?

Asiento.

—No se me hace raro que te lo haya pedido.

Los dos miramos la tumba de nuestra madre. Solo han pasado unos meses, pero la herida sigue abierta como si hubiese sido apenas ayer que ella falleció. Su muerte es algo que nunca podré asimilar.

—Si tú amas a esa chica debes ignorar todo lo que papá te diga. Debes luchar por ella y ser feliz... Eso te hubiera dicho mamá.

—Lo sé y de verdad quiero ser feliz con ella. Me hace bien estar a su lado.

—¿La amas? —inquiero sin dejar de mirar la lápida.

—¿Qué es el amor? Siento muchas cosas cuando estoy con ella... Me siento como en una nube, pero no sé —suspira.

Debe ser hermoso estar enamorado, así como lo está Seth de ella. Ha de ser grandioso que alguien te mire con amor o despertar al lado de esa persona, y saber que alguien en el mundo te ama a pesar de las malas decisiones que has tomado y... de lo cruel que puedes ser.

Si Seth, siendo como es, ha encontrado a alguien que lo ama a pesar de todas las cosas, creo que yo también puedo encontrar la indicada que amará así o más, ¿no?

No pierdo la esperanza, algún día sucederá.

Nelly

—¡Déjalo! —gruño asustada y molesta—, ¡Seth, déjalo ya! —Lo agarro de la chaqueta, pero él sigue dándole golpes a Billy en la cara—. ¡Maldita sea, Seth!

Estrella la cabeza de Billy en el pasto y sigue dándole puñetazos. Veo que Pete se acerca y me hago a un lado.

Vera sale de la casa y se queda con la boca abierta ante la escena que tiene enfrente.

—¡¿Qué carajos pasa aquí?!

Pete los separa. Vera observa a los dos chicos que están cubiertos de sangre.

Ninguno de los dos dice nada, pero se miran con tanto odio y con ganas de querer matarse. Seth se acomoda la chaqueta, se mira las manos, revisa sus nudillos rojizos, Billy se levanta del suelo y se limpia la sangre de la boca.

—Nelly, llévate a Seth, cúralo y habla con él. —Ella se acerca a Billy—. Y tú ven conmigo, mira cómo te ha dejado.

Se lo lleva.

—¿Estás bien? —me pregunta Pete. Asiento con la cabeza.

—Sí Pete, gracias —asiente con la cabeza y se dirige a Seth.

—Y tú, niño. —Mira a Seth—. Más te vale que no le hagas nada a Nelly o te las verás conmigo.

Forma un puño con su mano y lo estrella contra su palma.