Todo había cambiado, mi padre había puesto hombres de seguridad en cada esquina de la casa, y a mi no me puso guardaespaldas porque: uno, yo me negué y dos porque Sander le dijo que el me llevaría y traería de la escuela... Pero cuando saliera con Nati iría algún hombre conmigo. Darrell había ido un par de veces al hospital pero no quise hablar con él y además Sander no se lo permitió.
Hoy en la tarde había llegado a mi casa, los chicos me habían dado la bienvenida, todos estaban aquí, hasta Benjamín y Peete, Alex estaba de viaje pero llegaría pronto. James y Emylie habían llegado un rato después y Peete había quedado enamorado de Emylie, y no lo culpaba, así que James no se separó de ella hasta que se fueron. Sander estuvo la mayor parte del tiempo a mi lado, mis padres habían invitado a los padres de mi novio así que fue una noche inolvidable.
El doctor me había mandado una farmacia en medicamentos, ya había perdido la cuenta de cuantas pastillas había tomado. Estábamos en mi habitación, yo sentada en mi cama mientras que Sander buscaba un medicamento en mi botiquín, mi madre había ordenado mi habitación y la sala ya que todo había quedado destruido.- Toma- me tendió el vaso con agua y la pequeña pastilla.
Me metí la pastilla en la boca y trague con un trago de agua, bebí dos tragos mas y deje el vaso en mi mesita de noche. Abajo se escuchaba musica, Nati, Luis, Ethan y Nathan aun estaban aquí junto con los padres de mi novio.- No sé como haré para tomar tantos medicamentos- Sander río- No te rías, es la verdad, juro que me siento drogada o lo que es peor que soy una drogadicta pero de las peores.
Se acercó a mí y me dio un beso en mis labios.
- Ya te extrañaba- sonrei y apoyé mis manos en su cuello.
- No más que yo- lo besé de nuevo, comenzó a inclinarse hasta que estuvo acostado conmigo debajo de él. Dios mio, como deseaba a este chico.
Bajó su mano hasta mi cintura subiendo mi blusa, el beso se hizo más apasionado, nos separamos para tomar aire y luego volvió a besarme, su mano bajó hasta mi muslo y le dio un apretón, solte un débil gemido cuando enredo su lengua con la mía, desabroché los botones de su camisa celeste rápidamente y se la saque tirándola al suelo, desabrochó el botón de mi pantalón.
- ¿Estas segura de esto?- dijo en mis labios.
- Nunca había estado mas segura de nada- por suerte ya me habían quitado el yeso, así que ya no era un impedimento.
Me sacó la blusa, comenzó a darme besos en el cuello haciéndome cosquillas. Volvió a besarme con desesperación, me di la vuelta quedando encima de él, acaricio el cierre de mi sostén, sonrió aún besandome, su dedos bajaron una tira de mi sostén y entonces la puerta sonó. Nos separamos y nos quedamos mirándonos.
- Chicos, ¿están ahí?- me puse de pie de inmediato y busque mi blusa, le lance la camisa a Sander.
- Un momento mamá- dije, me coloque la blusa y abroche mi pantalón, Sander abrochaba los botones de su camisa.
Me arregle el cabello y Sander hizo lo mismo.
- Ve al baño, rápido- se acercó y me dio un beso y luego cerró la puerta del baño. Abrí la puerta de mi habitación y mi madre levanto una ceja.
- ¿Por qué tardaste en abrir?- la miré sorprendida, trague saliva.
No es momento de ponerte nerviosa.- A- a porque me estaba tomando el medicamento, lo estaba buscando en el botiquín- ella asintió dudosa.
- ¿Y Sander donde esta?- me rasqué el brazo disimuladamente y sonrei.
- En el baño- me miró algo seria.

ESTÁS LEYENDO
Trato Echo
Fiksi RemajaIsabella, es una chica de 17 años, cursa el undécimo año de secundaria. Es una chica inteligente, con una sonrisa en su cara la mayor parte del tiempo. Pero en ciertas cosas saca a relucir su orgullo y su prepotencia. Pero esos sentimientos de orgu...