MI HIJA

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Kotoko -en cuanto salió del hospital, sintió un gran peso en su cuerpo, los párpados le pesaban y su corazón dolió con gran intensidad con mucho dolor durante segundos...Se mantenía de pie, ya no iba a dejar que la viesen derrotada. Presionó su puño con gran fuerza levantando la mirada, alrededor de ella nadie ponía atención a excepción de Keita que la abrazaba por la espalda-; Keita.. -susurro suavemente para llamar la atención del chico-

Keita -se agachó un poco para verla directamente a los ojos, vio la conducta que tomaba y se sintió inseguro de lo que le sucedía, pero el la apoyaría a pesar de todo-; ¿Mande pequeña?, ¿Te sientes mal?

Es normal, juzgando la situación que sucedió hace un momento acerca de lo de tu hija.

Kotoko -negó lentamente pasando sus manos por las mejillas de Keita, acariciaba acercándose para fundirse en un dulce beso, la hizo sentir bien. La calidez de la piel de Keita, el no se rehusaba pero tampoco apresuró el beso...duro unos cuantos minutos, hasta que se separo sonriendo y se estiró con mayor energía, se sintió como una pila que acababa de ser recargada-; Ya me siento mucho mejor que antes, así esta mejor. -tocó sus labios y corrió rápidamente a ningún lugar, solo quería sentirse mejor-

Keita -la siguió por detrás corriendo, un pequeño sonrojo se notó en sus mejillas y sus ojos brillaron llenos de vida.-; ¡Ven a aquí! -grito llamando la atención-

El pelinegro llamo la atención de todos los que pasaban, algunos médicos vieron todo lo sucedido con gran expectación..."El gran médico, esta siendo engañado". Los rumores corrieron como agua en un río,  el ambiente laboral se hizo más agobiante para Irie quien ya ni en su trabajo encontró paz...Sin en cambio a la pareja de amantes, en ningún caso le importó nada los rumores eran felices tan y como estaban en ese momento.

Irie -observó a través de la ventana de su oficina, sintió aquellos sentimientos encontrados de nuevo, presionó su pecho con una de sus manos-; Tal vez tienen razón, debería tomarme unas vacaciones por dos semanas...No es para huir, ya que en mi casa no puedo concentrarme o estudiar, será con fines de estudios fuera de casa. -sonrió un poco astuto, aunque aquella excusa le funcionaba por dentro sabía que era mentira todo aquella, lo tenia harto la situación de la infidelidad y el tema sobre su hija-


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Ya que le pique mal al botón, aquí tienen la primera parte del capitulo.  Adelanto...

;-;

Siempre me pasa lo mismo, disfruten un trozo.

Una vida mejor para mi (Kotoko)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora