Una vida mejor para mi (Kotoko)

Irie

Irie de nuevo estaba lastimado, herido y roto.
Ya no se sentía así desde hace mucho, la verdad dolía y mucho. Aun no había superado el hecho de su separación y ahora que su ex esposa tuviera otro hijo, era inaceptable.

Pero al fin entendió, lo hizo.

Kotoko no era su esposa en el tiempo que estuvieron juntos, fue su objeto, algo que ignoro y descuido, que sobajo por su trabajo y lastimó. Estuvo mal, lo sabe.

Pero algo volvió a romperse el día de hoy.

Irie se fue a su casa con su hija en brazos, no hubo palabras de consuelo entre ambos castaños hasta que volvieron al departamento.
Las miradas caídas y con el ánimo bajo, querían hundirse en su cama por días para superarlo y volver a la terapia.

Irie no pudo abrir la puerta, una actividad tan fácil le costó mucho trabajo y por el ruido de las llaves llamó la atención de su vecina que aún no dormía.

Nanami -Salió por la curiosidad, vio a su vecino tratando de abrir la puerta y río de forma burlona.-; ¿Vienes borracho?, no deberías ir con una niña a un bar. Que mala persona~ -se río de nuevo por su broma, asomaba la cabeza y lo miraba haciendo vanos intentos aún. Hasta que se le cayeron las llaves y vio algo que no espero.- Oye, oye....Nunca pensé que lo vería, creo que es mas fácil ver a un pinguino volar. No llores. -Fue a recoger las llaves, decidió no dejarle solo y lo hizo entrar hasta su cuarto.- ¿Me perdí de algo?

Irie -Se avergonzó, se sentía humillado con su hija en brazos y llorando. ¿Mendigaba por algo de amor o atención?, nunca le faltó. 
Las mujeres solían halagarlo todo el tiempo, lo felicitaba por su excelente trabajo, venía de una buena familia y tenia mucho dinero en el banco...pero eso...eso.

¿De que le servían ahora?, había arruinado su matrimonio, el amor ya no se sentía y tenia una hija que no podía cuidar bien..

Pero esa estúpida mujer, Nanami....Nanami era igual a él y no se veía miserable como el.-; ¡¿Estas tratando de humillarme más?!, ¡¿ESTO TE HACE FELIZ?!...NO SOY TU PAYASO NANAMI. -Explotó en llanto, la ira que acumuló y el estrés por el divorcio se hizo presente..Su hombro se sentía frío, su hija también estaba llorando.-

Nanami -Se sorprendió por los gritos, entendía la situación del hombre destrozado delante de ella. Lo dejo llorar, dejó de ser burlona por un momento y le acarició la mejilla con calma y ternura, a la niña le acarició el cabello. Ambos estaban destrozados.-; Cielos Irie-chan, no grites delante de la niña. No te estoy humillando y que sepas que no tengo que tolerarte, escucha. -Era difícil de decirlo- Tu mujer te dejo, tienes que ser fuerte y seguir por tu hija.
Esta bien llorar, esta bien.

Se que duele, pero lo has estado haciendo bien. -Sonrió con calma- Nunca es fácil dejar ir a quien con años estuvo allí, pero tu la trataste mal y esta reconstruyendo su vida. No todos tenemos el mismo ritmo, esta bien, esta bien...No necesitas compararte, lo se.

¿Porque ella es más feliz?,  yo no pude hacerla así, ella era mía.

Irie...Lo se. Nos acostumbramos a las personas, pensamos que por amor estarán allí toda la vida y siempre nos amarán, pero las personas se cansan. Ella merecía algo mejor, alguien que la quiera. Y tu, tú también mereces una mejor oportunidad.

Irie -Lo último de su alma y corazón se quebró, no podía parar de llorar por las palabras de Nanami. Tenia razón y en algunas cosas estaba equivocada, pero lo estaba haciendo para consolarlo.
Esa mujer lo regañaba y trataba de animarlo, una cruel bromista que hablaba tan sabiamente.

Sus caricias le provocaban escalofríos, se sentian como si llenará algo que le faltaba...La abrazo, estaba temblando y triste.-; No pude disculparme...

Nanami -Lo abrazo con fuerza, asintió a las palabras de dolor y suspiro.-; Algunas personas no podrán perdonarnos, esta bien.... No todos nuestros actos son perdonables, solo nos queda avanzar y mirar por nosotros. -Sintió las lágrimas caer en sus piernas, el llanto no cesaba y dudo que se detuviera. El dolor por fin estaba saliendo y el orgullo que se rompió, tal vez daría paso a algo mejor.- Todo va a estar bien. -Iba a mandar a Kotomi con Yasahiro, pero como si este fuera adivino fue por ella y entendió la situación.- Gracias mi héroe de noble corazón.

Los adultos quedaron en un cálido abrazo, ya no fueron necesarias más palabras. Entre los dos tenían tanto en común pensó Irie, habían sido dejados por sus parejas, estaban criando hijos solos, pero Nanami se veía más alegre y vivaz....

Irie admiro a aquella mujer entre sueños.

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Hasta aquí este capítulo ~

Espero sea de su gusto, aquí su esclava Michiru.

Leo sus opiniones sobre el capitulo.