Día arruinado o ¿no?

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La mañana era suave, algo cálida, lo ideal para un día perfecto y de juegos.
La pequeña familia de Kotoko, se alistaba para salir después de un agotadora semana de trabajo en el hospital, la castaña llevaba unas tremendas ganas de jugar y disfrutar con su amada familia.

Kotoko -salio por la puerta, su cabello estaba recogido en dos coletas, un vestido azul claro y una sonrisa hacían verla mas joven de lo que era. Esto provocaba un sonrojo en Keita, la emoción era palpable para los dos.-; Ahora, iremos al parque principal, jugaremos y comeremos helado. -saco una hoja de su bolso, señalo las indicaciones que había escrito el día anterior-

Ichiru -Tomó la nota, admiraba los dibujos de su madre y una risa se escapo, sonriendo empezó a correr delante de sus padres, sin perderse de vista y con prisa.-; ¡Jugar!,¡Jugar!...¡Vamos a jugar! -movía sus brazos junto con una sonrisa alegre, sus padres lo perseguían con el temor de perderlo.-

El transcurso del camino fue rápido, pero muy animado debido a los juegos que inventaban Kotoko y el menor, la gente observaba la peculiar familia pero ellos no tomaban importancia. Keita, se encargo de capturar algunos de los momentos tan divertidos.
El calor poco a poco aumentaba, los acalorados menores suplicaron por helado.

Kotoko -Frotó su frente con molestia, se volteo caminando hacia Keita y tomó su mano, lo llevo a una heladería. Pequeños berrinches se escaparon de sus labios.-; Demasiado calor, compra helados.

Keita -Acarició suavemente la cabeza de los menores, sonriendo con felicidad. Se acerco a la barra, sacó de su cartera lo necesario para pagar, dejo que pidieran lo que deseaban.-; Gracias. -salio del local, en la mano izquierda sostenía un cono con helado de vainilla y con la mano derecha la pequeña mano de su hijo.- Espero que eso, sacie su calor.

Ichiru -Asintió, se sonrojaba un poco, una gran sonrisa se escapó de nuevo y sostuvo con fuerza la mano de su padre.-; Si, gracias papá. Esta delicioso.. 

Y así, los caprichos de los menores fue cumplido. Una hora paso, hasta que llegaron a el parque, un pequeño lugar solitario, pero con una bella vista de árboles frondosos y colores vividos. Las sombras jugaban sobre el suelo junto con el viento, hacían ver a aquel lugar un mítico paraíso.

Kotoko -Admiro con asombro aquel lugar, un recuerdo vino a su mente e hizo que sus mejillas se pusieran en rojo vivo, un ardor con fuerza y un ligero mareo-; Necesitó sentarme... -el malestar, hizo que la llevaran a una banca y descansara, una botella de agua le fue ofrecida.-

Keita -Asintió tomándole la mano, debido que todo estuviera al menos bien, al ver como tomaba agua se relajo.-; Es debido a que corriste demasiado, hace mucho sol y por eso estas así. Debes descansar un poco. -acarició su cabello, paso sus manos por los castaños cabellos y sintió el calor que almacenaba. Quemaba, pero esa sensación le hacia saber que aquel momento era real.- Quedate aquí, iré a vigilar a Ichi.

Ichiru -Poseía mas energías que sus padres, él ya se encontraba en los juegos. Se dispuso a probar cada uno, risas escapaban de él, hasta que Keita fue a bajarlo y cuidarle-; Pero, papá. Yo soy capaz. -miro con un poco de resentimiento al mayor-

Keita -Asintió, le acarició su cabeza e insistió en que tomara un poco de agua.-; Eso es claro. Eres muy fuerte, pero debes hidratarte o sufriras una insolación.

El menor sin más, siguió cada indicación que decir el pelinegro. Pasaron una hora y media jugando. También se les unió Kotoko, fue una tarde solo de ellos.

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Una pequeña actualización.
Disculpen los meses de retraso..

Una vida mejor para mi (Kotoko)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora