Una vida mejor para mi (Kotoko)

Una noche para dos.

El día era claro, las nubes avisaban que hoy era perfecto para poder hacer un picnic.

Kotoko estaba en la puerta de su nueva casa, desde que el divorcio fue declarado se había mudado por completo con su familia, estaba feliz pero un sentimiento oprimía su pecho.

Esa noche había soñado con lo que había perdido, con lo que gano..El nacimiento de Kotomi, ese fue el primero se sus embarazos y fue frío, pero su segundo embarazo fue cálido y dulce.

Kotoko -Puso su mano sobre su corazón, este dolía un poco y quería calmar la sensación a toda costa.-; Kotomi lo siento, mi pequeña hija. -Suspiro un poco, pero las lágrimas no evitaron correr y su respiración se agitó, el puñal del recuerdo se clavaba y se ponía nostálgica.- Estarás bien con tu padre, tengo que hacerme cargo de Ichiru, el también es mi hijo y es mas dulce que tú. -No, eso no estaba bien. No podía comparar entre sus hijos, a ambos los amaba, su reflexión la llevó a pensar se manera profunda pero se interrumpió al sentir una mano sobre la suya.-

Ichiru -estaba viendo a su madre llorar, no sabia que pasaba y decidió ayudarle. Cuando el lloraba ella lo atendía, le daría amor a su madre.-; Mamá todo va a estar bien....no tienes que llorar más. -sostenía la mano de la mayor, se abrazo de su pierna y sonrió con dulzura.- Mamá te amo...

Kotoko -Sostuvo la mano del menor con fuerza, al sentir el abrazo en sus piernas se quebró....Ambos hijos eran completamente diferentes, no sabia si estaba bien amar a uno más que al otro. Se agachó para abrazar a su hijo.-; Mamá esta bien, no te preocupes por nada.

Ichiru -Negó acariciando el cabello castaño de su madre, este se sentía mal por ella.-; Mamá me preocupo porque te amo, yo también lloro si mamá llora. -Lágrimas se deslizaron, se sintió triste ya que su madre estaba triste.-

Kotoko -Trato de sonreír pero lloro, lloraba con su hijo en brazos.-; Mamá también te ama...Te ama demasiado. -lloro, lloro por las oportunidades que desperdicio con su otra hija, tuvo que elegir y escogió a Keita y a Ichiru. No todo siempre es ganar.-

Madre e hijo lloraron por un buen tiempo, ambos encontraron el consuelo en el otro. El amor se sentía junto con un aura de melancolía, ese día era para jugar, pero lloraron y Keita no estaba. Ambos terminaron con los ojos rojos de tanto llorar, después de desahogarse entraron a la casa.

Ichiru -Estaba sentado en el sillón recostado en el regazo de su madre, ya estaba mejor.-: Mamá quiero visitar a la abuela, quiero comer su delicioso pastel.

Kotoko -Asintió acariciando su cabello, este le resultaba hermoso y llamativo, gris, ella era castaña así que resaltaba. Imagino a la madre de Keita y sonrió.-; La abuela Mary pronto vendrá, sabes que vive algo lejos.

Ichiru -Negó mientras se levantaba del regazo de su madre, la miro un momento y sonrió, era gracioso que lo confundiera asi.-; Hablo de la abuela Nori, quiero que sepa que estoy bien...Mamá vamos, vamos.. -Comenzó a agitarla desde el brazo, se notaba la emoción del niño.-

Kotoko -Primero se sintió confundida, pero asintió a la propuesta del niño, seria buena idea visitar esa casa de nuevo y a su madre, la extrañaba.-; Está bien, iremos a ver a abuela Noriko, pero calma te un poco.

La castaña se levantó de su asiento, tendría que cambiarse a algo más presentable e igual al Ichiru.

Con emoción la castaña se preparó, traía dos cascos de motocicleta. Llevo a su hijo de la mano, lo subió detrás de ella y le puso el casco, seguridad ante todo, arrancó y fue a la antigua casa donde vivía.

El camino fue relajado, casi no hubo tráfico y el aire estaba fresco, ambos disfrutaron de la vista de las calles, el niño no conocía ese camino y le gustó conocer una zona nueva. Ver a su abuela era algo que le emocionaba, sabía que era madre de su mamá,  pero a veces se preguntaba porque eran algo diferentes.