Después de los maravillosos días que pase junto a Alex en París, mis días de descanso se acabaron y era hora de volver a casa.
Me levanté muy temprano para empacar mis cosas, Alex aún dormía en la cama, al terminar de empacar mis cosas me acosté junto a Alex y solo lo observaba, no me entraba en la cabeza como me podía enamorar de un hombre tan rápido, después de mi última relación con Diego, creía que no podía volver a enamorarme, hasta que pareció Alex.
-¿qué tanto me miras?
Estaba tan metida en mis pensamientos, que había olvidado que él podía despertar en cualquier momento.
Alex se sentó en la cama tomándome por la cintura y besando suavemente mis labios, me levanto y me tumbo en la cama, quedando él sobre mí.
-eres todo lo que siempre quise.
Lo tomé por el cuello besándolo apasionadamente, me separé del casi sin aire.
-es hora de empacar Alex.
Alex comenzó a hacer pucheros, se veía realmente adorable.
-quiero quedarme aquí para siempre contigo.
-es hora de irnos.
Nos levantamos de la cama y Alex comenzó a empacar sus cosas, al terminar de empacar cada uno cogió sus cosas y nos dirigimos al ascensor, presionamos el botón para llegar a recepción, el chófer de Alex nos estaba esperando en la entrada.
-Raily entra nuestras maletas al baúl, por favor.
Nos subimos al carro y nos dirigimos a su avión, después de un largo tiempo llegamos de nuevo a nuestro hogar, estaba bastante cansada al igual que Alex.
Raily me dejo en la entrada de mi casa, antes de bajarme le planté un beso a Alex.
-voy a extrañar verte por las mañanas.
-yo también lo voy a extrañar Alex.
Entre a mi habitación y mi mirada se fue hacia el reloj, eran las 5:00 pm, estaba bastante temprano, así que decidí saludar a mi padre y a mi nana para irme a dormir.
Un sonido muy fuerte me despertó, mire a mi alrededor, pero estaba tan oscuro que no podía ver nada, supuse que había sido afuera, por lo que no le di importancia y me volví a acostar, pero escuche como mi ventana estaba abriéndose poco a poco mi cuerpo se comenzó a enfriar, realmente estaba asustada, solo cerré mis ojos, no tenía valor para prender la luz.
Sentí con algo, se apoyaba en mi cama, estaba totalmente petrificada, no podía moverme, el miedo me lo impedía, comenzaron a respirar en mi cuello.
-Camila- me susurraron en el oído
inmediatamente, mi cuerpo se relajó, al reconocer aquella voz, me tomaron por la cintura y me voltearon.
-Alex, pero... como... tú ... ¿Cómo entraste? - dije nerviosa
-solo tuve que trepar a tu ventana Camila- Alex estaba riendo
-pero Alex estás loco mi padre te pueden oír- mi cara se tornó seria
-lo siento Camila. Yo solo extrañaba tenerte a mi lado.
Le tomé suavemente la cara y lo besé
-yo también te extrañé- una sonrisa se plantó en mi boca
El sonido de una puerta abriéndose nos sobresaltó a los dos, era la puerta del cuarto de mi padre abriéndose, ¿qué iba a hacer si entraba?, me levanté rápidamente de la cama y le puse seguro a la puerta, escuchaba como unos pasos se acercaban a mi habitación.
-me van a matar si te descubren.
Alex lo único que hacía era reírse y hacía aún más ruido caminando por la habitación, lo cual me puso más nerviosa. Efectivamente, comenzaron a tocar mi puerta, inmediatamente la cara de Alex paso de burla a miedo.
-¿Camila?, ¿tú escuchaste ese ruido? - era la voz de mi padre.
-papa déjame dormir, no escuche nada.
-te noto la voz rara, déjame entrar.
-Alex escóndete- susurré.
Alex se metió rápidamente en mi armario y yo tuve que abrir la puerta de mi habitación.
-papá, déjame dormir, llegue muy cansada.
Mi papá comenzó a mirar por toda mi habitación.
-lo siento, creí oír voces- mi papá salió de mi habitación y se fue a la de él.
Cerré la puerta poniéndole seguro, Alex salió del armario riéndose mientras se tapaba la boca.
-por poco.
Alex se acercó y me tomo de la cintura pegándome contra la puerta y besándome, separo sus labios de los míos.
-si por poco- Alex se rio, y me volvió a besar.
Me tomo y me puso en su hombro llevándome nuevamente a la cama, me recostó y comenzó a besarme, se acostó a mi lado y nos quedamos mirándonos, hasta quedarnos dormidos.
Mi alarma me despertó, Alex no estaba por lo que supuse que había salido muy temprano, me pare y fui a mi ducha, pero vaya sorpresa, Alex se estaba bañando, me quede observando cómo se bañaba luego de un rato noto mi mirada y se acercó a mí para besarme.
-buenos días.
Estaba bastante feliz porque estaba aún en mi casa, no estaba preocupada, ya que mi padre al igual que mi nana no estaban.
Alex salió del baño y se cambió.
-tengo que irme, pero tal vez vuelva por la noche.
-espero que te vaya bien- dije sonriendo
Alex salió de mi casa, subí a mi habitación y me puse música a todo volumen, realmente Alex era perfecto para mí y me alegraba tenerlo junto a mí.
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¡El Jefe De Mi Papá!
RomanceQue les puedo decir, sus besos, sus caricias. Se ha abierto paso en mi corazón con solo su mirar, pero como evitarlo. Es que ¡Joder! El jefe de mi papá esta buenísimo.