Noche llena de felicidad en el palacio real. Los varios monarcas habían preparado un gran banquete en honor al ejército espartano. Giles pertenece a la caballería real, por lo que ya conoce a los miembros de la realeza. Mientras, salen numerosas bailarinas para hacer varios espectáculos de danza, como es costumbre. Tiempo después, todos disfrutan de la larga noche. No obstante, Ángela no se veía entre ellos, ni bebía ni nada por el estilo, y menos si Aetos la vigilaba de cerca, con la mirada fija. Vió que Giles no estaba, púes estaba hablando con los varios monarcas sobre las futuras guerras que se podían dirigir a Esparta por parte de Atenas, no quería estar cerca de todos esos hombres borrachos y llenos de humor. Por lo tanto, decidió dar algún paseo por palacio, intentando esquivar a Aetos por algún momento. Quería sentirse libre, aunque sabía que iba a ser muy difícil estando en un ejército.
Numerosas damas se iba encontrando, y la verdad es que no le miraban muy bien. Había una mujer en peculiar que se le dirigió por la espalda; sigilosamente le toca el hombro.
-¿Perdona?
-¡Ah!... Cielos....
-Mmmmm....¿Estás bien?
-Si... Es que me he asustado....
-Ah, jajajaja, no te preocupes, no muerdo.
-¿Pasa algo?
-No, si me haces caso.
-(....)
-Soy la esposa de Aetos, Marilee. Tú, debes de ser Ángela, la nueva guerrera de Giles. ¿Me equivoco?
-En absoluto.
-Ten mucho cuidadito, no eres bien recibida aquí; me da igual que Giles te haya aceptado, lo que te recomiendo es que desaparezcas.
-Risa es lo que me das. Lo siento, pero no tengo por qué hacerte caso, se lo que tengo que hacer,y tú, no eres quién para ordenarme nada. Giles es mi general, al único que obedezco.
-Veo que mi marido no se equivocaba en que tienes mucho carácter. Eso es importante en una guerrera.
-Lo es.
-¿Y que pasaría...si a tu familia le pasase algo...?
-No te atrevas a amenazarme. ¡¡Déjalos tranquilos!!
-Oh, querida, bajo ese carácter, hay un ignorante corazón.
-Que sabrás tú.
-Más de lo que puedo expresar con palabras. He de atender unos asuntos. Anda, se buena chica, y desaparece.
-(....)
Marilee aparenta irse a hacer tareas, pero en verdad va hablar con su marido, quién estaba atento a la conversación.
-Maldita....¿Quién se creerá para responder así?
-Calma...sabe lo que pretendemos.
-Si fueras más listo hubieras disimulado
-Cállate. ¿No te das cuenta?
-Explícate
-Giles se está enamorando de ella.
-Te recuerdo que solo eres su consejero, el tiene mucho más poder que tú. Es gran amigo de los monarcas....ya sé lo que va a pasar.
-¿El qué?
-Tienes que ser tú el general.
-¡¿Como?!
-Precedo que Giles....será en un futuro alguien de la realeza...tendrá mucho más poder que ahora, y lo más importante...Ángela igual.
-¡¿Los quieres matar?!
-Es la única opción si queremos conseguir lo que siempre deseamos.
-Estás loca. Este estúpido plan lo ideaste tu. Giles más que mi general, es un amigo. ¡Tengo un cargo!
-Entonces déjame el asunto a mi, tema zanjado.
-¡Ni se te ocurra! ¡¡Marilee!!Marilee, temida por muchas personas por sus poderes adivinatorios y perserverancia. Es la que ideó todo el plan antes de que Ángela llegase.
Aetos decidió ayudarla, como marido suyo que es. No obstante, no está mucho por la labor de decepcionar a Giles,...pero...¿Qué pensará sobre Ángela? De verdad quiere lo peor para ella,...o, no es el mismo por culpa de su mujer. Lo que está claro es que ni Giles ni Ángela se dejan llevar por lo que le dicen los demás así como así.
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Espartana
RomanceLa guerra y el amor dominan esta historia de estilo bélico y romántico. Esta novela, centrada en la guerra de la Liga del Peloponeso, liderada por Esparta, contra la Liga de Delos, liderada por Atenas, trata de una joven espartana que no se deja pis...