CAPÍTULO 62: Un momento inolvidable.

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Esa mañana desperté temprano debido a las ansias. Ya no podía esperar para poder volver a verlo, esa tarde Edward conocería a Harry como su padre, me alivió el hecho de saber que no tendría que darle muchas explicaciones a Edward ya que solo era un niño de dos años, pero de todas formas sería algo nuevo para él, imagínense…un nuevo padre…

Me gire y vi como Edward dormía tranquilo a mi lado, lo contemplé con ternura y besé su naricita, me levanté de la cama, dispuesta a preparar los desayunos para mi, Edward y mi madre.

Luego de un rato sentí que me tiraban de la ropa.

-Mami-dijo mirándome

-¿Qué pasa bebe? ¿Tienes hambre?-dije cargándolo

-Sí-dijo apoyando su cabeza en mi hombro.

-Ya, ya…mira, ya esta, aquí está tu biberón.

Él lo tomo con una mano mientras que con la otra se aferraba a mi cuello, yo, al igual que él, lo cargué con una mano mientras con la otra intentaba tomar el café de la taza.

Después de unos momentos mi madre se levantó, cargó a Edward con entusiasmo como siempre y luego desayunó.

-___(tn) me olvide de preguntarte…¿Qué pasó ayer?

-mmm…bueno…Harry quiere hacerse cargo de Edward-dije mientras le daba el último sorbo a mi café.

-¿y lo dejaste?

- ¡y claro!

-¿y cómo lo tomo? 

-¿Ah?

-¿Cómo tomo que Edward era su hijo?-explicó.

-Bien, bastante bien, no esperé que lo tomara de esa forma, nunca pensé que se enteraría en realidad, pero todo siempre se termina sabiendo…

Ella asintió.

-y bueno…que se le va a hacer…

De repente mi rostro se paralizó y me llevé las manos a él, estaba recordando el motivo del porque me había ido, me estresaba la idea de que los demás se enteraran que Edward sí era hijo de Harry y que la noticia destruyera lo que los chicos habían logrado hacer hasta ahora, pero ya había pasado mucho tiempo y solo quería volver a ser feliz, aunque sea un ratito.

Al mediodía me llegó un mensaje de Harry.

‘Paso por ustedes a las 13:20’

Un mensaje bastante seco pensé, pero ya que, eran las 12:47 y aún estábamos en pijama, tome a Edward, cepille nuestros dientes, le di un baño, lo vestí y luego me bañe yo.

Cuando terminamos de alistarnos completamente eran las 13:24. El timbre sonó unos minutos después y yo abrí la puerta, mis piernas temblaron, siempre temblaban cuando estaba con él, estaba experimentando la misma sensación que sentía cuando estábamos juntos. Edward se quedó mirándolo, con curiosidad y algo de miedo. Harry le sonrió.

Luego guió su mirada hacia mi-¿vamos?-pregunto sin dejar de sonreír.

-Vamos.-me gire, cerré la puerta y fuimos hasta abajo del edificio y subimos a su auto.

-tengo miedo-dijo Edward que estaba sentado encima mío.

-¿Miedo? ¿Por qué?

Él levanto su manito y señalo con el dedo a Harry, yo reí.

-El no va a hacerte nada bebe, yo te voy a cuidar-dije riendo mientras Edward intentaba acucurrarse en mí.

Harry no dejaba de sonreír y mirarnos con dulzura.

Después de media hora, llegamos a algo que parecía ser un parque, mi rostro confuso al llegar provocó que Harry largara una carcajada.

Luego de bajar, note que mis ojos se habían equivocado, no era un simple parque, era un bello prado, contemplé aquel lugar y me quede maravillada, los arboles se alzaban y parecían querer llegar al cielo, flores de todos los colores inundaban aquel lugar con su perfume, los niños corrían y reían a lo lejos, una pareja adolescente enamorada paseaba por el sendero de piedras adoquinadas tomados de la mano y yo me quede observándolos, sus ojos chispeaban cada vez que se miraban y las mejillas de la niña se volvían rosáceas cuando hablaban y recordé los bellos momentos que había pasado con la persona que tenía al lado.

-Allí está la zona de los juegos-dijo señalando a lo lejos-¿quieres ir?-le pregunto a Edward.

Él asintió con la cabeza e intento bajarse de mis brazos, yo reí y lo baje suavemente. Él tomo mi mano, Harry también lo hizo y empezamos a caminar hasta allí, los tres juntos, tomados de la mano, parecíamos una familia feliz, pero el hecho es que yo no sabía ni que éramos con Harry.

Una vez que llegamos hasta los juegos Edward se echo a correr junto a los demás niños, nos sentamos en una banca de madera y ambos nos quedamos mirándolo.

-Aún no le dices que soy su padre ¿verdad? 

-No…no encuentro el momento, se que es solo un niño y que no entiende la situación, pero…simplemente no encuentro el momento.

-Está bien…no hay problema.

Hice un mohín y observe su rostro de perfil, era perfecto.

Harry notó que no dejaba de observarlo, se giro, me miró y se acercó a mí, el solo se quedo mirándome a los ojos, su presencia tan cercana hizo que el rubor corriera por mis mejillas, me avergoncé por eso y debido a aquello el color se intensificó más. Harry sonrió y se acercó aún más a mi rostro, la confusión en mi crecía a cada segundo mientras él se acercaba más, hasta que su nariz rozo la mía. 

-¡Mama!-dijo Edward escandalizado. Ambos nos separamos, riendo.

-¿Qué pasa bebe?

El se subió al banco y me abrazo fuertemente, mirando con el ceño fruncido a Harry, el cual no podía parar de reír, al igual que yo.

Edward se quedo mirándolo así durante un buen rato hasta que decidí romper el silencio.

-Edward… ¿sabes quién es él?

-no...

-Bueno…él es…tu papi.

Edward me miró, extrañado.

-¿papi?

-Así es.

Olvido su enojo y se acercó a Harry, curioso.

Se sentó sobre las piernas de Harry y ambos se quedaron viendo. Edward lo señalo y me miró.

-¿el…es papi?

Asentí con la cabeza.

Harry no se resistió y lo abrazo, Edward no se separo de él como solía hacerlo con las personas que no conocía, luego Harry se levanto con Edward y se puso a jugar con él, yo me quede observándolos desde el banco, aquel era un momento que jamás olvidaría.

PD: "Te Amo" (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora