Dos Slytherins y una Gryffindor.

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Dos semanas mas pasaron en los que Hermione se dio cuenta que tal vez la presencia de Draco no seria tan molesta, en realidad se estaban llevando bien, no estaban todo el tiempo juntos pero cuando se encontraban era "agradable", habían encontrado la forma de bromear sin dejar de lado las evidentes rivalidades de sus casas.

D:-Hola Gryffindor, hoy tu cabello amaneciò especialmente animado.

H:- oh vamos callate Slytherin, he mejorado en hechizos y seria divertido volverte a ver de Huron.

Eran así las conversaciones durante la primera semana, cada vez se insultaban menos y bromeaban mas.

Todo lo contrario ocurría con su relación con su profesor de pociones que cada día era mas tormentosa, al parecer el tener que pasar mas tiempo con ella lo estaban volviendo menos tolerante, en clases ya no solo la ignoraba cada vez que alzaba la mano, sino que se aseguraba que ella se arrepintiera cada vez que lo hacia, lanzandole algún comentario hiriente o con alguna de sus habituales muestras de lo sarcástico que podía llegar a ser. En los dos días de castigo ni siquiera la miro, se dedico a leer libros o corregir pergaminos, solo le hablo 3 veces, un "pase" para que entrara, un "debe limpiar los calderos y etiquetar" y un "retírese ya" al final y todo esto sin quisiera voltear a verla.

En la primera semana de clases extras se dedico ordenarle que realizara pociones de los libros para luego corregirle y decirle que los libros estaban mal, le corregía las partes erróneas y ella tenia que volver a realizar las pociones. Era como si esta vez no solo le dijera insufrible, su actitud realmente mostraba que para el eso era lo que significaba ella.

Y eso era en el aula de clases, cuando se encontraba con el en los pasillos o con su mirada en el gran salón, este actuaba fastidiado como si escuchara el llanto de las mandrágoras y las 3 veces que estaba con Draco y se lo encontró, juraba que tenia cara de hechizarla, sabia que las cosas entre padrino y ahijado no estaban bien desde antes de la muerte de Dumbledore, pero al parecer por separados no los quería y juntos eran insoportables.

En esas tres veces también descubrió que Draco sospechaba de su enamoramiento por su profesor, ya que cada vez que Snape se acercaba, Draco inmediatamente la observaba y lo hacia detenidamente lo que causaba aun mas nerviosismo en la castaña, pero cuando las cosas realmente fueron extrañas y un tanto vergonzosas fue el día de su cumpleaños.

Flash Back...

Era sábado 19 de septiembre 1998, la había pasado muy bien en las tres escobas con Ron, Ginny, Luna, Draco, Pakinson y Harry que había llegado para felicitarla.

Harry  decidió no terminar su ultimo año ya que de todas maneras tenia asegurado su puesto como auror que tomaría a comienzos del años siguiente, en ese momento Harry estaba tomando tiempo para arreglar las cosas enGrimmauld Place , pasar tiempo con Teddy, y estudiar un poco con clases privadas, aprovechaba para viajara y pasar tiempo con las personas que habían estado con el durante sus difíciles años en hogwarts, incluso había mejorado su relacion con sus tíos y su primo, la verdad era que Harry sentia que aun no podía regresar a Hogwarts, que era muy poco tiempo, Hermione lo entendía y sabia que cuando el cabello azabache no deseaba hablar de algo, era mejor no insistir, sabia que el estaba en un proceso de sanación y donde guardaba duelo por muchos.

Durante la celebración recordaron a algunos de los que ya no estaban con ellos, sobretodo a Fred, al recordarlo tomo la mano de Ron, sabia lo difícil que ha sido para la familia weasley afrontar esa perdida, rieron recordando sus bromas, la vez que invito a Angelina al baile mientras le recordaba a Ron y a Harry que se les iban a escapar las bonitas, Ron admitió apenado que fue muy tonto al invitar de esa forma Hermione, también Harry recordó que les pidió a los gemelos no dejar que el olvidara cuando Ron bailo con la profesora Mcgonagall, la vez del examen que le arruinaron a Umbridge y la reacción de esta, en fin, recordaron, rieron y brindaron por todos, todos habían bebido un poco mas de la cuenta por lo que una sensata Luna sugirió volver al colegio antes del toque de queda.

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