Me levante sin saber cuando acabó lo de anoche, estaba completamente desnudo y junto a mi estaba Gumball dormido abrazado de mi cintura también desnudo. Tenía una leve sonrisa en su rostro y se veía bastante cansado, me levante y ese se abrazo más a mi.
-No te vayas...quédate un rato más.
-Gum...ya es algo tarde.
-No me importa...-comenzó a besar mi abdomen.
-Ngh...no hagas eso.-dije riendo.
-Me gusta tomar leche en la mañana Marsh...-dijo mirándome a los ojos algo excitado.-¿Puedo?
-P-Por favor...
Me senté en la cama recargado en la cabecera de la cama, cuando el se posicionó entre mis piernas y lamió tímidamente la punta haciendo que me estremeciera, comenzó a lamerlo a lo largo y a engullir la punta. Poco a poco bajaba más, presiona sus mejillas volviéndome loco, gemía muy muy alto. De un momento a otro sentí los labios de Gumball y su respiración cerca de mi pelvis, así fue el ritmo, sus ojos estaban algo llorosos. Comenzó a masturbarse mientras engullía mi miembro, comenzó a gemir con este dentro de su boca, unos minutos más y me corrí en su boca y el en su mano , Gumball trago toda mi escénica.
-Oh Dios...esto es fabuloso, tú eres fabuloso.-dije besando sus labios.
-Te amo Marshall.-dijo besándome tiernamente.
-Tomemos una ducha.
-¿Juntos?-preguntó.
-Suficiente terapia física por hoy...
-Okay...yo entro primero.-dijo y beso mi mejilla.
Después de tomar una ducha, me puse un pantalón, una camiseta de tirantes y unos guantes de sol junto con un sombrero.
Seguíamos trabajando en el castillo, Gumball había hecho los planos de lo reconstrucción mientras estaba en el hospital para concentrarse en algo que no fuera Mora.
Estábamos ya por acabar, el castillo era más grande, amplio y lleno de pasadizos secretos, aún más lleno. Su laboratorio más grande y un varios cuartos extras.
Caminábamos por los pasillos totalmente vacíos.
Gumball me explicaba las decoraciones y las ideas que tenía, incluyendo mostrándome algunos de los pasadizos.
-Marshall...-dijo muy serio.
-Pasa algo Gum.-dije abrazándolo.
-Bueno...[Gumball]
Mientras hacía los planos para le reconstrucción del Castillo, no podía dejar de pensar en Marshall y una vida futura con el, tal vez sea algo apresurado pero me gustaría de verdad que viviéramos juntos. Una sección extra, algo así como un departamento ñ, sin entradas de luz para así estar un poco más juntos.
Se que es apresurado y qué tal vez se niegue, que necesite su espacio y qué tal vez no se quiera estar tanto tiempo conmigo, aunque es comprensible la mayor parte del tiempo soy odioso.
Cada vez que me pedía ver los planos doblaba la parte extra, pero tenía que decírselo, pues estábamos apuntó de acabar esto.
-Gum...Gumball...Gumball despierta de tu viaje astral.
-¿Eh?-dije confundido.
-No ibas a decirme nada.
Tome valor, respire hondo y traté de prepararme mentalmente para aceptar su respuesta sea la que sea.
-Mira...-abrí los planos por completo.
-Oye por qué yo no trabaje en esta sección-dijo apuntando.
-Quería una sorpresa para ti, para ambos, quería pedirte si quisieras que viviéramos juntos.
Parecía sorprendido e incómodo.
-Bueno, creo que...yo.-salió volando.
¡Lo sabía! Agh por qué soy tan, por qué el es tan...calmado, calmado dijimos que íbamos a tomar esto bien con seriedad...pero por qué estoy llorando por qué me siento tan decepcionado.
Está bien, solo, solo iré al hotel y me recostaré.
Aveces siento que solo le sirvo para sexo, que tiene de malo vivir juntos.
-Señor, sucede algo.-preguntó Mentita.
-No, solo, nada.-sonriendo.[Gumball off]
De verdad que soy un maldito imbécil, como salgo huyendo de una conversación tan importante con el. Me dirigí atrás del nuevo Castillo para observar ya terminada el departamento que diseñó Gumball para nosotros.
Las paredes eran mitad rosa con un tono muy leve de gris y miras morado grisáceo como las de mi casa, lo cual las hacía lucir muy bien, había etiquetas en las paredes que indicaban que lugar era cada espacio.
La sala, la cocina y en medio de esta una isla, cuarto 1, 2 y 3, un baño, un estudio.
Lucia cómodo he imagine la vida tendría con el en este lugar.
Acurrucados en la sala viendo películas, jugando videojuegos, besándonos hasta que nos quedemos sin aliento, en la cocina ambos cocinando y manchándonos con la comida o subiéndolo en la isla de la cocina y follarlo, el doctor tenía razón debo de dejar de pensar con el pene.
La habitación más amplia, para ambos, en el estudio observándolo trabajar, en el baño duchándonos como la primera vez. Amigos y gente viniendo a fiestas que organicemos.
Parecía de ensueño, pero extrañaría mi cueva húmeda y apestosa, la cancha de Basketball y todos mis secretos se habían quedado ahí.Una vida con Gumball no tiene precio, escuche a mi subconsciente.
Fui al hotel, donde supongo que Gumball se refugiaría y entre por la ventana, este se sobresaltó y lanzó el control de la televisión.
-Soy yo Gum...
-Oh, claro.-dijo desanimado.
-¿Estas enojado? Lo siento...pero.
-¿Acaso solo me quieres para sexo? O Para divertirte un rato, y luego dejarme, yo quiero algo serio Marshall y si tú no entonces...-sus ojos se llenaron de lágrimas y comenzó a llorar.- No tienes por qué estar conmigo.
-Gumball...-me acerqué a el y al tratar de abrazarlo este se negó, lo tome de los hombros y lo estamos en la cama.
Me miró asustado y a la vez adolorido, me senté sobre su regazo para que no pudiera huir y bese sus labios con ternura.
-¿Ahora tu me vas a violar?
-Oye no digas eso...solo que me molesta cuando no me escuchas...-estaba temblando un poco, de miedo.-Solo quería decirte que, una vida a tu lado no tiene precio y si la oferta está en pie, me encantaría vivir a tu lado.
Sus ojos se volvieron a llenar de lagrimas, mi Gumball tan sensible y llorón.
Lo solté y este se abrazo a mi y trío un poco.
-perdón por hacer tanto drama, pensé que podía manejarlo.
-Perdón por huir.-dije besando cabeza.
-¿Ya lo viste?
-Si, me encantan los colores.
[...]Casi un después el Castillo ya estaba, amueblado, y acabado.
Y hace semanas que comenzaba a planear algo muy especial, algo que me estaba matando de nervios.
Gumball se encontraba en las puertas de este mientras que yo lo miraba desde el público.
-Quiero decir gracias a todo su esfuerzo y lealtad, que de no ser por ustedes esto no sería posible, las puertas siempre estarán abiertas a cualquiera que lo necesite, mi dulce gente, no saben cuánto los quiero y los aprecio así que merecen un aplauso.
Todos comenzamos a aplaudir, cuando los aplausos cesaron era mi oportunidad.
-Principe Gumball.-dije subiendo las escaleras.- usted es una persona de admirar, de gran valor y corazón. Y desde hace mucho me tiene loco por usted...-todos rieron.- somos quiero decir es el amor de mi vida y estoy siempre queriéndote cada día más, así que...-saque el anillo de mi bolsillo.- ¿Me haría el honor de casarse conmigo?
Todos aplaudieron, Gumball me miró conmovido y me abrazo.
-Pensé que yo te pediría que te casaras conmigo.-susurró.
-Lo planee hace semanas y no podía aguantar más ¿aceptas?
-Claro que si estupido.
Lo bese y grite "aceptó" seguido por gritos de victoria y aplausos de la dulce gente. Gumball reía nervioso atrás y se le salían las lágrimas, sorprendentemente mire a Mentita y esta también rompió en llanto.
Este de verdad que sería un día memorable para todos.¿Que tal?
Dios lo siento por no actualizar nada la juro que he tenido la peor semana de mi vida, he dormido máximo 3 o 4 horas por día pero aquí está 💖😘😂 espero que les agrade y de verdad lo siento por no actualizar antes.
Voten y Comenten (<------mi parte favorita es leer sus comentarios y llorar yo también soy una nenita llorona como Gumball xD)-Los quiero muchismoooo
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"Queriéndote cada día más." ❤️
Hayran Kurgu-Un loco como yo necesita un tornillo como tú.-dijo aproximándose. Después de esto, él se sonrojó mirando hacia el suelo, pensando ello, en aquel sentimiento revelado en una pequeña frase. -------- Contiene yaoi! Si no te gusta no la leas :3