Parte 16

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Coloqué mi capucha en mi cabeza antes de bajar del auto y corrí junto con el guardia al interior del edificio mientras las cámaras me apuntaban sin dejarme de seguir en ningún segundo.

Subí por el ascensor hasta el décimo piso siguiendo los pasos del gran hombre, el cual me guió hasta el cuarto 301.

Me abrió la puerta dejándome pasar y al entrar se dio media vuelta cerrando la puerta a sus espaldas.

Volteé a ver el cuarto contemplando lo hermoso que era mientras me introducía más en él y a los segundos pude ver a Shawn sentado en el sillón con su guitarra.

– Kay – sonrió.

– Lo siento, lo siento, lo siento – me disculpe acercándome a él.

Soltó una carcajada dejando su guitarra a un lado y se levantó del sofá acercándose a mí.

– Hey no fue tu culpa – habló tomandome de los hombros – Fue solo una foto.

– No creí que una foto haría tanto escandalo – bufé – ¿Como supieron en que hotel te hospedabas?

– Jamás voy a saber eso, vos deberías saberlo – rió.

Sonreí divertida.

– En realidad los fans nos dividimos en partes, están los artistas, los que informan, etcétera, y después están los que no saben hacer nada, bueno yo pertenezco a ese grupo – encogí mis hombros.

Shawn soltó una risa negando con su cabeza.

– Ven – tomó mis dedos entrelazándolos y me llevó hasta el sillón.

Eso se le había hecho costumbre y no me estaba quejando en lo absoluto, al contrario, me agradaba su toque.

– Quiero mostrarte algo en lo que estuve trabajando ¿Quieres oírlo? – preguntó tomando su guitarra.

– ¿Que clase de pregunta es esa? Por supuesto que si – sonreí emocionada.

Sonrió en respuesta y comenzó a tocar distintas notas que sonaban increíbles juntas.

No me alcanzaban ni todos los números existentes para contar las veces que me había imaginado estar frente a Shawn y que él me tocara una canción, casi no podía respirar cuando empezó a cantar, su voz era hermosa y podía oírla en vivo, sólo nosotros dos y su guitarra.

Estaba escuchando atentamente cada nota y cada palabra que salía de sus labios, no podía dejar de sonreír.

– ¿Y? ¿Qué te pareció? – preguntó cuando dejó de tocar analizando mi rostro.

– Es...

Tardé varios segundos en contestar, las palabras no querían salir de mi boca.

– Aún no está terminada – continuó rápidamente al ver que no seguí hablando ¿Acaso creía que no me había gustado? – Debo terminar la letra y modificar algunas...

– Es hermosa – lo interrumpí – Enserio, me encanta.

Él sonrió bajando sus hombros y soltando aire por sus labios.

– Creí que no te había gustado.

– ¿Estas loco? No creo que exista una canción que hayas hecho y sea mala.

Formó una media sonrisa en sus labios y apartó la guitarra dejándola detrás del sofá.

– ¿Cómo lo haces? – soltó.

– ¿Cómo hago qué? – pregunté extrañada.

– Hacerme sentir bien – inclinó su cabeza a un lado observándome – Cuando hablo con vos de alguna manera me hace sentir bien, sabes entenderme y hacerme sentir seguro de lo que hago.

Mi garganta se secó al oír sus palabras.

– Quizás es porque pensamos igual y te digo lo que pienso sinceramente – respondí con dificultad.

– Quizás es eso – fijó sus ojos en los míos.

¿Por qué estoy tan nerviosa ahora? ¿No sienten como que falta el aire en esta habitación?

Él aclaró su garganta y observó hacia otro lado.

– ¿Crees que algún día pare? – solté luego de unos segundos.

Había tenido esa pregunta en mi garganta hace varios días.

Después de que Shawn aclaró por twitter que sólo eramos amigos las cosas habían empeorado.

Los fans habían empeorado las cosas en realidad, se peleaban entre ellos, algunos decían que sí salíamos y otros que no, algunos que hacíamos buena pareja y otros que no, que yo me juntaba con Shawn por la fama y otros que no.

No había vuelto a hablar de eso con él después de aquel día pero me estaba comiendo la cabeza.

Suspiró mirándome a los ojos sabiendo de lo que estaba hablando.

– Kay, no puedo prometer que esto algún día termine porque probablemente nunca lo hará – llevó su mano su nuca para comenzar a rascarla – Solo puedo prometerte que no dejaré que te hagan daño, podrán inventar rumores y decir mentiras, hay gente que se lo va a creer y hay gente que no, pero yo me voy a encargar de aclarar cada cosa que digan, no me interesa si me creen o no, ahora... – suspiro frustrado – ...si no quieres verme más para que no digan cosas de ti, lo entiendo, creeme, yo daría todo por que no hablen de mi e inventen cosas sobre mí.

Me quede en silencio analizando sus palabras.

Obviamente no me iba a alejar de Shawn sólo porque me molesta como funciona el mundo de una estrella como él.

– Shawn, no me voy a alejar de vos – negué con mi cabeza – No dejaré que se interpongan en nuestra amistad – sonreí.

– Me alegra oír eso – me dedicó una preciosa sonrisa.

– No te libraras de mí tan fácil Mendes – reí.

– Espero que no.

Fama » shawn mendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora