Geoff Payne, era un alfa muy severo pero también muy justo, el cual poseía una cuantiosa fortuna, debido a su gran flota de barcos mercantes que exportaban a otros países multitud de diversas mercancías.Sin embargo, este estaba un poco dominado por su esposa Karen, una alfa un tanto vanidosa, a la cual veneraba con gran devoción.
El matrimonio tenía tres hijos; Ruth y Nicola, dos lindas omega ya casadas con unos alfas que trabajaban en las empresa familiar y un hijo menor, Liam, un joven y hermoso alfa un tanto especial.
Además, Payne era un orgulloso abuelo que adoraba a sus tres nietos alfas, los cuales estaban por terminar en la escuela y pronto irían al Instituto.
El despacho del alfa estaba en la parte más alta de la casona y cuando Niall estuvo ante la gran puerta de madera, tocó con los nudillos y luego esperó.
Segundos después se escuchó una voz grave que les dio paso y entonces entró, seguido de Louis, quién seguía nervioso pues no sabía como sería aquel nuevo y desconocido dueño.
...-Señor, le traigo al omega del que mi madre le habló hace un rato— dijo el beta.
-Muy bien Niall, gracias, puedes retirarte a tus quehaceres- ordenó este.
El ojiazul aspiró el olor que había en el ambiente, el cual era algo fuerte sin resultar repulsivo, por lo que lo podía soportar y acto seguido escuchó de nuevo la grave voz del alfa, que le pidió que se acercase y él obedeció.
-Bien niño, siéntate y dime, ¿cuántos años tienes?.
-Buenos días señor, tengo dieciocho años- respondió Louis educadamente.
-¿Ya has tenido tu celo alguna vez verdad?, ¿usas algún tipo de supresores*?- preguntó de nuevo el alfa.
(*Los supresores son un tipo de medicamento que usan los omega para retrasar o apaciguar el dolor del celo, cuando carecen de un alfa que los satisfaga.)
-No, jamás los he tomado y aún no he tenido mi celo pero todos me dicen que soy un omega señor- contestó Louis.
-Oh ¿y cómo es eso posible?, no tenía idea de que con tu edad hubiera seres que todavía no muestran su condición, que extraño.
—Por favor señor, me gusta trabajar, no se arrepentirá, no me eche.
El alfa se recostó en su sillón.
—En efecto tienes facciones delicadas de omega y tu olor es dulce, no creo que tarde en aparecer y puede mostrarse en cualquier momento, entonces tendríamos una situación muy problemática... mandaré que te los traigan y los tendrás cerca por si ocurre, ¿de acuerdo?.
—¿Eso quiere decir que puedo quedarme?.
—Si pero debes tener cuidado y no olvidarte de tomarlos...Eres un omega muy lindo y no queremos que los alfas de esta casa enloquezcan ¿Verdad?. - le explicó Geoff.
-Si, lo entiendo, muchas gracias Señor, los tendré cerca y me los tomaré- dijo Louis muy tranquilo.
-Perfecto, pareces un chico responsable y capaz, por eso te daré la oportunidad de trabajar aquí y pertenecer a este lugar... bienvenido, Louis.
-Muchas gracias por permitirme quedarme, no lo defraudaré- dijo feliz Louis levantándose de la silla.
—Eso espero... Ahora ve con Niall y Berta, ellos te dirán cuales son tus obligaciones.
—Si, señor, de nuevo gracias.
El alfa sonrió y continuó con sus papeles mientras que el ojiazul salió del despacho muy sonriente pues al parecer al fin había dado con un buen dueño.
Louis llegó a la cocina después de perderse en los pasillos en un par de ocasiones, ya que la casona era un laberinto.
Berta muy amablemente le señaló un lugar en la mesa y luego a continuación le sirvió en un plato un poco de guiso, por lo que este le sonrió dándole las gracias pues estaba hambriento.
Niall y otros empleados más, fueron llegando y sentándose a la mesa para degustar el rico guiso que Berta, aunque de pronto el beta paró de comer y le presentó a los demás.
…—Este es Zayn, es el chófer y guardaespaldas del señor Payne...esas son María, Sofía y Jesse, se ocupaban de la limpieza de la casa y de servir las comidas...ah y esa es Danielle, es la nany de los nietos de los señores Payne.
Luego de un tiempo a la mesa, las sonrientes doncellas terminaron su comida y se levantaron pues en breve tendrían que servir la comida a toda la familia.
...-Niall, ¿y tú que haces aquí exactamente?, ¿Yo seré tu ayudante?-preguntó Louis muy interesado.
-Pues yo me ocupo del jardín, de los arreglos de la casa y también hago los recados- contestó.
Berta se sentó a comer finalmente.
-Tú cariño, te ocuparás de suplir las carencias—dijo ésta—... ayudarás a cualquiera que lo necesite y en cualquier momento, serás nuestro apoyo... En cuando termines tu comida empezarás aquí ayudándome a mí.
—Si, claro, por supuesto —sonrió el ojiazul.
Cuando finalmente todos terminaron Louis ayudó sirviendo en las bandejas que las doncellas llevaron a la familia, luego lavó los platos y a también ayudó a limpiar toda la cocina.
Le encantaba estar ocupado, así no pensaba en lo miserable que era su vida sirviendo a otros y sin nada más que él mismo y sus cuatro gastadas ropas.
Allí tan solo llevaba unas horas pero se sentía muy bien pues la cocinera era muy cariñosa y lo trataba como si lo conociese de siempre, por lo que no le resultaría difícil encariñarse con ella.
Pasaron los días y Louis cada día se integró más en la casona, ya que todos respetaban y le cogieron cariño también, por lo que estaba encanto, ya que era un trabajo fácil y llevadero y junto a personas buenas que no lo molestaban.
La verdad era que nada lo perturbaba, por lo que agradeció no tener que mostrar su reacio carácter y por eso, el ojiazul pudo decir, que por primera vez en su vida era completamente feliz.
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8. Pobre omega infeliz~Larry Stylinson, Ziam-Omegaverse 💜(Terminada)
FanfictionHarry Styles es un alfa solitario, el cual jamás ha sentido nada más allá de un vil y simple deseo sexual por los omegas, ya que para él son meros juguetes sexuales. Sin embargo, eso cambiará cuando ve a Louis Tomlinson, un frágil pero obstinado om...