Louis estaba sufriendo un infierno insoportable y aunque se había tomado el supresor, estaba notando muy poco alivio.Su panza le dolía mucho, su cuerpo estaba ardiendo, su pene estaba muy duro y su entrada lubricada y contrayéndose continuamente, alentaba su agonía.
El omega sabía muy pobre sobre el celo, ya que lo había leído cuando estaba con las omegas que había servido pero la verdad nunca pensó que sería tan doloroso.
Sabía que existían juguetes para mitigarlo pero él no tenía ninguno pues no se había preocupado de proveerse de uno y adolorido estaba comprobando lo necesario que era.
Finalmente por instinto, el ojiazul se animó a auto satisfacerse, masturbandose, por lo que sujetó su miembro con la mano derecha y bombeó hasta que entre gemidos y espasmos logró correrse.
Comprobó que eso apaciguaba el dolor por un rato, así que en cuando recuperó las fuerzas, volvió a repetir la misma operación.
Durante todo el tiempo que duró la primera fase del celo, en la mente de Louis tan sólo existían los ojos esmeralda, tremendamente atrayentes del joven alfa invitado a la fiesta, los cuales le recordaron al verde pasto que había en la granja, en la que había trabajado de niño y en el que tantas veces después del duro trabajo, se había tumbado para admirar el cielo.
Para cuando Louis se empezó a sentir mejor ya habían pasado varias horas, por lo que los invitados a la celebración estaban muy entretenidos en el baile, por lo que triste se maldecía pues hubiese querido verlo.
…—¿Por qué justo me pasó hoy?, ¿por qué justo este día que había una fiesta?, es muy injusto.
Además Louis estaba preocupado por si los Payne lo despedirían pues si eso ocurría no tendría a donde ir, ya que si por él hubiese sido, seguiría trabajando y vería como era el baile pues había ayudado con mucha ilusión en todos los preparativos.
Estaba furioso consigo mismo y con su cuerpo pues odiaba confirmar que era un débil omega, a pesar de que siempre se lo habían dicho y tener una nueva vulnerabilidad ante los alfas.
A varios metros de allí, Harry que finalmente se había quedado, soportaba a duras penas tuvo a Geoff Payne quién solo le hablaba y hablaba de su joven y hermoso hijo, a quién quería que cortejase, además de recalcarle lo orgulloso que se sentiría si lo tenía como yerno y aliado en los negocios, además de que al ser los dos tan atractivos, tendría unos nietos preciosos.
Sin embargo, estaba el hecho de que el alfa ojiverde no había vuelto a ver al extraño sirviente por ninguna parte y eso lo estaba molestando aún más, ya que quería descifrar porqué se había sentido así al olerlo y al tenerlo cerca, quería ver bien, ¿qué demonios era lo que tenía de especial ese misterioso pequeño?, ¿que era lo que lo hacía diferente a los demás?.
En varias ocasiones, el ojiverde quiso interrumpir el parloteo de Payne para saber, ¿qué diablos podía estar haciendo el omega, en vez de estar sirviendo copas en la fiesta? pero lo pensó mejor pues él no era un alfa que se rebajaba a preguntar por un empleado omega, al fin y al cabo, creyó que se le pasaría.
No muy lejos de donde los empresarios estaban, Liam permanecía callado y harto de que su madre le ofreciera para bailar con cada joven del salón, como si fuese mercancía que tenía en venta pues a él esos alfas no le gustaban, ya que su corazón y su cuerpo ya tenían un dueño, aunque este fuese imposible.
Con disimulo, el alfa ojimiel seguía los movimientos de Zayn con la mirada, mientras éste se movía con destreza con la bandeja de copas, entre los invitados por todo el salón de baile.
El joven alfa tuvo que disimular para que sus padres y los demás no se dieran cuenta pues no podía evitar que el chófer cada vez le gustase más.
Después de varias horas y llegada la madrugada, la fiesta llegó a su fin y uno a uno, los invitados muy sonrientes y agradecidos por una gran velada, se fueron marchando, por lo que tanto Zayn como Niall, ya recuperado de su arrebato ante el celo de Louis, volvieron a su puesto para devolverles los coches a sus dueños.
Mientras, Berta y las doncellas comenzaron a recoger las últimas copas y la vajilla de la fiesta para llevarlos a la cocina y que todo estuviese listo pero aunque les quedaba aún bastante trabajo, sus jefes les dijeron que siguieran en la mañana y que se fuesen a descansar.
La cocinera antes ir a su habitación pasó a ver cómo se encontraba el pequeño omega y llevarle algo de alimento y tras abrir la puerta se lo encontró dormido y tendido en la cama, cubierto tan solo con la fina sábana.
El ojiazul ya no tenía fiebre, su piel apenas estaba caliente pero se veía que lo había pasado mal, tenía la habitación y la cama revueltas y toda su ropa estaba esparcida por el suelo.
También había cristales rotos del vaso y la botella de agua que le habían dejado para hidratarse, entonces los recogió con cuidado pues Louis podía cortase al levantarse dormido, luego le acarició la cara y se fue a descansar.
—Esta ha sido una larga noche para todos.
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8. Pobre omega infeliz~Larry Stylinson, Ziam-Omegaverse 💜(Terminada)
FanfictionHarry Styles es un alfa solitario, el cual jamás ha sentido nada más allá de un vil y simple deseo sexual por los omegas, ya que para él son meros juguetes sexuales. Sin embargo, eso cambiará cuando ve a Louis Tomlinson, un frágil pero obstinado om...