5 Minutos en el Paraíso ✨ GOT7 ~ Finalizada

24.

-A veces eres peor que un fantasma- le dije asustada.

-Mark vino- lo soltó tan derrepente que mi corazón se freno un momento.

-¿Ah si?- trate de sonar calmada.

-Si... estaba preocupado por ti- se mordió el labio nervioso y evitaba mirarme a los ojos.

-¿Y que le dijiste?- el silencio reino por un momento .

-Que tu no estabas acá- suspiro- pero... creo que no fue lo mejor que puse hacerle dicho

-¿Porque?- le pregunte sinceramente

- Se puso a llorar... nunca lo había visto así, tenia ojeras debajo de sus ojos, se nota que no ha dormido nada- mi corazón se encogió y literalmente sentí como en mi interior todo se caía a pedazos.

-Creo... que tengo que hablar con el- pase por su lado decidida a tomar mis cosas.

-Iba con Hye- me frene en seco.

-¿Con su prometida?

-Si... en el auto estaba ella- se via nervioso y incomodo contandome todo esto.

-Ah...- me devolví a la cocina y empece a preparar todo para poder almorzar, Jae Bum se acerco en silencio a mi lado y sin decir ninguna palabra empezó a ayudarme con lo que faltaba para poder sentarnos a la mesa.

Mientras tome unos vasos de la estantería, uno de ellos se me resbalo y cayo al piso, rompiéndose en mil pedazos, solo pude suspirar y me agache a recoger los pedazos, Jae Bum se agacho a mi lado y trato de detenerme, pero lo logro tarde, ya que sin querer uno de los vidrios hirió mi piel.

-Agh... maldita sea- ¿Que podía ser peor?, mis ojos se humedecieron y vi que en cualquier momento lloraría, así que antes que me viera, corrí al baño y me encerré en el- Diablos... ¿Por que?

Mi herida no era profunda y puse mi mano debajo del agua fría para que poco a poco dejara de sangrar, las lagrimas nublaban mi vista y con la mano sana me las limpiaba. Estuve así hasta que tocaron la puerta del baño y sin decir nada la desbloquee dejando entrar a Jae Bum con un botiquín de primeros auxilios en la mano.

-Dejame verlo- me tomo por los hombros y me sento en el baño, se agacho frente a mi y tomo mi mano- no se ve profundo, bastara con que te limpie y ponga una venda.

-Gracias- no dije nada más. Lo miraba mientras el vendaba mi mano, su ceño fruncido y sus pequeños dos lunares en su parpado tomaban toda mi atención.

-Listo, ahora no debes moverla mucho- me miro y no supe que decir, pero mis ojos volvieron a aguarse.- Por favor no llores- me abrazo y yo me quede quieta sollozando un momento.

-Ya... se me paso- mentira, pero no queria preocuparlo demas- creo que no tengo hambre, me ire a casa.

-Yo te ire a dejar- se paro y salio del baño, cuando volvio lo hizo con las llaves de la moto.

-¿No habias dejado la moto en tu trabajo?

-Un chico que trabaja conmigo me la vino a dejar cuando estabas durmiendo.- tome mis cosas y lo seguí por las escaleras del edificio. Aun estaba vestida con la ropa de Jae Bum y así preferí irme.

El silencio se hizo presente hasta que llegamos a mi edificio, me baje de la moto y Jae Bum también, lo cual me extraño, ya que generalmente me dejaba en la calle y luego se iba por donde había venido.

-Listo... me puedes dejar aca- susurre

-Déjame ver como está- me tomo la mano y miro la venda, se me había olvidado por completo que tenia esa cosa aun en la mano- cambiatela regularmente.