🌊Capítulo 20🌊

8.1K 779 740
                                    

🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊🌊

 Aquella mujer... Aquella dama de extravagantes ropajes y abundantes joyas se abalanzó hacia el futuro rey haciéndolo perder levemente el equilibrio. Los recogidos de Chloe se deshicieron levemente y Adrien sonrió con algo de falsedad mientras intentaba quitársela de encima sin que resultase muy rudo.

 La joven de cabellos rubios se miró su dedo anular con orgullo y sonrió para ella misma. Mientras tanto Adrien buscaba con la mirada a cierta muchacha de cabellos azabaches y brillantes ojos azules y a su inválido abuelo. 

  Los aplausos de los ciudadanos y los vitoréos de emoción lo hicieron ver borroso, tan solo veía siluetas difuminadas unas con otras, gente sin rostro que lo felicitaban y daban la enhorabuena por su compromiso. Miró a su alrededor con algo de desesperación y se llevó una mano a sus cabellos para apartarlos de su frente.  Sintió una mano agarrarse a su brazo y el joven miró por debajo de su hombro encontrándose con Chloe quien se apoyaba como una lapa.

 Se zafó de aquel agarre con delicadeza y la tomó de la mano mientras se excusaba de la forma más amable que sus adentros le permitían.

 En cuando los guardas olieron sus intenciones, comenzaron a apartar a todos lo parisinos para formar un pasillo ancho por el cual que futuro rey pudiese caminar con soltura. Hizo caso omiso a las voces y alagas de todo el mundo y prácticamente corriendo se apresuró a entrar al gran palacio, hizo una seña con su manos, quizás algo borde para indicar a los guardas que lo dejaran solo. Recorrió un largo pasillo subiendo escaleras y atravesando el gran hall, llegó a la habitación donde en teoría Marinette debería estar instalada desde su llegada al palacio, sin embargo la joven no estaba allí. Su corazón comenzó a palpitar con fuerza imaginando que tal vez podrían haberla llevado a las mazmorras. Cerró la puerta con brusquedad y se dirigió a paso ligero hacia el cuarto de su abuelo, pues él debía saber el paradero de la joven.

  Apenas se molestó en llamar, abrió la puerta de golpe y prácticamente se abalanzó hacia su interior.

  —¡Wow! ¡Eres un mago!—Exclamó una voz muy conocida para el joven—.Hazlo otra vez, por favor.

 Adrien sentía su corazón palpitar con fuerza, su pecho subía y bajaba con fuerza y pequeñas gotas de sudor  recorrían su frente.

 Las dos figuras que se alojaban en la habitación miraron con sorpresa el nuevo inquilino de la estancia.

 Marinette parpadeó varias veces algo patidifusa, sin duda aquella reacción la había dejado atolondrada, sintió la mirada de Adrien fijarse sobre la suya con intensidad y durante varios segundo ambos permanecieron mirándose con detenimiento hasta que finalmente Marinette bajó la mirada mientras sentía sus mejillas arder.

  —¿Podemos seguir con el juego?—Preguntó la azabache aún con la mirada fija en el suelo.

 Adrien ante tal rechazo se aclaró la garganta.

™El Susurro De Las Olas 🌊Miraculous Ladybug🌊 #PremiosLadybugTLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora