Capítulo IV.

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Finn había accedido a proteger a Aiden, mientras que ella trabajaba para él en contra de los Mikaelson. Finn le había contado parte de lo que planeaba hacer, habían cambiado el lugar en donde harían los hechizos para evitar que fueran encontrados.

Habían llegado a una torre abandonada, en donde Finn ya tenía instaladas unas cosas, había una mesa que tenía varias cenizas sobre ella y diferentes velas.

— ¿Entonces cuál es el plan? —cuestionó Aiden—, es decir, debo de saber lo que harás para no estropearlo. Pero debo saber todo.

— La hija de Niklaus es el plan —respondió Finn acercándose a la mesa.

— ¿Qué piensas hacer con ella?

— Niklaus le hizo creer a todo el mundo que había muerto, pero hace poco afirme mi teoría de que ella sigue viva —contó Finn guardando unas cosas—, voy a buscarla mientras tú consigues lo que te pedí.

— ¿Cómo planeas que consiga la estaca de roble? —cuestionó Aiden.

— Usa tus encantos —sonrío Finn.

— Una cosa más —dijo Aiden deteniendo a Finn—, ¿qué piensas hacer exactamente con la hija de Klaus?

— Voy a matarla.

Dijo y después salió del lugar. Aiden se sorprendió al escuchar lo que Finn planeaba hacer con la hija de Niklaus, no podía creer que fuera capaz de hacerle eso a una bebé.

Estuvo un buen rato pensando en lo que haría, claramente Finn no pensaba bien las cosas y lo único que estaba haciendo era actuar por impulso, así que no seria nada bueno para ella. Quería vengarse de los Mikaelson por haberla puesto en esa casa, pero no quería ser parte de esa cruel manera. No asesinado a una bebé, así que decidió buscar a Niklaus y decirle lo que Finn planeaba hacer y después, poco a poco ir planeando algo para vengarse de ellos.

Pasos se escucharon en el lugar, junto con voces. Fue hasta ellos y se dio cuenta que se trataba de Niklaus quien iba acompañado por otras dos personas que ella desconocía.

— ¿Qué es lo que esta buscando con exactitud? —cuestionó el hombre en frente de la mesa.

— Él está buscando a la hija de Klaus —respondió Aiden llamando la atención de todos.

— Aiden...

Rebekah también se había sorprendido pero no le tomó mucha importancia. Kol, al igual que Niklaus, se sorprendieron y se quedaron sin palabras al ver a la chica. Después de tanto tiempo.

— ¿Qué estás haciendo aquí? —cuestionó Rebekah acercándose a ella.

— ¿Te conozco? —dijo Aiden al verla.

— ¿Qué estás haciendo aquí Aiden? —preguntó el híbrido.

— ¿Te refieres a fuera de esa casa para brujas locas? —dijo Aiden con odio—, lugar en donde me dejaste.

— Lo hice por tu bien...

— ¿Lo hiciste por mi bien? —expresó enojada—, hubiera preferido morir.

— Ambos tendrán tiempo para arreglar eso, lo que ahora importa es saber dónde está Finn —dijo Rebekah llamando la atención de ambos— ¿Dónde está?

Niklaus sacó su teléfono y habló con Elijah para prevenirlo de Finn, para que protegiera a Hope. Mientras ellos encontraban la manera de detener a Finn.

Aiden no se había percatado de que el otro hombre que se encontraba en el cuarto se trataba de Kol, hasta que hablo y se dirigió con Rebekah y Niklaus. En el donde de su corazón quería correr a abrazarlo y nunca soltarlo, pero no quería que ellos vieran dicha escena. Así que, fingió no reconocerlo.

— Lo que ahora debemos encontrar es en dónde están nuestros padres y eliminar la conexión que hay entre fin y ellos —dijo Kol.

— ¿Sus padres? —expresó Aiden, intentando fingir. Kol creyó que con eso lo reconocería pero Aiden seguía fingiendo—, ¿Mikael y Esther están vivos?

— Es una larga historia —dijo Niklaus—, ¿sabes dónde están?

— En el cementerio.

— Esta bien, debemos marcharnos —comentó Kol.

— Preferiría no ir —expresó Aiden dirigiéndose a Niklaus—. Me trae malos recuerdos, como sabes Nadia murió ahí por uno de tus lobos.

— ¡Ya basta! —dijo Rebekah—, no tenemos tiempo para esto Nick, debemos irnos.

— Haganlo rápido, les tiene mucha ventaja —expresó Aiden al verlos marcharse.

Despierta | Parte III | The OriginalsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora