Capítulo IV.

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Aiden y Alaric habían ido al hotel donde se estaban quedando Damon, Enzo y Sybil, por lo que esperaron hasta que Enzo saliera del lugar como lo habían planeado con Bonnie para que la chica entrara a confrontar a Sybil y Damon.

Alaric le había contado todo lo que había pasado con Damon, Stefan y Elena. Todo lo que había pasado desde que él había regresado a la vida. Su relación con Jo, la razón del porque Caroline había tenido a sus hijas y de la relación que se había forjado entre Caroline y Stefan.

— No puedo creer que todo eso paso desde que me fui —expresó Aiden desde la camioneta.

— Fue mejor que te fueras, así no tuviste que vivir eso —dijo Alaric. Aiden lo observó recordando todo lo que había sufrido en Nueva Orleans cuando Niklaus la había encerrado en la casa para brujas. Todas la noches en las que fue torturada, recordando las cosas que había hecho.

— No me dieron la opción de elegir —respondió Aiden observando a Enzo irse.

— ¿Qué hubieras elegido? —cuestionó Alaric entendiendo el sentimiento de la chica— ¿Qué te hicieron?

— Ya se fue, es momento de empezar —dijo la chica ignorando lo que cuestionó Alaric—. No olvides el plan, te espero por detrás.

Aiden salió de la camioneta y se dirigió hasta la entrada del hotel, con un hechizo localizó a Damon y fue hasta donde se encontraba. Damon se encontraba en la piscina del hotel, en compañía de Sybil, hablando del poco interés que presentaba Enzo con Sybil y que últimamente se encontraba muy distante.

— No me gusta su comportamiento —comentó Sybil desde una silla—, quiero que investigues qué está pasando con él.

— Tal vez ya se cansó de escuchar tus berrinches —dijo Aiden entrando al lugar.

— ¿Quién eres tú? —cuestionó Sybil levantándose— De seguro te enviaron ellos, creo que no van a entender que ya perdieron.

— Bueno, Sybil, ahora que yo estoy aquí estoy muy segura de que van a ganar —respondió la chica ante el enojo de la sirena.

— Damon, encargate de eso.

Damon uso su velocidad de vampiro para llegar hasta la chica, la había tomado del cuello llevándola hasta la pared. Aiden puso sus manos en la cabeza de Damon para ver lo que Sybil había hecho en él. Al darse cuenta de que había intercambiado los recuerdos que éste tenía de él con Elena, Aiden borró aquellos recuerdos modificados. Por lo que Damon cayó al suelo inconsciente.

— ¿Qué hiciste? —cuestionó Sybil molesta.

— Recuerdo que una vez te dije que tú manera en que te das a conocer y pides respeto —respondió Aiden pasando sobre Damon—... siempre será patética y que nunca conseguirías nada.

— Aiden...

— Estoy feliz de que me recuerdes —dijo la chica acercándose a Sybil—. Ahora, buscar problemas con ellos fue el peor error que pudiste cometer.

— ¿Qué vas a hacer? ¿Volverás a encerrarme? —cuestionó Sybil.

— Eso va a depender de lo piensas hacer ahora.

Aiden le había hablado a Alaric para que fuera por Damon quien seguía inconsciente. Alaric cuestionaba sobre cómo le había hecho la chica para establecer un acuerdo con Sybil a lo que la chica se limitó a decir: "Sybil siempre ha sido una chica temerosa, dependiendo de Selene. Por lo que fue muy sencillo manipularla". Sin decir nada más.

Despierta | Parte III | The OriginalsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora