Capítulo XXV

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Nadia, ataviada con un bello vestido blanco de noche que constaba de dos piezas, un vestido de seda que se ponía debajo de otro de encaje del mismo color e incrustaciones de pedrería, se había hecho el peinado y el maquillaje en una sala de belleza, sus aretes y collar de diamantes eran un regalo de Siwon. Había entrado a la habitación de Sebastían por que la ahjuma le informo que el pequeño no se quería dormir y estaba muy inquieto.

-¿Que te pasa Sebastían? ¿por que estas siendo tan grosero?- le dijo en tono severo al niño que tenía una sonrisa traviesa en los labios.
-Mami, es que... Es que yo quiero ir contigo y con papi a la fiesta- le respondió poniendo una carita triste.
-La fiesta no es para niños, es para adultos- le explicaba mientras volvía a meterlo en la cama y lo arropaba- la ahjuma no tiene por que soportar tus travesuras Sebastían.
-Lo siento mamá, lo siento ahjuma- su hijo se disculpo de inmediato sin siquiera pedírselo.
-Te dormiras ahora- le dijo mientras se levantaba y se dirigía a la puerta.
Escucho a Sebastían sollozar, le partía el corazón.
-No te vayas mami quedate conmigo, deja que papi vaya solo- pidió con los ojitos enrojecidos por el llanto.
-Esta bien mi amor no iré, me quedare contigo, voy a quitarme este vestido y regreso, ¿Esta bien?- Nadia ya estaba en la puerta.
-Esta bien mami- respondió el niño limpiándose los ojos.

Cuando Siwon entro a la habitación después de hacer unas llamadas en su estudio, vio a Nadia quitándose el vestido.
-¿Que haces? -le preguntó sorprendido.
-Ya esta, no iré Siwon, no iré a la fiesta, Sebastían esta llorando mucho y me quedare con él- se sentó frente al tocador y comenzó a quitarse los aretes.
-Ponte el vestido- le ordeno desesperado y salio de la habitación.
Siwon estaba listo hace horas, con su smokin tradicional color negro y su cabello impecablemente peinado.

-¿Que tienes Sebastían? -pregunto sentándose al lado de él- mami dice que estas llorando, ¿por que?
-Es que no quiero quedarme solito ¿podrías ir TU sólo a la fiesta y dejar a mami conmigo?

Siwon entendido de inmediato lo que pasaba, Sebastían estaba celoso de él.
-mmmm... ¿Que te parece si hacemos un trato de hombres?
-¿Como es eso?- preguntó el niño intrigado sentándose en sus rodillas.
-veras yo te digo mi plan y si te agrada tu y yo chocamos el puño y así hacemos un trato. ¿quieres saber mi plan?- preguntó.
-Si papá.
-Bien. Si tu dejas ir a mami conmigo a la fiesta esta noche, mañana vamos todos al parque, ¿que te parece? ¿hacemos el trato?- Siwon levanto su puño a la altura de su hijo esperando que el aceptara.

A Sebastían se le iluminaron los ojos y sonriendo entusiasmado le respondió:
-¡Si! ¡si! ¡es un trato!- chocando el puño de su padre- ¡Vamos al parque! Llevame al mismo parque que me llevo Taetae.

Al escuchar a su hijo nombrarlo se le congeló la sonrisa.
-Ahora a dormir que mami y yo tenemos que salir.
-Si papá- respondió obediente acostándose en la cama y cubriéndose con las mantas.
Siwon le descubrió el rostro.
-Te amo- le dijo y se inclino para besar su frente.
-Yo también te amo papá, mucho, mucho, muchísimo- dijo levantado sus bracitos tratando de abarcar mucho espacio.
-Duerme amor- acaricio la cabellera negra de su hijo muy parecida a la suya.

Al salir de la habitación una mezcla de emociones raras comenzaron a surgir, rabia, celos, tristeza, pesar, se sentía desplazado. Hasta el momento Nadia no había olvidado a ese tipo y se negaba a responderle en la cama y ahora su hijo también lo recordaba. Camino de ida y vuelta por el pasillo sin saber si se sentía furioso, triste o ambas, solo sabia que estaba poniendo todo su empeño y aún no había recompensa, bueno si, su hijo.

Siwon entro a la habitación abriendo la puerta de golpe sobresaltandola.
-Listo, vámonos- le ordeno con seriedad.
Nadia sentada a la orilla de la cama se levantó.
-Pe-pero... Sebastían
-Él esta bien- tomo a Nadia de la muñeca para que caminara rápido
-Siwon espera, con estos zapatos no puedo caminar tan rápido. Espera, que te ocurre.
Siwon la soltó. Nadia sobo su muñeca y camino detrás de él.
-Ya es muy tarde Nadia, hemos perdido mucho tiempo- contesto con voz helada.
-Te dije que yo no quería ir, tu me estas obligando- contesto molesta.
Siwon se detuvo en seco y volteo a mirarla con desagrado. La tomo de la barbilla con la palma de la mano y le dijo en el tono mas frío:
-Iras conmigo a la fiesta y te comportarás como lo que eres, MI esposa y me honrarás y respetaras ante todos- Siwon la soltó.
Nadia no se dejo amedrentar y paso por delante de él.
-¿Del mismo modo como tu lo hiciste conmigo?- le dijo alcanzando la puerta de salida, se para aun costado del auto y espero a que el chofer le abriera cuando lo hizo entro al auto sin mirar a Siwon que se había quedado apretando los puños en la puerta.
A Nadia le temblaban las manos, el cuerpo entero cuando el entró al auto inundando el espacio. Sintió unas ganas terribles de llorar, pero respiro profundo y trato de reprimirlas.
El móvil de Siwon timbro. Vio el número de contacto e hizo una mueca rechazando la llamada.
-Nadia perdoname -comenzó a decir acercándose a ella.- Lo siento.
Siwon invadió su espacio atrapándola entre la puerta y su cuerpo.
Sin querer regreso a mirarlo. Siwon pudo ver sus ojos enrojecidos y una mirada de arrepentimiento paso por sus ojos.
Nadia no le contesto, pero Siwon le dio un beso suave en los labios en su barbilla y se inclino para besar sus hombros descubiertos para regresar a su boca y depositar besos intermitentes y no dañar su maquillaje.

Taehyung estaba bastante nervioso, las alfombras rojas lo ponían nervioso, las cámaras siempre lo atrapaban haciendo alguna cara graciosa que después estaba en cientos meme de cada país.
-Tranquilizate- le dijo Namjoon dándole un palmada en la espalda- solo respira y trata de que no te atrapen desprevenido- dijo por último.
Jungkook llego hasta ellos todo entusiasmado.
-Tae, no vas a creer quien llego a la fiesta- Taehyung hizo cara de no comprender- ¡Noona!- al ver que Tae seguía sin reaccionar continuó- ¡Nadia! La mamá de Sebastían.

V, no creyó que el gran Choi Siwon la llevara, pero era obvio que era un hombre con mucha confianza en si mismo.
-Y se ve hermosa Tae, es otra totalmente- siguió Kook- ven asomate.

Desde donde estaban podían ver a la gente llegar al edificio, y era la verdad, allí estaba ella del brazo de su esposo, brillando aun mas que su vestido, su sonrisa. Mientras él la había extrañado, ella era feliz con su marido. Los flashes de las cámaras no hacían mas que propinarle un aura blanca sobre sus cabellos castaños como el oro viejo.
-Vamos Tae, es nuestro turno, ellos fueron los últimos invitados- Jungkook lo tomo de la mano jalandolo a la salida.

Todos los medios de comunicación invitados al evento dispararon sus flashes hacia ellos, primero en grupo y luego a cada uno con una pose libre, V hizo lo mismo de siempre, haciendo la V de victoria con los dedos los colocaba sobre su ojo.
Fue al recorrerse al final cuando su mirada se encontró con la de Nadia quien bajo la suya con rapidez, tomando de nuevo el brazo de su marido.

 Fue al recorrerse al final cuando su mirada se encontró con la de Nadia quien bajo la suya con rapidez, tomando de nuevo el brazo de su marido

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Menor que yo++Terminada++Donde viven las historias. Descúbrelo ahora