Menor que yo++Terminada++

Capítulo XXXIX

Después de esa madrugada en que salió de la casa de Siwon y pasar la noche con los chicos, se había dedicado a buscar un cuarto para Sebastían y ella.

Hasta el momento Siwon no le había cancelado las tarjetas, pero no podía darse el lujo de comprarse un departamento, pero gracias al mánager de Tae encontró uno en muy buena ubicación y sólo en el cuarto piso de un edificio muy lindo y limpio.
Sebastían tendría su propia habitación y ella también.

Nadia recordó el día en que Taehyung fue a ayudarle a limpiar el lugar.
Cuando Sebastían se descuidaba, Taehyung le robaba besos o la abrazaba a escondidas. Mientras estuvo en la casa de los chicos, no podían hacer prácticamente nada, solo se tomaban de las manos, le acariciaba la mejilla o le daba pequeños besos en el hombro, una vez mientras ayudaba a Jin en la cocina, Tae se acercó a abrazarla por la espalda dándole un rápido beso en la mejilla, Jin estaba de espaldas a ellos y cuando regreso a mirarlos Tae la soltó de inmediato, la cara avergonzada de Tae la lleno de ternura. Jin solo sonrió y continuó cortando vegetales para la sopa.

Taehyung la ayudó con la mudanza... Bueno solo el ultimo día de tres que le había costado mover las cosas de la casita anterior a este departamento que era a todas luces mas amplio.
Tae había estado muy ocupado con las promociones y la gira, ese día, el último de la mudanza se hizo un tiempo para ir a ayudarla prometiendo a PD Nim que se esforzaría al máximo para recuperar ese día, solo así obtuvo permiso de estar con ellos. Sebastían estaba mas que feliz de tener a su amigo allí, jugo con el casi todo el tiempo y le ayudo a ordenar su nueva habitación. Desgraciadamente cuando estaba por irse el drama comenzó.

-Por favor mami, no quiero que se vaya, dile que no se vaya- Sebastían sostenía la mano de Tae y la de ella.
-Mi vida él no puede quedarse, tiene que regresar a su casa o lo regañaran. -le dijo poniéndose a su nivel.
-¿Su mamá lo regañara?- preguntó inocente.
-No mi amor, sus hermanos mayores.
-Di que no puedes ir, que un dinosaurio se comió la carretera.

Taehyung río y un segundo después sacaba de su bolsillo el móvil para llamar a Namjoon, diciéndole exactamente lo que el pequeño le había dicho. Nadia tratado de evitar que hiciera eso pero Tae no le hizo caso.
-Entiendo, pero debes llegar temprano aquí.
-Si hyung.

Sebastían sonrió feliz limpiando las lágrimas de su rostro.

Nadia arreglo la camita de Sebastían y le dio algunas mantas a Tae para que se acostará en el suelo, Sebastían insistía en que durmiera en la misma cama.
Pero ya le habían hecho muchas con sesiones.
-No abuses jovencito.- lo reprimió.

Sebastían se durmió enseguida después de bañarlo. Tae se quedó a su lado por que Sebastían no quería perderlo de vista, temía que su amigo se fuera.
Después de que Sebastían se quedara dormido, Tae fue a buscar a Nadia, quien estaba en la cocina bebiendo de una taza humeante.
Tae le quito la taza de las manos poniéndola a un lado para después abrazarla, rodeándole la cintura con sus brazos y exhalando muy fuerte el aroma que desprendía su ropa.
-¿Esta todo bien? -le preguntó.
-Si, ahora si- Nadia le rodeo también la cintura.
Taehyung busco sus labios, la beso con suavidad, al principio, pero rápidamente urgió el beso, enmarcándole el rostro con las manos como para evitar que ella se fuera, la lengua de Nadia se abrió paso entre sus dientes tocando su lengua, y un gemido se le escapo de la boca, Tae atrapó su lengua con sus labios y luego estas se entrelazaron con hambre y urgencia, Tae la tomo por la cintura montándola en la encimera de la cocina, se colocó entre sus rodillas, ahora era ella quien le sujetaba el rostro entre las manos y besaba sus labios intermitentemente pasando de un labio a otro, succionando, lamiendo.
Los largos dedos de Tae rozaron sus pies recorriendo el camino hasta sus rodillas y luego hasta sus muslos, subiéndole el vestido a su paso, Nadia se aferro a sus hombros cuando se deshizo de su ropa interior. Sus dedos comenzaron a tocar su intimidad, ahogados gemidos y suspiros salieron de su boca, intentando apagar el sonido contra su hombro, Taehyung sonrió, le agradaba escucharla.

Habían pasado muchos meses desde la ultima vez que estuvo con Tae y ahora, su cuerpo volvía a funcionar, su cuerpo respondía al movimiento, rítmico de sus dedos, su cuerpo temblaba y le reclamaba. Se aferro al cuerpo de Taehyung con piernas y brazos, se había corrido solo con la caricia de sus dedos.
El chico comenzó a dejar pequeños besos en su hombro derecho subiendo por su cuello hasta la cara de Nadia que tenía un rubor rosado.
-¡Dios! Lo siento....-suspiro- estoy tan avergonzado- confeso pasando la mano por sus cabellos dorado oscuro. Sonrió. - Nadia... No traigo preservativos.

Nadia se conmovió , en realidad no esperaba que trajera, nadie estaba preparado Para lo que estaba pasando.
-Hace años que tomó la píldora.

Taehyung la abrazo muy fuerte de nuevo, haciéndola bajar de la encimera. Nadia le estaba dando luz verde.

-Tenemos toda la noche.
La tomo de la mano, para conducirla a la habitación que ella ocupaba.
Nadia vio sus pantis en el suelo y se detuvo a recoger la prenda, pero Tae fue mas rápido guardándolas en el bolsillo de su pantalón.
Al entrar a la habitación la beso de nuevo con urgencia y ella le respondió igual, la hizo sentarse en la cama y la despojo del vestido.

Taehyung hizo esa cara de "woao" cuando algo lo sorprendía.
-No hagas eso, me a vergüenzas- le pidió.
-¿De verdad?- ella asintió - entonces lo haré muy seguido por que me encantas, me gustas mucho.
Diciendo esto Tae se quitó la camisa por encima de la cabeza y volvió a besarla con pasión subió ambas rodillas a la cama dejando a Nadia en medio. Durante todo el tiempo que estuvo sin ella moría por sentir sus manos acariciándolo, su boca besándolo y su piel cálida contra la suya, tal como ahora la sentía.
Las manos de Nadia bajaron por el vientre de Tae, acariciado su miembro a través de la tela del pantalón.
-Ha... ummmm -murmuro contra la boca Nadia al sentir como su mano hurgaba por el interior de sus boxer's- ¡Oh Dios!- exclamó apartándose unos milímetros de su boca cuando sintió la suavidad de su mano sacar su erección del pantalón comenzando a acariciarlo de arriba abajo muy despacio, cerro los ojos disfrutando de la caricia.
Tae siguió besándola, su lengua resbalo por su garganta, sus manos la despojaron del bra lanzándolo lejos para después sopesar sus senos, intercalaba sus labios, su lengua y sus dientes al acariciarlos.
Nadia levantaba la cadera hacia él, urgiéndolo mientras el baja por su estomago lamiendo, besando y succionando cada pedazo de piel.
Nadia paseo las manos por el pecho de Tae, beso sus hombros, acarició su espalda, sus piernas deleitándose con la suavidad de su piel color caramelo.

Lo que hizo Nadia después realmente lo dejo en shock. Tomo su miembro entre sus manos y lo coloco entre sus piernas frotándose con el.
-¡Maldición! -la respiración de Tae se aceleró y el liquido pre seminal apareció. Se quedó quieto jadeando.
Fue entonces que Nadia tomo el mando haciendo lo girar se puso a horcajadas sobre él.
-Eres una tramposa -le dijo haciendo un puchero, Nadia lo beso mientras su cadera bajaba hasta su vientre.
Taehyung tomo su erección y busco la intimidad de Nadia, quien al sentirlo solo atino a cerrar los ojos y dejo salir un gemido, entonces fue el quien se volvió a colocar sobre ella.
Nadia respiraba superficialmente, Taehyung entraba y salia de ella con lentitud, saciandose con cada nuevo embiste, podía ver en él rostro de Tae lo mucho que disfrutaba de las sensaciones que le provocaba.
Aun con los ojos cerrados Tae se inclino, aplastándola con su pecho.
-Oooooh...- sus labios buscaron los suyos.- eres tan hermosa, maravillosa... Aaaaah

Nadia se aferro a él con las piernas sobre sus caderas provocando con esto que la penetración fuese mas profunda.

-Tae... voy a terminar- anuncio estrechando su cavidad contra el miembro viril de Tae.
Al hacer eso, Taehyung sintió que también se correría.
Era una deliciosa y placentera tortura sentir tal presión. Verla alcanzar la cúspide de su pasión lo volvió loco y se sentía tan bien. ¿Tenia idea esa mujer de lo sexy que era?

El cuerpo de Nadia se estremeció bajo el cuerpo de Tae.