Embarazada de mi jefe (Terminada)

Capitulo 44 (Pov Christian)

— Christian Grey, soy Amanda Hills, le informo de que la pequeña a la que quería adoptar, ya no...— Empalidezco. Esa niña de la que habla, es Clarita, su madre biologica, resultó ser drogadicta y se la quitarón los de asuntos sociales, en cuanto me enteré quisé ayudar, pero la mujer se suicidó y decidí adoptar a Clarita.

— ¿Qué ha pasado?. — Trato de ocultar mis sentimientos, no quiero que Ana se entere, se supone que sería una sorpresa, pero la sorpresa me la he llevado yo al saber que mi pequeña está otra vez embarazada.

— Señor, la niña no reaciona, lo siento mucho, no sabemos como ha podido pasar. — La mujer se pone a llorar y después cuelga.

No me creo nada de esto, ¿qué ha podido suceder?. Ese era un sitio seguro, dios mio.

Miro a Ana. Como se entere de esta noticia no va a poder soportarlo, tengo que fingir estar bien.

— ¿Qué pasa Christian?, ¿y esa cara?. — Ana me mira fijamente. Trato con todas mis fuerzas de reprimir las lágrimas.

— No pasa nada pequeña, voy a la ducha, tu descansa. — Me acerco a ella, la doy un tierno beso en los labios y me encierro en el baño.

No sé como sentirme, esa niña era como una hija, quería que formará parte de nuestra familia, y ahora ya no será posible.

Abro el grifo de la ducha y lloro en silencio. No puedo estar mal delante de Anastasia, ella no va a poder con esto, no sé si podrá superarlo, tengo miedo a decirselo, miedo a que la pase algo.

Cierro la ducha, me envuelvo en una toalla, y me quedo un rato en el baño encerrado. La verdad es que no puedo salir así, no sé como lo voy a poder ocultar, maldita sea, podía haber hecho algo para evitar esto.

Me tapo la cara con mis manos e intento tranquilizarme. Solo espero que mi Ana se duerma, así no se dará cuenta de que algo pasa. Lo peor de todo es que se acabará enterando, y tengo miedo a su reacción.

Después de unos minutos pensando, salgo del baño. Ana se ha quedado dormida.

Mi pequeña, está tan hermosa cuando duerme. Definitivamente es un ángel que ha venido a salvarme, no sé que sería de mi sin ella.

Me acerco a ella, acaricio su pelo, beso su cabeza y salgo de la habitación.

Me dirijo al cuarto de Ted, que duerme en su cuna. Se parece mucho a mi Ana y eso me encanta.

Mi niño abre sus ojos, y antes de que se ponga a llorar, lo cojo en brazos y le llebo a mi despacho. Necesito llamar a Eliot y preguntarle como va la Editorial.

Dejo a mi hijo en su sillita y llamo a Eliot mientras le vigilo.

— Hombre Christian, ¿qué tal?, ¿a qué se debe tu llamada?. — Contesta mi hermano.

— Eliot, ¿cómo va la Editorial?, espero no encontrarme sorpresas cuando vuelva. — Estoy arrepintiendome de haberle puesto al mando.

— Pues te iba a llamar, porque resulta que mañana vienen unos editores muy famosos, quieren publicar nuevos titulos, y me han pedido que estes presente. — Me confiesa Eliot.

— ¿Qué?, ¿y cuando ibas a decirmelo?, sabes que estoy muy ocupado joder, no sé si puedo ir. — Contesto irritado. No me hace gracia dejar a Ana sola, quería estar con ella, vigilar que nada la pase.

— Ya, cuidando a tu querida novia, pero hermanito, creo que estas exagerando, sabe cuidarse sola, no puedes faltar. — Dice mi hermano molesto.

— No te metas en mi vida Eliot, y no estoy exagerando, tu no sabes nada así que cierra la boca. — Contesto enfadado.

Mi hermano ha aparecido  hace poco, nunca le he visto mucho, y si le he llamado para que me sustituya es porque no sabía a quien pedirselo, es por eso que no tiene derecho a opinar sobre lo que hago, y si considero que debo dejar mi trabajo para cuidar de mi pequeña, es mi decisión, y no cambiaré de idea.

— Vale, ¿entonces vas a venir?, solo serán unas horas. — Intenta convencerme mi hermano.

No muy seguro de mi decisión, le digo que asistiré, al minuto de decirlo ya me arrepiento.

— Gracias hermano, hasta mañana. — Cuelga antes de que acabe por darle una negativa.

Dejo mi móvil sobre la mesa, cojo a mi hijo en brazos y le llebo a la cuna, donde se queda placidamente dormido.

Salgo de la habitación de mi Teddy, y me acuesto al lado de Ana, la abrazo y me dejo vencer por el sueño.

A la mañana siguiente...

La alarma suena. Me levanto de la cama de mala gana y me arreglo. Sigue sin hacerme gracia asistir a esa reunión, intentaré acabar lo antes posible.

Me despido de Ana y de mi hijo y me dirijo a la Editorial, donde me está esperando mi hermano.

— Me alegro de que hayas venido, los editores estarán a punto de llegar. — Me saluda mi hermano.

— Borra esa sonrisa Eliot, si te he dejado al mando es para que te las apañaras solo, así que la próxima vez no pienso venir. — Le advierto.

— Es increible hermanito, no pensé que esa chica te importase tanto, no te reconozco. — Dice Eliot como si eso fuese algo malo.

— Me da igual lo que opines, ahora cierra la boca hasta que lleguen los editores. — Contesto y voy hasta mi despacho. Mi hermano me sigue.

— Vamos Christian, no te pongas así, reconoce que estas exagerando, solo es una mujer más...— Le interrumpo.

— No es una mujer más idiota, es la madre de mis hijos, la mujer a la que amo, y si exagero es porque una vez casi la pierdo. — Grito alterado.

Mi móvil comienza a sonar, es Ana, no dudo en cogerselo.

— Pequeña, ¿qué haces despierta?. — Trato de calmarme después de la conversacion con mi hermano.

— Lo sé todo Christian. — Dice Ana con la voz apenas audible.

¿Cómo que lo sabe todo?, ¿de qué habla?

—¿A qué te refieres Ana?. — Estoy empezando a preocuparme, la conozco y no está bien.

Ana no contesta.

Buenas noches, al fin dejo nuevo capitulo.

Gracias por su paciencia.

Besoos