Embarazada de mi jefe (Terminada)

Capitulo 20

Christian con esto me está demostrando que realmente me quiere, odio verle mal.

— Christian, levantate, no voy a dejarte, te quiero. — Digo con lagrimas en mis ojos, ya no puedo soportarlo más, necesito sentirle.

Christian se levanta y me coge en brazos, lo que provoca que ahora mismo sea la mujer más feliz de este mundo.

— Te quiero Ana, no quiero que me dejes, por ti dejo lo que haga falta, seré como tu quieras, pero no te separes de mi. — Me confiesa Christian mientras me abraza.

— No lo voy a hacer Christian, perdoname, perdona por irme con la loca de Leila. — Digo mientras no puedo parar de llorar, solo que está vez, las lagrimas son causadas por la emoción.

— No pasa nada Ana, solo no me dejes, sé mia para siempre. — Dice un Christian emocionado.

— Lo seré Christian, no lo dudes jamás. — Digo yo también emocionada.

— Solo mia, pequeña. — Dice Christian y posa mi mano en su pecho, lo que hace que me emocione más, Christian está dejando que le toque.

Aún dudosa, acaricio su pecho con suavidad, hasta que no puedo más y me abalanzo de nuevo a sus brazos.

Christian besa mis labios apasionadamente mientras yo tomo la iniciativa, va a ser la primera vez que pueda hacer el amor con él pudiendo tocarle, acariciar cada parte de su cuerpo. Aún no me lo creo, no me creo que esté haciendo esto por mí.

Tras una noche bastante intensa, Christian se queda dormido abrazado a mí, yo en cambio no consigo dormir, así qué me salgo a la terraza para pensar en mis cosas.

De pronto escucho gritos, dios mío, son de Christian.

— Ana, por favor, no me dejes. — Grita Christian muy alterado.

— Christian, estoy aquí, tranquilo. — Digo sentandome a su lado, sacudiendole para que se despierte.

— Ana. — Dice Christian y me abraza.

— Si, soy yo Christian. — Acaricio su pelo mientras le miro fijamente, creo que aún sigue dormido.

— No te vayas de mi lado Ana, sin ti no puedo dormir. — Christian me abraza con más fuerza.

— Estoy aquí Christian, no voy a moverme de aquí. — Digo mientras acaricio su espalda. No me gusta verle así, parece un hombre fuerte, pero en el fondo es tan fragil...y eso me hace amarle aún más, sí es posible.

Christian logra dormirse de nuevo, y yo también me dejó vencer por el sueño.

A la mañana siguiente...

Tengo cita con la doctora, y Christian ha decidido acompañarme. Estoy emocionada, mi niño está creciendo dentro de mi, hace 3 meses que sé de mi bebé y ya le quiero muchísimo.

— Ana, ¿estas lista?. — Pregunta un Christian impaciente, sé que muere de ganas por ver a nuestro pequeño.

— Ya voy Christian, solo me queda ponerme el abrigo. — Me doy un último vistazo en el espejo y de pronto siento como Christian me abraza por detras.

— Estas hermosa Anastasia, cada día más. — Dice Christian, y pone su mano en mi vientre, lo que hace que me estremezca.

Me giro y le deposito un tierno beso en sus labios.

— Eso piensas tu que me ves con buenos ojos. — Me pongo el abrigo y salimos de Escala.

Christian me abre la puerta del audi, me abrocha el cinturon y se sienta en el asiento del conductor, coloca los espejos y arranca el coche.

Camino al hospital, vamos escuchando música. Parecerá una tonteria, pero si voy en el coche sin música, me mareo.

Llegamos al hospital y nos sentamos a esperar a que nos llamen. Cuanto más tiempo pasa, más nerviosa estoy, y creo que a Christian le pasa lo mismo. Ninguno de los dos sabe como hacer esto, pero me emociona vivir la experiencia con él, y es que con él, ya he vivido muchas primeras veces, lo que me hace amarle con locura.

Mientras esperamos en la sala de espera, Christian me agarra la mano para tranquilizarme, sabe que estoy muy nerviosa, y la verdad es que tenerle aqui, me reconforta muchísimo, solo él consigue calmarme, hacer que me sienta segura.

— Anastasia Steele, pase por favor. — Sale de pronto una doctora de una de las consultas.

Christian y yo nos levantamos y entramos a la consulta algo nerviosos, esto es otra primera vez para los dos, vamos a ser padres, y ninguno sabemos como hacerlo. Aún no soy consciente, ya que hace apenas unos meses, estaba sola, sin saber que volveria a estar con Christian.

— Pueden sentarse, por favor. — Dice la doctora señalando los asientos.

Christian y yo nos sentamos. La doctora empieza a escribir algo en el ordenador hasta que al fin habla.

— Señorita Steele, ¿su primer embarazo verdad?. — Pregunta la doctora sin quitar la vista del ordenador.

— Si...— Respondo muy nerviosa. Suerte que Christian me tranquiliza cuando posa su mano en mi muslo y me sonrie. Eso para él es como decirme que todo va a salir bien.

— Ya veo, bueno, segun me ha contado tu antigua doctora, ya estas de 3 meses. Yo soy su sustituta mientras ella está de vacaciones, pero seguirá atendiendote ella, yo no me atrevo a llevar casos así, tan delicados. — Dice la doctora.

¿Qué?, ¿qué está diciendo?, ¿Cómo que caso complicado?, ¿está mal mi bebé?, necesito que alguien me explique.

Miro a Christian, este está palido.

— ¿Qué mierdas está diciendo?. — Dice Christian de pronto.

Oh dios, esto no me lo esperaba para nada, yo pensé que todo estaba bien...

— Por favor, tranquilidad, yo no sé decirles bien, pues es la doctora quien ha llevado hasta ahora tu embarazo, lo que sí sé, es que usted debería guardar mucho reposo y desde luego coger peso, y lo digo muy en serio. — Dice la doctora dejandome más en shock aún.

— Me parece usted muy poco profesional, primero nos dice eso, y ahora no sabe decirnos exactamente que pasa, quiero que venga otro doctor inmediatamente, no va usted a atender a mi chica. — Grita Christian fuera de si. La verdad es que yo también estoy en shock, no entiendo nada, ¿cómo nos dicen esto de esta manera?.

— Oye, yo sólo me dedico a informar de lo que pone en el informe de está señorita, y si quiere ver usted a otro doctor, ahora mismo le...— La doctora no termina de hablar, pues de pronto aparece otra doctora.

— ¿Qué está pasando aquí, hijo?. — Pregunta la doctora mirando a Christian, y después a mí.

Buenas noches, aqui dejo nuevo capitulo.

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Besoos