Embarazada de mi jefe (Terminada)

Capitulo 48

Conozco muy bien esa voz. Mierda. ¿Cómo me ha descubierto?.

- Christian, esto no es lo que parece, no quería preocuparte, estoy muy bien. - Miento. Trato de suavizar las cosas.

- ¿Muy bien?, por dios Ana, estas en un jodido hospital, me has mentido, ¿sé puede saber por qué no me lo has dicho?. - Contesta Christian enfadado, preocupado.

- Porque lo ibas a exagerar, solo me he mareado, me caí y estoy aquí, pero no es nada, la doctora dice que el embarazo va muy bien, no tienes que preocuparte. - Fingo una sonrisa. Si dieran un premio por mentir, me darian uno.

- ¿Estas segura de eso?, la doctora me ha llamado y me ha dicho que te encontrabas mal, ¿ha sido por eso?, o, ¿es qué hay algo que no me estas contando?. - Contesta Christian sin estar seguro de lo que estoy diciendo.

- ¿Cómo que te ha llamado la doctora?. - La dije que no lo hiciera, ademas, ¿cómo sabía que tenía que llamar a Christian?, no sabe quien soy, no he visto a esa doctora en mi vida, ¿cómo es posible?.

- Me ha llamado porque tengo contacto con todos los hospitales, y no cambies de tema, creía que podiamos confiar el uno en el otro, te pasa algo y ni si quiera me llamas, ¿en que mierdas estabas pensando?, ¿sabes lo que he tenido que pasar?, te he estado buscando, eres una inconsciente. - Grita Christian.

- ¿Sabes por qué no te lo he dicho?, porque mira como te pones, me tratas como una enferma, dos doctoras están viviendo en Escala, has aumentado la seguridad, no me dejas salir de Escala, y ahora encima has contactado con todos los hospitales, ¿desde cuando tienes contacto con los hospitales?, ¿por qué exageras tanto las cosas?. - Esta vez soy yo la que grita. Estoy a punto de derrumbarme, no puedo más.

- Desde que me enteré que estabas embarazada contacté con todos los hospitales para decirles que si te pasaba algo y aparecias por allí, me llamaran inmediatamente. - Contesta Christian más tranquilo. Seguro lo hace porque alterarme es malo en mi estado.

- Esto es increible Christian, se acabó, no quiero seguir así. - Me tapo la cara con mis manos y comienzo a llorar en silencio. Esto puede conmigo.

- ¿Qué dices Ana?, no por favor, no me dejes. - Christian se acerca hasta mí. Está muy nervioso, y siento que tiene miedo.

- No te quiero dejar, solo quiero que esas doctoras se vayan de Escala, no necesito tanta seguridad, quiero que todo vuelva a ser como antes. - Suplico entre sollozos.

- Está bien, pero no vas a poder salir tu sola de Escala, siempre saldrás conmigo, más vale que me estes contando la verdad, que todo esté bien y no existan riesgos durante el embarazo. - No lo puedo creer. ¡Christian acaba de ceder!.

Abrazo a Christian con todas mis fuerzas, por fin todo va a ser como antes. Le amo, le amo más que a nada en este mundo.

- Ana, prometeme que estas bien, no quiero perderte, no quiero volver a pasar por lo mismo, otra vez no, por favor. - Está vez es Christian quien se derrumba. No puedo contarle la verdad, le destrozaría, y si me pasa algo quiero recordarle bien, no cansado y preocupado.

- Te lo prometo, tranquilo, todo está bien, por favor llevame a casa. - Miento de nuevo. Me parte el alma verle así.

Christian me coge en brazos, y salimos de la habitación. Está loco, aún tenemos que pedir el alta.

Cuando llegamos a recepción.

- Me llebo a mi chica, encargaros del alta. - Salimos del hospital.

Taylor nos está esperando con el coche en marcha. Seguro que lleba mucho tiempo esperando, pobre.

Nos montamos en el coche. Estoy nerviosa ahora mismo, aún me siento culpable por mentirle.

- Ana, ven, te siento muy lejos. - Christian se acerca hasta mí. Conozco esa forma de mirarme.

Le miro maliciosamente. Tengo muchas ganas de sentirle.

Christian hecha la cortina de privacidad que tiene el coche.

- Ana, no puedo más, no aguanto mas. - Nuestros labios se juntan ansiosos.

Me quito el cinturon y me subo encima de sus piernas. Puedo notar su miembro en mi sexo. Dios, me muero de ganas.

El beso se intensifica. Joder. Sé lo haría aquí mismo.

Dirijo mi mano hasta su miembro, sin dejar de besarle, consigo desabrochar el boton de cierre de su pantalon.

Su manos se posan en mi pecho. Joder, le necesito

El coche se para. Hemos llegado a Escala.

Nos acomodamos un poco la ropa, bajamos del coche y soy incapaz de mirar a Taylor. Muero de verguenza.

Christian me coge en brazos y subimos hasta la habitación, cierra la puerta con seguro y me deja sobre la cama.

- Eres mía Ana, y voy a castigarte por haberme preocupado llendote así. - Christian se deshace de mi ropa

- Te quiero dentro de mi Christian, te lo suplico. - Digo entre jadeos. No puedo aguantar más tiempo sin sentirle.

Christian se desabrocha un poco el pantalon, y se sube encima de mí. Mi cuerpo muere de ganas por sentirle.

Cierro los ojos y en apenas unos segundos, ya le siento dentro de mi.

Suelto un gemido de placer, Christian besa mis labios desesperadamente tratando de hacer que no haga ruido, y eso me excita más aún.

Sus embestidas cada vez son más rápidas, yo solo me agarro a sus gluteos y dejo que me haga lo que quiera.

- Dime que eres mía pequeña, correte para mí. - Dice un Christian muy excitado

- Soy tuya, no pares. - Suelto entre jadeos.

Siento que no puedo más, muero de placer, estoy a punto de tocar las estrellas.

El placer se intensifica, no puedo evitar gritar. Christian besa mis labios y juntos llegamos al climax.

Christian se quita de encima mia y se tumba a mi lado.

- Ha sido maravilloso pequeña. - Dice Christian aún recuperándose.

- Si, te amo. - Le miro fijamente a los ojos y acerco mis labios a los suyos. Jamás me cansaré de sus besos.

- Yo también te amo, por eso no soportaría perderte, eres lo más importante para mí, no quiero que te pase nada. - Christian me abraza.

La culpa se apodera de mi, no puedo ignorar el miedo que tengo, no puedo seguir ocultando este secreto que no me deja respirar con tranquilidad.

- Christian, no me quiero morir. - Le abrazo con todas mis fuerzas y dejo que las lágrimas reprimidas salgan de mis ojos. Su cuerpo se tensa.

Continuará...