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Filias

— Entonces, ¿eras policía? Vaya, no pareces ese tipo de chica.

— ¿Que quiere decir, capitán?

— Nada relevante... Solo que, ya sabes, no intimidas mucho con esa apariencia...

Pip exhaló una bocanada de humo y se giró hacia Seras con una sonrisa en el rostro, mostrando una hilera de perfectos dientes en una mueca burlona.

— ¿Atrapaste a muchos hombres malos, mignonette?

— ¿Hombres como usted? Sí, algunos.

Seras se sentía ofendida por el tono de burla en la voz y esa mueca en su rostro, pero no perdería la compostura. Estaba harta de salir huyendo cada vez que la fastidiaba, esta vez jugaría en su terreno.

— ¡Oh, vamos! No soy tan malo. Si me dieras una oportunidad, podríamos conocernos mejor.

— ¿Conocer qué? ¿Sus pervertidos gustos?

— Nadie mencionó mis pervertidos gustos, pero si deseas ver ese lado mío, puedo mostrartelo ahora mismo.

Acarició su hombro de forma sutil pero sugerente. La draculina lo miró fijamente, sin intimidarse ante su roce. 

— Capitán, ¿sabe que son las filias?

— ¿Filias? Oh, ma cherie, no sabía que fueras una chica de ese tipo. Sí, conozco algunas.

— ¿Hay alguna que practique?

— Depende la ocasión. Soy un hombre abierto de mente, no me cierro a probar cosas nuevas con hermosas mujeres como tú.

— ¿Y sabe que algunas son delito?

— No temas, mignonette, no hago nada que sea ilegal.

— Miente, capitán.

— ¿Si? No creo mentir en cuanto a mis gustos, Seras.

No entendía el rumbo de la conversación, ¿se le estaba insinuando? ¿Lo estaba tanteando? Era obvio que a lo largo de su vida hizo cosas que no podrían considerarse legales, ¿porqué el repentino interés en él? En ningún momento perdieron contacto visual, por primera vez Pip se sintió cohibido ante su escrutinio, ¿lo estaría juzgando?

— ¿Sabe? Si aún estuviera en mi jurisdicción, ya lo hubiera multado.

— ¿Porqué, mignonette? ¿Cortejar a una mujer es un delito en Inglaterra?

— El acoso también es un delito, pero no tan grave como el primero.

— ¿Y cuál es mi delito, entonces?

— Capitán, la necrofilia es ilegal...

Sonrió triunfante y le dio la espalda al capitán, saliendo de la habitación con un meneo de cadera. Por primera vez Pip Bernadotte no supo que contestarle a una mujer, ¿necrofilia? Tenía que recordarlo, Seras era prácticamente un cadáver, un no muerto... No dejaría de lado su creciente deseo por la draculina, pero ya no sentiría que su cortejo fuese algo cotidiano.

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Agradecimiento especial a _Jannel_ y Veratos por inspirar éste drabble. Crédito del hermoso cabezal a Veratos