Helados

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Estoy sentada en el bordillo de la cafetería que está en frente del taller de los Dixon, el calor se me pega como una segunda piel, noto el sudor recorriendo mi cuello como si hubiese estado corriendo una maratón, de pronto veo aparecer ante mis narices un helado de plátano y fresa que me dice con la voz en falsete de Ale "Muérdeme o lámeme, como prefieras, pero cómeme".

Sin pensármelo le arrebato la tarrina de las manos antes de que tenga ocasión de seguir haciendo el imbécil con mi dosis de azúcar diaria, vamos a dejar las cosas claras, no tengo muchos vicios, no fumo, y solo bebo cuando voy de fiesta y no de manera crónica, así que si me quitan mi alegría azucarada puedo ponerme violenta nivel Kill Bill mutada en Alíen.

¿Tenéis el concepto? Ya sé que es grotesco, superadlo, el caso es que así de desagradable me puedo llegar a poner.

-Joder si llegas a ser una piraña me quedo sin mano- se queja Ale.

-Me gustaría ser una piraña, las pirañas están en el agua, fresquitas, yo estoy a dos grados de derretirme como la bruja mala del mago de Oz cuando Dorothy le tira encima el cubo de agua-

-Eso me gustaría verlo- le pega un mordisco a su cucurucho de nata.

-Oye unicornio, hay algo que te quería decir- al segundo tengo su atención puesta sobre mí –no quiero que pienses que te lo he ocultado, es solo que quería hacerlo especial, pero no sé cómo hacer que lo sea creo que solo te lo voy a decir y ya- me golpea rítmicamente con su rodilla en la mía.

-Di, di, di ¿es sobre la loca esa? ¿La han pillado?-

-No, de eso la cosa sigue igual, si para septiembre no se sabe nada me tocará volver de todas formas, pero no es eso lo que te quería decir- me meto un poco de helado de plátano y siento como se derrite en mi boca lo gozo por un momento antes de seguir hablando –por fin me he librado de mis miedos,- me muerdo el labio inferior, -le he dicho a Matt que acabaré con la serie pero que después me quiero concentrar en ser cantante y me apoya- digo dando un pequeño gritito.

Él pega una risotada y me abraza como puede, fuerte, intentando no mancharme con su helado que se está derritiendo.

-Pero eso, eso es genial, cuanto me alegro, así estas de contenta, y yo que pensaba que era porque te gustaba Daryl- suelta sin pensar.

Abro los ojos como platos de la impresión, giro la cabeza haciéndome la loca y me pongo a devorar el helado para no tener que hablar.

-Espera un segundo ¡sí que te gusta! Que mona- dice con voz aguda –Rainbow y Daryl subidos en el pajar, ¿Qué harán? De todo menos bajar. Daryl y Rainbow subidos a un pajar ¿Qué harán? Seguro que follar- chilla y yo le clavo el codo el costado, Ale se dobla haciéndose rosca para huir de mí.

-¿Te quieres callar? Por si no te has dado cuenta trabaja justo en frente poni tarado- le gruño señalando con mi mano el taller.

-¿Acabas de llamarme poni?- pregunta frunciendo el ceño.

-Y tarado también pero ya veo con lo que te quedas- digo poniendo los ojos en blanco.

-Estoy tarado eso no es un insulto es la pura verdad, poni me llama la tía, que valor- se queja todo indignación.

-Oye listo que es a mí a la que estabas avergonzando, cállate de una vez.- Le regaño en vano porque no me hace ni caso.

-No me callo, estoy feliz, por fin vas a hacer lo que amas y además has encontrado alguien con quien celebrarlo, bien por ti- me anima y mastica el barquillo del cucurucho para después lamerse las manos que tiene pringadas de nata.

-Pero que cerdo- me descojono, mi helado esta derretido también así que me bebo lo que me queda.

-Primero poni y ahora cerdo, que soy un unicornio a ver si te enteras- me dice y le saco la lengua. –Bueno ¿Cómo vais de enserio?- niego con la cabeza, cuando le da por un tema es peor que una vaca en brazos pero mejor no sé lo digo.

-No vamos de ninguna manera porque no hay nada, es decir a veces creo que le gusto, otras que solo me ve como una amiga, no sé lo que quiere de mí, es difícil de leer- murmuro lo último pensativa.

-Rainbow por si no te has dado cuenta es un tío, no un libro, no tienes que leerle- me explica con paciencia apoyando una mano en mi hombro.

-¿No? ¿De verdad? Júramelo- me burlo ahora yo.

-Pero a ver ¿os habéis besado al menos?- pregunta en plan cotilla.

-Evidentemente no- en serio me está poniendo los nervios de punta tener la conversión justo en frente de Daryl, que sé que no nos puede oír, pero aun así, jope.

-Pues sin besos no se avanza hasta el mambo horizontal- dice subiendo y bajando sus cejas de forma sugerente.

-Por favor, no empieces con las metáforas, te lo suplico-

-Te encantan mis metáforas, tengo una idea- dice levantándose y dirigiéndose al taller, no, no, no, mierda, una idea suya es por definición una mala idea.

-Oíd chicos, ¿os apetece noche de bolos?- le oigo preguntar cuando por fin le alcanzo.

-Claro que si- dice Merle saliendo de la salita.

-Ey- saludo a Daryl, él me hace un gesto con la cabeza y vuelve a lo suyo.

-Bien, nos encontramos directamente allí, cenaremos nachos con queso, arrastra a tu hermano.- Le ordena al mayor de los Dixon mientras señala al menor.

-No te preocupes, allí estaremos- afirma Merle con una enorme sonrisa.

Según salimos del taller, tiro de la hebilla de sus pantalones –pero a ver listo, si tú esta noche curras-

-Ya lo sé y Merle también- dice tan tranquilo.

-No lo entiendo- le digo mirándole desconfiada.

-Y por eso tú eres el arcoíris y yo el unicornio- explica con una sonrisa burlona adornándole la cara.

-Unicornio idiota querrás decir- le contesto yo un poco harta ya.

-Por favor, acabo de conseguirte una noche de bolos con Daryl- mi mandíbula se descuelga –así que tan idiota no soy- se gira mirándome con una enorme sonrisa –de nada- dice condescendiente.

-No se te ha pasado por la cabeza,- empiezo a decir respirando lento e intentando no ponerme a gritar a causa de los nervios -que si su hermano se va al bar a buscarte, Daryl decida que prefiere irse a casa-

-Por favor, habrá bolos, cervezas, nachos con queso y la chica por la que babea, créeme se quedará- dice totalmente seguro de si mismo.

-No babea por mí- niego jugueteando con mis manos.

-Sí que lo hace, no como tú, que te le follas mentalmente cada vez que le miras, él es considerablemente más recatado- miro a otro lado sacando morro ante eso, lo que más me jode es no poder rebatírselo.

Tener amigos para esto, de verdad que ya me vale, en mi próxima vida prefiero tener mascota a esto que tengo al lado que es enorme, estúpido y que me va a dejar sin aire con su abrazo de oso grizzli, ¡será bruto el descamisado este!

Hola aullidos nocturnos, si no tenéis un amigo tocapelotas y liante como Ale, sois ese amigo, o si como en mi caso, si lo tenéis y además lo sois, os aseguro que eso es una mezcla explosiva que solo dios sabe cómo puede acabar y que el diablo no se atreve a manipular.

Dicho esto, siiiiiiii os acabo de decir en el capítulo anterior y que no va a haber beso y hago que Ale les organice una cita ¿Qué está mal conmigo qué? Ni idea, pienso una cosa, hago otra, ¿es todo un truco para teneros con el alma en vilo? podría llegar a haber beso, pero que no recuerden que lo ha habido ¿serías capaz? Lo sería porque se me acaba de ocurrir eso ultimo según lo escribía y me ha gustado, así que si puede que lo haga, viva el mal.

Como siempre, espero que os haya gustado y os mando besototes.

Mi ángel guardián (T - 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora