¡Malas Decisiones!©

Capítulo 28 | ¿Porque La Besé?

NICK

Fui directo al baño a darme una ducha al salir del baño opté por ponerme unos vaqueros con una camiseta blanca dejé mi cabello tal y como estaba despeinado no, tengo nada que hacer así que ordenare parte de mi ropa cosa que es extraña porque no, suelo hacer eso pero, estaré tranquilo por esta noche a veces puedo ser algo aburrido o parecer un poco agresivo pero, no precisamente soy de forma.

Estoy ordenando mi ropa en el armario cuando de repente escuchó un escándalo que viene de abajo de inmediato pense que un ladrón entró a la casa abrí la puerta de la habitación corrí por el pasillo hasta llegar a una de las escaleras bajé con cuidado para no, tropezar abri la puerta de la cocina de un fuerte golpe.

- ¡Al diablo el agua!

Dijo tirando el vaso al suelo.

- ¿Que pasa? Se escuchan unos gritos todo está bien.

Dije preocupado.

- ¡Tu!

Exclamó mirándome a los ojos.

No puede ser porque tiene que hacer ese escándalo para llamar la atención está tía no, es normal.

- Ese soy yo al menos eso creó estás tratando de llamar la atención.

Dije serio.

- Yo llamar tu atención estas demente Quiero que te vayas de mi casa ahora mismo

Dijo molesta.

- No, puedo créeme yo también quiero irme pero, no puedo enserio.

Dije con los brazos cruzados.

- ¡No, te vas a ir!

Dijo más relajada.

Créanme eso es lo que quiero.

No, puedo porque mejor no, le dices a Rosa que se retiré está asustada tu la asustas.

Dije tranquilamente.

- Rosa lleva mi mochila a mi habitación.

Dijo pasandole la mochila a Rosa para que se fuera.

- ¿Porque eres así? ¿Porque tratas de llamar la atención? Eres una niña caprichosa y malcriada sin modales.

Dije acercándome a ella.

Tengo que admitir que es más guapa de lo que me pareció en un principio pero, no puedo pensar eso de solo hacerlo hizo que me humor se ensombreciera no, puedo distraerme en ella.

- Hablas de modales cuando estás en una casa que no, es la tuya escuchame bien niño de papá si quieres estar bien no, te acerques a mi.

Dijo con una mirada intimidante para irse.

- Es como si fueras la hija del diablo.

Dije tomandola por el brazo izquierdo.

Se giró de inmediato para alcanzar un cuchillo de la mesa de la cocina me acorralo a la pared y me puso el cuchillo en la garganta.

- No, piensas matarme no, eres suficiente para hacer eso estas llena de odio pero, ese odio no, es tan fuerte como para matar a alguien.

Dije tranquilamente.

- Pruebame y verás para que llevemos la fiesta en paz debes respetar mis ordenes.

Está chica es la más impaciente que he conocido me sorprende la facilidad en como me tomó se que las palabras que le digo pueden causar el más mínimo efecto en ella.

En menos de dos segundos la había cambiado de posición la tomé por la cintura y ahora soy yo quién la está acorralando a la pared le quite el cuchillo de la mano y lo tiré hacía un lado pude notar como se aceleró cuando sintió el impactó es extraño verla así acaso las chicas no, usan maquillaje no, es que se vea mal pero, todas las chicas usan al menos una gota de maquillaje.

- Voy a decirte cuales son mis ordenes niña malcriada Primero: que está sea la última vez que me sacas un cuchillo porque si lo haces de nuevo tendrás problemas Segundo:

Le dije clavando mis ojos en los suyos; cambia tu forma o seguirás virgen toda tu vida.

Le dije.

Se que eso le molestó porque me observó de una manera extraña sus ojos se fijaron en los míos.

- Suéltame.

Dijo molesta.

Enseguida quite las manos de su cintura y di un paso hacía atrás para irme debo admitir que una parte de mi se siente extraño al sentir esto.

- No, me intimidas si quieres jugar sucio voy a jugar sucio, no sabes con quién te metes.

Dijo mientras me retiró.

- Quieres ver quién intimida a quién.

Dije acercandome a ella.

- Sólo digo no, te metas conmigo.

- Me gustan las cosas difíciles.

Me acerqué a ella tomandola por la cintura la empuje hacía la pared Te juro que lo vas a disfrutar.

Le dije para acercarme a sus labios. Introduje mi lengua en su boca besandola con fuerza no, podía despegarme de sus labios ella me respondió de la misma manera y siguió besándome con más fuerza.

- Pero, como te atreves.

Dijo empujandome hacía un lado.

- Bienvenida a la familia hermanita.

Le dije dándole la espalda.

- No, me llames así estas loco yo no, soy tu hermana no, soy nada tuyo eres un gilipollas de mierda te odio hijo de puta.

Dijo mientras salía de la cocina me giré para observarla una vez más y salí sin decir una sola palabra.

- ¿Porque la besé?

- Veo que te decidiste en conocer la casa Nick.

Dice Elizabeth acercándose a mi.

- ¡Si!

Dije sin mucho ánimo.

- ¿Que pasa? Está todo bien mirate estás súper nerviosol.

Dice tocando mi cara.

- Yo estoy bien gracias por preguntar.

Dije tranquilo.

- ¿Cuando llegaste?

Escuché una voz detrás de mi.

- Hace poco Anna ¿Que te pasa? Estás palida mírate que te paso está todo bien.

Dijo acercándose a ella.

- ¡Si! Estoy bien y ya no, me toques.

Dijo alejándose de inmediato.

- Yo mejor me voy.

Dije para irme.

- No, no te vayas Nick quiero decirles que Dean quiere que nos formalizemos como família y pues habrá una cena está noche queremos dejar el trabajo de un lado y dedicarle más tiempo a nuestros hijos.

Dice Elizabeth.

- Por mi está bien no, tengo ningún problema.

- Has lo que quieras ya no, me importa nada.

Dijo con lágrimas en los ojos y se fue enseguida.

- ¿Sabes que le pasa?

Pregunta Elizabeth.

- No, lo se.

En realidad le afecto lo que le dije no, creó que una chica tan fuerte como ella lloré en público por nada.

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Para fotos de los personajes pueden verlas en la página de facebook: Leyendo a bubbly