Capítulo 36 | La Profecía.

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NICK

Me desperte faltando quince minutos para la siete quise irme a mi habitación no, quiero que Anna se altere por verme aquí seguramente no, va a recordar muchas cosas de lo que pasó a noche no, quiero que haga un escándalo.

Me levanté con cuidado moviendo su rostro que se encuentra en mi pecho lo hice con mucho cuidado para no, despertarla. Miré su detallado rostro antes de salir y dejé un suave besó en su mejilla.

Fui directo a mi habitación no, tengo ni una gota de sueño no, he dormido nada cosa que es extraña es bastante raro que una tía pueda lograr cosas en mi que ni yo mismo pueda entenderlo. Me duche y opté por ponerme unos vaqueros con una camiseta azul oscuro.

Bajé una de las escaleras para llegar al comedor y ya Elizabeth estaba ahí.

- ¡Buenos Días!

Dije sentándome en una de las sillas.

- ¡Buenos Días! ¿Como estás Nick? Dormiste bien en tu nuevo hogar.

- ¡Si! Muy cómodo por cierto.

- Me alegra mucho que te haya gustado cambiando de tema hablaste con Anna a noche.

- ¡Si! Lo hice.

- Se alteró mucho.

Preguntó preocupada.

- ¡No! estuvimos hablando de cosas de família y se calmo.

- ¡Gracias!

Dice más aliviada.

- ¡No hay de que!

Entonces Anna entró interrumpiendo la conversación.

- ¡Buenos Días!

Dijo sentándose en una de las sillas.

- ¿Anna, estás bien¿

Preguntó Elizabeth.

- Cuantas caras tienes Elizabeth a noche me abofeteaste y hoy me estás sonriendo.

Dijo Fría.

- Sobre eso quiero pedirte disculpas a veces no, se como reaccionar.

Dice sería.

- Como quieras.

Dijo Fría.

- ¿Te sientes mejor Anna?

Pregunté.

- ¡Si! Gracias por preguntar.

- Bueno ya me voy. Anna estuve hablando con Nick el te llevará a al instituto Jobs se enfermó no, vendrá a trabajar hoy.

Dice para irse.

- Así que tu me llevarás.

Dijo buscando conversación.

- ¡Si!

- ¿Que paso a noche?

- Nada que no, te allá pasado antes.

Dijo serio.

- ¿Me hiciste algo?

- No, tengo que esperar a que una tía se emborrache para llevarla a la cama puedes estar tranquila no, paso nada.

- lo siento.

- ¿Porque te disculpas?.

- Por haberte pedido que te quedarás conmigo por haberme emborrachado tanto y por decir cosas ilógicas.

- No, pasa nada estuvo divertido responder a esas preguntas.

- Más o menos que fue lo que dije.

¡Malas Decisiones!©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora