DIOSES Y HEREDEROS I

CAPÍTULO 28 IVANA

Cuatro años atrás.

Ivana entraba al salón del trono en la ciudad de Grecia con mucho en mente. Lo primero, hacer frente a su padre.
_Su majestad, hizo una reverencia
_¿Hija?.. ¿Pero que haces acá?
_Vengo a hablar contigo.
_Me hubieras mandado una carta, no es seguro que vengas.
_ Bla Bla Bla, la historia de siempre, ¿Esta Gastón por acá?
_No, creo que está con Chloë haciendo vayan a saber que.
_Haa, bueno mejor, quiero hablar con vos pero a solas.
_Claro, ¡Guardias, retirense! Ordenó Mario.
El salón quedo vacío, solo Ivana y su padre quedaban dentro.
_ Bien hija, ¿que quieres decirme?
_Estoy harta del encierro, tengo una vida para vivirla, no para estar solo con madre en ese horrendo palacio.
_¿Acaso Egipto no es de tu agrado?
_No, aparte mamá está rara, no habla mucho pero cuando lo hace solo maldice o reta a alguien, vivimos peleando por eso.
_Si me he enterado de eso Iva, ya hablare con ella.
_Bueno pero aún si, quiero retomar mis obligaciones como tu hija y segunda heredera.
_ ¿Obligaciones? Tu no las tienen dijo Mario riendo.
_Entonces las quiero, no se dame un trabajo o un ejercito. Sácale uno a Gastón y dámelo a mi, él dirige a muchos.
_¿Sacarle un ejercito a tu hermano? ¡Ja! No me hagas reír hija, el es un comandante experimentado y tu nunca estuviste en batalla.
_Entonces pide que Gastón me reciba un tiempo como su oficial hasta que él  te diga que estoy lista. ¿puedes?
_¿No entiendes que eso no pasará? Eres una princesa, no una guerrera, tu lugar está junto a tu madre o con las damas de la corte, no es un campo de batalla.
_Pero padre dijo la joven con bronca pero a la vez triste.
_No deberías subestimar de ese modo a tu hija Lord.
_¿Quien eres? Preguntó Mario.
_Soy Hera, reina de los dioses y esposa de Zeus.
_Mi señora dijo Mario y se inclinó ante ella, Ivana hizo lo mismo, era la primera vez que veía a una diosa en persona.
_ De pie ambos, está  niña tiene un gran potencial querido emperador.
_¿De que hablas? Preguntó él.
_Me han enseñado el futuro y ella tiene un papel importante en él, junto a tu hijo y los otros elegidos.
Pero si tu no la dejas salir de ese palacio nunca alcanzara su razón de vida.
_Entonces, ¿ella y su hermano gobernaron este imperio una vez ya no este? Preguntó el emperador.
_Lamentablemente no puedo decirlo. Pero te diré esto. Si ella no lucha junto a su hermano las cosas serán muy distintas a como deben ser.
_Maldición grito Mario.
_Vez padre, la diosa cree que tengo que tener mi propio ejercito.
_No niña, yo no dije eso.
_Entonces ¿que? Preguntó el emperador, ¿que quieres que haga mi hija?
_Tranquilo Mario, ella debe prepararse para lo que viene y aprender las artes ocultas para las cuales está destinada.
_¿Que quiere decir mi señora? Preguntó Ivana.
_Que vengo a proponerte que vengas conmigo al monte olimpo y seas mi pupila, te enseñaré todo lo que debes saber así luego ocuparan tu lugar junto a los elegidos.
_Vaya dijo Mario sorprendido. No lo se, déjame pensar y te contestaré Hera.
La diosa rió.
_Tu no debes pensar nada emperador, es ella quien debe decidirlo. ¿vienes conmigo o vuelves a Egipto? Piénsalo, te daré una semana.
_No gritó Ivana, ya tome la decisión, voy con usted.
_Pero hija, no sabes lo que te espera allá.
_Mejor padre, será como una aventura a ciegas respondió la princesa.
_Bien dijo mi niña, entonces empaca tus cosas y ven conmigo mañana mismo, te estaré esperando a las afueras de la ciudad.
La diosa se elevo y se esfumo en un haz de luz.
_Segura de esto iva preguntó Mario.
_Si, muy segura.

Ivana salio contenta del lugar y fue directo a empacar, al otro día una nueva vida le aguardaba.