Un grupo de amigos son reclutados por los dioses para hacer frente a un mal ancestral que recientemente escapo de su encierro, una historia fantástica con suspenso, amor, acción y un toque cómico.
A unos kilómetros de la asediada capital búlgara Gustavo y las chicas llegaban al campamento de Caulaincourt.
_Sean bienvenidos dijo Ney recibiendolos, el Marqués de Caulaincourt los espera en aquella casa. Gus asintió y siguió al mariscal, tras él las chicas.
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_General Gustavo, saludó el oficial y paso su mano. Mis ladies, un gusto verlas aquí. _Gracias mi lord contestaron ellas. _¿Y el príncipe y lord Guido? Preguntó Caulaincourt. _Guido lamentablemente ya no está entre nosotros dijo Gus agachando la cabeza. _Gas tuvo que hacer algo antes de venir para acá comento Katie. _Entiendo... es una pena escuchar eso, mis sentidos pésame amigos mios pero debemos planear que hacer con los chinos. _Si, cuanto antes intervino Chloë. _Mis informantes me dicen que ellos disponen de 250.000 hombres y nosotros solo 150.000 dijo Murat preocupado. _Nos superan en número pero no en espíritu dijo firmemente Cornwallis. _General Gustavo, ¿Que sugiere hacer? Preguntó Ney. El resto lo miraron esperando que dijera su plan. En la casa de mando se encontraban todos los oficiales designados por Gastón en aquella reunión en la Malmaison. _Mmmm no lo se, Déjenme pensar caballeros, no soy bueno en estas cosas dijo Gus. Las chicas solo miraron. _¡Gas! ¿donde demonios estas? pensó Katie. Tarleton desplegó un gran mapa sobre la mesa... _Lo escuchamos sire dijo mirando a Gus. _Hee...hee... de acuerdo.. tenemos 150.000 hombres... _¡250.000! Intervino Gastón entrenador al lugar con Wellington y Rommel. Gustavo suspiró aliviado. _Alteza saludaron todos he inclinaron la cabeza. _Eso no es necesario dijo Gas, soy el mismo de siempre para todos ustedes. Chloë corrió a abrazar a su esposo. _¿Como que 250.000? Preguntó Fiama. Gas sonrió. _Antes de salir de Francia le pedí Wellington que tomara ha 70.000 hombres ingleses e italianos y partan hacia aquí pero por el sur, luego en el Der Große envié un mensaje a Rommel y acudió con otros 30.000. _Vaya, bien pensado sire contestó Caulaincourt. _Por cierto, él es el mariscal de campo de Rommel, líder de los Africa Korps. _Señores un placer dijo el mariscal. Los demás asintieron. _Bien, ahora que estamos todos, hay mucho que discutir dijo Gustavo. _Si me permiten dijo Rommel acercándose al mapa... el ejercito chino rodea toda la ciudad así que creo que es mejor atacarlos por aquí.
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