Mi Chico Ideal ♡

Capítulo Extra ❤

— ¡Que vivan los novios! — Grite con alegría elevando mi copa al aire.

— ¡Que vivan! — Grito la multitud detrás de mi.

Ethan me beso con alegría, de verdad estábamos muy felices por nuestros amigos.

Una señora, de mediana edad, muy arreglada se presentó ante nosotros robandome una reluciente sonrisa nueva.

— Buenas noches... — Saludo cordialmente. — Soy la mamá de Lucas... tu debes ser Megan, y tu Ethan... Sus mejores amigos...

— Un gusto conocerla señora Bradford, efectivamente, soy Megan, puede decirme Meg. El es mi esposo Ethan y ella nuestra pequeña hija Lucy... es un placer...— La salida palidecio. Pareció abrumador el hecho de que tuviera una familia... claro, a tan corta edad.

— Disculpame pero... ¿Cuántos años tienes? — Veía venir esa pregunta.

— Tengo veintiséis, mi esposo veintinueve... llevamos ocho años de casados, muy felices, por cierto — Reí. La pequeña Lucy corrió a mi regazo y la alse. — Ella tiene cuatro añitos...

— Ya veo... bueno, me alegra mucho que hallamos podido conocernos... — Detrás de ella, el reflejo de su hijo se acercaba, posando su mano sobre su hombro.

Lucy corrió a los brazos de su padrino y este, haciendo caso a sus caprichos, la abrazó fuerte y la elevó en el aire. Tal como a ella le gusta.

— Felicidades Lu, te amamos mucho... — Estreche sus fuertes brazos, el dejó un beso en mi frente y saludo a Ethan con un guiño.

— Muy bien, madre, amigos, pequeña Lucy — Dejó un beso en su nariz — Debo buscar a mi esposo ahora...

— Claro... — A lo lejos, mientras Lucas caminaba, su padre se acercó a él con una media sonrisa, intercambiaron algunas palabras para al final darse un fuerte abrazo. Observé a Lucas llorar unas lágrimas y salir a besar a su reluciente espozo.

Aly se coló entre las mesas con su prometido y los mellizos de siete años siguiendolos por detrás con las mejillas llenas de pastel.

— Pequeña Lucy, ven con tu madrina Aly... — Obediente, se subió sobre el delicado vestido de Aly.

El vals, era algo hermoso de ver. A mi parecer, era único y te hacia sentir feliz.

La celebración no era inmensa, pero estaban todas las personas que deseábamos ver. No más no menos.

Cuando todos se sentaron, Ethan tomo una copa y un tenedor, haciendome el honor. Todos voltearon a verme y yo me paré.

Suspire para comenzar. — Bien, Josh, Lucas, somos amigos desde hace tanto tiempo que no siquiera recuerdo con exactitud como nos conocimos... sólo... que los amo chicos. A ambos. Son dos personas maravillosas, repletas de amor y felicidad. Les deseo todo lo mejor en sus vidas y que su matrimonio dure mil años más... yo... — Sentí ganas de llorar — Yo... lo siento... Lucas, te amo como el hermano que nunca tuve y... ah... sólo... sean muy felices chicos...

Volví a sentarme, rodeada de aplausos. Ethan beso mi frente y Lucy me dio un trozo de pastel algo extraño.

Éramos simplemente eso, un grupo de amigos que se mantenían unidos aunque pasen los años, luchando con la vida, poniéndole el pecho a todos los momentos difíciles y disfrutando los momentos buenos. Porque de eso se trata la vida, de vivirla como puedas.

Nadie puede decirte que está bien o que está mal, tampoco si debes o no hacer algo.

Sólo tienes una vida. Vívela.