¿Reconocerías el amor de tu vida si lo tuvieras justo a tu lado? Bueno, yo si.
COMPLETA ¡
Capítulos largos y llenos de emoción, te espero dentro de este libro y espero tu crítica al final¡¡.
Era increíble conocer a alguien más de la familia de Ethan, el siempre es muy reservado y me alegra mucho agregar nuevos miembros.
Scott, es el típico chico que amarían las chicas, a mi parecer.
Mandíbula marcada, ojos celestes como el océano, sonrisa perfecta, blanca como la luna, tez clara y cabello rubio y algo rizado.
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Eran bastante parecidos entre sí, pero sigo pensando que Ethan se llevo todo lo bonito de los genes Blacke.
Note a Ethan algo molesto, inseguro y un poco exagerado ayer en el almuerzo, no se porque y no estoy segura de querer saberlo tampoco.
Me estoy preparando para ir a trabajar, debo pedir el auto para que nós vengan a buscar.
Salí de mi habitación, Ethan se metió en la ducha hace unos minutos y pronto se nós hará el horario para salir.
Me dirigí a la cocina a buscar el teléfono, deberíamos tener otro en la habitacion lo sé.
Llamé, pedi el auto y colgué.
Al dar la vuelta, observé a Scott reclinado en el borde de la puerta muy cómodamente.
-Oh... Me asustaste Scott...- comerte.
-Oh, lo siento mucho Megan...- no detuve mi camino, llegaba tarde -¿Sabes algo?- lo oí murmurar a mis espaldas, no quería ser descortés, así que me dije la vuelta y lo observé acercarse unso pasos.
-¿Que sucede?- le sonrei.
-¿De verdad eres novia de Ethan?- preguntó. Yo fruncí el seño.
-Ah, si... Estoy segura... Es decir, estoy viviendo con el...- irónice.
-Claro, claro... No pretendía ofenderte, es solo que el jamás tuvo novia realmente, tenía muchas mujeres para un día, sabes a lo que me refiero...- comento.
-Eso es muy innecesario... Se todas esas cosas, pero no me importó- no tengo necesidad de explicarle nada.
-Claro, lo siento, se que no me incumbe. Mejor me iré a preparar, debo ir a concentrar músculos- sonrió gentilmente.
-Bien, yo y Ethan iremos a trabajar, volveremos en la noche o quizas unas horas antes...- le comentaba.
-Bien, claro.. Preparare la cena si quieren...- agrego.
-Oh no es necesario, en unos minutos llegara Ana, nuestra ama de llaves, ella se encargará de todo eso...- le sonreí y el asitnio.
-Buen, entonces me iré...- ambos nós despedimos y el se dirigió a su respectiva habitación.
Subí las escaleras rumbo a mi cuarto y encontre un Ethan algo indeciso.
-¿Te ayudo?- le coloqué la camisa y abroche los botones como es debido, luego de eso la corbata fue arreglada y alisada.
