Capitulo 13; Panes y bollos de Piao Chong.

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                    🍞🍤🍲

  Albert leyó el informe que plagg le llevo a su oficina y se lo devolvió con su firma.
-me da gusto que tu, Tikki y la niña se sientan agusto en casa- aseguró con una sonrisa, plagg se sonrojo y le devolvió la sonrisa apenado.

-cuando tenga dinero suficiente compraremos una casa y dejaremos de amontonarnos.. También me llevaré a esas pequeñas lacras-

-¡no, no! A mí Dulcinea y a mi nos encanta que ellos estén aquí, por favor no nos los quites,- dijo con sincera preocupación, Albert era un hombre de mediana edad, enamorado de su mujer y honesto, se casó con candida en sus 20, pero paso una década y ningún niño les caía del cielo, ya se habían resignado a que Dios se le había olvidado darles el preciado regalo de ser padres.
Cuando la hermana de candida falleció, los niños fueron llevados al hogar de los Rosewhite, aunque el motivo fue desafortunado, los niños llenaron un gran vacío en sus corazónes.

Cuando candida se embarazo, fue un milagro, y una señal de Dios de que estaban siendo compensados.

William Albert Rosewhite nació con 5 kilos de peso y 3 hermanos adoptivos esperándolo.
Con quién mejor se llevaba era con Doozu, pues este era 1 año mayor y eran uña y carne.
Si los niños se iban sería como si les cortaran un pedazo del corazón en viva carne.

-lo siento-dijo plagg avergonzado -si alguien a Sido un padre para Doozu eres tú Albert.. digo, mis hermanitos no los llaman tíos sino mamá y papá, y eso es lo que son.. por eso estoy agradecido.. porque aquí tienen la familia que papá y yo no podemos darles- dijo triste

Albert se levantó y cogió a plagg zarandearla ligeramente.
-'no te atreves a pensar eso, una familia es una familia sin importar donde están sus integrantes,-

-Supongo que tienes razon- dijo con sonrisa ladeada.

En ese momento tocaron a la puerta y Javier su tío entro, vio a su sobrino y su característica sonrisa disimulada se ensanchó en una de oreja a oreja.

-¡sobrino de mi corazón!- exclamó viendo a él hermoso muchacho, no sabes el gusto que me da verte !- Dijon tomándolo en sus brazos y estrujándolo.

De sus tíos, Javier era el más alto y fornido, era muy guapo, y soltaba los suspiros tanto de mujeres como de hombres.. No era que plagg tuviera prejuicios, pues su madre le enseño la tolerancia, pero plagg sospechaba que su tío, también gustaba de la compañía femenina tanto como masculina, era tan encantador como depravado.. Pero lo quería como tal.

-¡hoy fui a casa de mi bella Doux y conocí a tu hermosa mujer y a su adorable marinette.. Esa chiquilla necesita ropa urgentemente, la ropa le queda muy chica.- aseguró- a los 13 las niñas crecen demaciado.-

-¡lo se!-contesto su sobrino,- Tikki fue la primera en sugerir lo de la ropa, pero mi mujer y mi cuñadita tienen la ventaja que no necesitan comprarla, ellas son magníficas costureras y en verdad Mari tiene mucha imaginación, ella misma hace sus diseños y son hermosos!- dijo presumiendo lo ajeno.

-¡de verdad!- pregunto contento, -buenos ..- dijo con pose altanera- eso es lógico , después de todo es francesa.. y la mode como el arte culinario es nuestro fuerte!-dijo sin nada de modestia.

-¿hay algo que necesites o solo venías por plagg?- pregunto Albert ahora detrás de su escritorio, estaba acostumbrado a su estrafalario cuñado, pero era a veces demasiado petulante, simpático si, pero fastidioso.

-¡pues de hecho si!- contesto, - Rafael ya regresó de Cambridge,voy ahora mismo a su oficina, quiero verlo antes de regresar a Windsor y dar clases en Eton.- Javier suspiro - como desearía dar clases en Cambridge.. ahy pase los mejores años de mi vida- dijo soñador mientras secuestraba a su sobrino. -¡adios cuñis!- dijo y salió .

¿Quien eres Mi Princesa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora