En un tiempo donde ser mujer era de poco valor, en especial si eras pobre.
marinett una jovencita de escasos 13 años debe enfrentar un mundo que apenas empieza a comprender.
En especial ahora que ya no cuenta con la protección de su familia, debe li...
-¿ Te lo puedes creer¿, ¡Que escándalo!- le dijo Priscilla a su gemela.
Como era costumbre, las señoras Priscila y Druscila tomaban el "té especial" en su martes de whist, el cual a veces también se extendía a sábado o jueves dependiendo de si willemina estaba de acuerdo o si ya no tenía té.
-¡ Hay no, que espanto!, secuestrada por su propia abuela.- dijo Druscila en shock.
- es increíble lo que se es capaz de hacer por dinero.- dijo willemina sorbiendo de la taza.
-¿ Ya no se dijo algo sobre lo ocurrido?- pregunto Druscila.
-...mm, no, fueron muy discretos sobre el tema, Regina no me ah querido contar mucho, exepto que el hijo de la mujer la interno en una clínica privada.- contesto willemina.
-¿ Bedlam?- pregunto Priscila mordaz. Las damas soltaron una carcajada.
- ¡Ese hijo mío nunca quiso decirme nada de nada, ¿Dios mio cuando llegara el día en que michael me conceda nietos?.- pregunto una de las gemelas con dramático pesar.
-¡ Mejor pídele a Dios que se case primero y después que lleguen los nietos!- le dijo willemina entre risas y las hermanas soltaron otra carcajada.
Para Luka aquello era señal de que se les estaba pasando el té de añejo.
-¡ Hay pero que rico es el té de Escocia!- dijo willemina demaciado alegre.
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Luka entro al pequeño antro de perdición y saludo a su madre y sus tías con un beso. En medio de la mesita dejo tres sobres de color rojo con un sello dorado.
-¡ Eh aquí las invitaciones de la boda de Mario Cheng y Adrianne Agrest.- el joven se sirvió una pequeña porción y casi se le quema la garganta.
-¡ Dios ...este té esta muy fuerte!- su madre y sus tías volvieron a reír.
- tu abuela Morag nos lo envío, según ella es un "té limpia espíritus"- dijo guiñándole un ojo a su retoño.
-¡Aggg, si..., Siento como limpia mi espíritu!- dijo el joven y dejó la tasa con aquella cosa en su interior. Las mujeres soltaron otra carcajada.
-¡ Creo que es lo mismo que dijo Michael cuando la probó por primera vez!-
-¡ a pero entonces no es té de de Escocia es de china!- dijo Priscila.
-¿ Cariño, Nino nunca te comento algo sobre la señora bourgeois?- pregunto su tía Druscila.
-...no nada.-
-¿ Y lady Hawkins?- intervino Priscila.
-¿Tía Regina?-
-¡No tontito!- dijo su madre riendo tontamente, sin duda estaban pasándose de la línea o se les habían cruzado los tés.
