Capítulo 32; " Alianzas de Oro" 1ra Parte

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                           👗

  Sus manos sudaban, estaba ansiosa, se levantaba continuamente sin un motivo real, "adrianne llegara pronto" se decía ella, tenía dos confirmaciones.
  Al llegar a casa encontró a su familia esperándola y le entregaron la carta de Mario dónde le comentaba lo sucedido en Italia.
  Su corazón dió un salto y se emocionó, se puso a llorar de felicidad, tenía muchas ganas de ver a su amiga y recibir noticias de su prima y sus amigas en Francia.

  Pensó en la hermana María y en Sor Teresa, se lleno de nostalgia y siguió derramando lágrimas de alegría.
  La segunda confirmación vino de alya, su tía abuela era la ex-nana de los Agrest y recibía cartas de adrianne con frecuencia.
   Alya tomo prestada la carta de milen y se la entrego a marinette para que está la leyera.

  Paso la yema de los dedos por el papel de la carta y confirmo que en efecto era su letra.

  Contaba los días para que arribará el barco, estaba tan feliz que cuando llegaba un pretendiente los recibía con una sonrisa, entre ellos se encontraba Adrien, a quien recibía con más gusto, se dió cuenta que de todos, era a el a quien siempre buscaban sus ojos.

 
                     🐱🐈🐱

    -¿Estas nervioso?- pregunto nino, Adrien asintió y miro a los sirvientes desde los escalones.
  Según los cálculos de nino su familia llegaría en dos días si hacía buen tiempo o menos.

  Los cuartos se mantenían limpios y siempre pendientes de la llegada de los amos de la mancion.
 
-es tonto ¿ verdad?-

- no me lo parece - le dijo nino - es totalmente normal sentirse así, serio raro que no sintieras nada, ¡es más! Me atrevo a decir que tu padre se siente igual.- Adrien sonrió y apoyo el brazo en la baranda para mirar de reojo a su amigo.

-¿ Como haces para ser más maduro que yo?- nino se encogió de hombros.

- supongo que es un don, o es por qué soy un hermano mayor - presumió el.

  Adrien se incorporó y los dos dieron la vuelta para dirijirse a una salita de estudios pero fueron detenidos por un joven jardinero que entró corriendo a el corredor de la entrada principal.

  -¡ Joven amó, se acercan un carruaje y varios carros con baúles!- Adrien se volteó de golpe y miro a nino.

-¿Listo?- le pregunto nino y Adrien asintió casi automáticamente tomo tanto aire como pudo y con voz firme y audible le ordenó a sus empleados que los recibieran como se establecía en el anticuado protocolo.

  Los muchachos bajaron los escalones casi corriendo y cuando salieron nino casi se sorprendió al ver que todos los empleados hacían una gran fila.

  A unos metros se acercaba un carruaje de renta guiado por 2 hermosos caballos blancos.

Adrien se paró tan derecho como pudo, y trato de tranquilisarse.

 
                          🐱

  -¿ Cuántas veces has estado en londres ?- pregunto adrianne a su madrastra.

-¡ No tantas como crees, siempre me gustó más Francia que Inglaterra, pero eso es porque no contaba con amigas y luego de conocer a mi primer esposo ya no volví, quizá fueron alrededor de 8 veces!-

-¡ Tú esposo era inglés ¿cierto?-

 - si, pero su padre era francés, tu padre creyó que era francesa cuando me conoció,... No fue nada romántico así que saltemos esa parte, cuéntame sobre tu Nana, ella si es francesa ¿Cierto?-

-mmm, si, según se, era maestra en la escuela de señoritas donde mi madre estuvo en su juventud y cuando se retiró y enviudo, la contrato.-

  -¿ Tú y Adrien se llevan bien?- pregunto Nathalie, adrianne sonrió y miro al horizonte fijando su vista en la tierra que aparecía frente a ella.

  - se podría decir que es mi mejor amigo,... Supongo que está mal que no nos acompañará a Italia pero es que tenía otras cosas en mente.- volvió a sonreír para si misma al pensar en el objeto de deseo.

- una chica me imagino.. ¿La conoces?- Adrianne lo pensó, pero negó con la cabeza.

- no conosco a ninguna "Marietta Cheng"- aseguró la rubia, y era cierto.

  Ella solo conocía a marinette dupain, su mejor amiga y a quien extrañaba terriblemente.
  Cuando volvió a leer la carta de su hermano y comparo la descripción de la chica y el nombre no tuvo duda alguna que era marinette de quién hablaba.

  Eso lo tuvo animada durante semanas, estaba anciosa de pisar el suelo inglés y visitar a los Cheng.

Pero estaba conciente de que no podía.

  Conocía el riesgo, por ese motivo no había comentado nada a su familia, ni a Félix.

  Y probablemente no se lo comentaría a nadie, ni a su gemelo Adrien, a menos que Mari se lo permitiera.

-¿Marietta Cheng?.. ¡Que pequeño es el mundo!, ¿Cual es la probabilidad de que ella y ese muchacho que te salvó, sean parientes?-  pregunto tanteando el terreno.

  Nathalie vio como el rostro de Adrianne se iluminó al mencionar a Mario, sin duda la muchacha se había enamorado o al menos encaprichado de su héroe y lo que más esperaba era volverlo a ver.

  Sintió ternura, era una etapa muy bonita la de estar enamorada, pero estaba segura de que las cosas no serían tan fáciles, la vida no era una novela romántica de final feliz.

  Tomo a adrianne de la mano y la palmeo, la muchacha no hizo ademán de retirar la mano sino que en su lugar le puso la otra encima en mel mismo gesto cariñoso.

-¡ Mira Nathalie,.. ya estoy en casa!- exclamó feliz as la ver qué ya estaban en el puerto.

  -si..., Hogar dulce hogar.- dijo Nathalie con ese curioso acento italiano que trataba de hablar inglés - será mejor que regresemos al camarote, no quiero que dejemos nada atrás, no hay devoluciones si pierdes algo en el viaje.-

  Las damas, regresaron al camarote y no dejaron nada atrás.
  Gabriel pago muy bien a el dueño de "el peregrino" para que le prestará todos sus carruajes, la cantidad de equipaje que Nathalie y Adrianne llevaba era exagerada.
 
  En especial Adrianne la cual a última hora se había decidido por comprar una cantidad casi industrial de tela exótica y bisutería fina y accesorios.

  Y Gabriel, el cual estaba decidido a consentir a su hija en todo,.. pues no le negó absolutamente nada.

  Aquello casi parecía un desfile, al día siguiente no habría nadie que no supiera que Gabriel Agrest estaba de vuelta en Inglaterra.

   
                           🏰

  El camino a casa le pareció demaciado largo, 6 años eran mucho tiempo y a pesar de todo las cosas no habían cambiado tanto en su alrededor, eran los mismos edificios de siempre nada parecía diferente.

  Se acercaron a los terrenos de la mancion y adrianne se deleitó al ver los jardines de su difunta madre en plena flor.

  Era hermoso, a lo lejos vio a los sirvientes en una fila y a su hermano gemelo al lado de nino esperándolos al pie de la entrada.

Adrianne no espero que alguien abriera la puerta, en cuanto se de detuvo el vehículo está salto hacia afuera y corrió a brazos de Adrien.

  -¡ Hermano!- exclamó esta corriendo a los brazos de el, Adrien la recibió con una gran sonrisa y la atrapó en el aire dando  una vuelta de júbilo.

-¡ Si tú no vas nosotros venimos a ti !- dijo ella.

 

¿Quien eres Mi Princesa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora