Capítulo 38.
Mi querido hermano:
Te escribo para decirte que después de tantos años estoy fuera del Reino, he ido a descubrir el resto del mundo, el Mundo de los Muertos, y si mi hechizo funciona recibirás esta carta en breves momentos.
También tengo que decirte que ahora soy la Maga Negra más buscada por el Consejo de Magos y no tengo donde quedarme. Si pudieras... ya sabes, decirme dónde estás para poder ir contigo te lo agradecería muchísimo, hermano.
Entiendo si no confías en mi por todo el tiempo que ha pasado o simplemente por mis palabras, pero por favor, te necesito mucho en este momento, no se a dónde ir y por lo que se tu llevas viviendo en este mundo cincuenta años, vamos, desde que nos separamos.
Te lo ruego, Alem.
Te quiere
Aria.
-Necesito escribir a mi hermana. -Dice Alem después de mostrarnos la carta de su hermana.
-¿Te dejamos solos? -Pregunta Josh.
-Por favor.
-Necesitarás papel y lápiz, ¿No?
-No, es una carta mágica, -Chasquea los dedos y delante de él aparecen un papel flotando que va cayendo lentamente y una pluma negra. - ¿Ves?
-Ya veo. Te dejamos.
Agarro a Josh de la mano y nos vamos a nuestro cuarto, allí nos sentamos en mi cama y empezamos a hablar sobre Fred y la guerra.
-¿Por qué crees que Fred no nos ha escrito hasta ahora? -Pregunto.
-Estaría ocupado, Em, la guerra consume muchísimo tiempo de los soldados.
-Tienes razón, y por cierto, -Le agarro las manos, eso hace que eche un rápido vistazo hacia ellas y vuelva a mis ojos. - deberías entrenar menos fuerte, tanto entrenar te mata lentamente.
-Lo se, pero Em, quiero ir lo más rápido posible ha ayudar a Fred. Quiero que esta guerra acabe, ¿Sabes? -Separamos nuestras manos para volver a la posición del principio aunque yo me subo completamente a la cama y me siento en posición india.
-Si, lo se, yo también quiero ayudar a Fred, él es nuestro amigo. -Se sube a la cama y se sienta como yo.
-¿Y cómo llevas los poderes? Hace mucho que no entreno contigo. -Río levemente por los recuerdos que vienen a mi cabeza.
-Bien, hace un tiempo Alem y yo estamos combinando nuestros poderes y la verdad, salen cosas muy poderosas.
-¿Como qué?
-Bolas de agua que cuando explotan lanzan rayos, por ejemplo. -Él abre los ojos impresionado por mi mejoría.
-¡Qué bueno! Yo tengo que ver eso.
-¿Quieres morir? -Niega con la cabeza y yo río. -Entonces me temo que tendrás que esperar, es un ataque letal.
-Vaya... ¿Y qué más sabéis hacer?
-Curación masiva, pequeñas motas de fuego que se meten en los pulmones, allí dentro crecen y te queman por dentro, tornados con una potencia más alta de lo normal, con lo cual a quien pille el tornado lo arrasa por completo, no se volverá a saber nada más de quien pille.
-¿Curación masiva?
-Cura a quien queramos con más rapidez de la habitual y le cura todo lo que tenga, ya sea un corte o una enfermedad mortal.
-Eso sirve bastante y lo del fuego me gusta la idea. -Asiente con la cabeza. -Lo único que es muy peligroso, ¿Podéis controlar a quien se le meten las motas?
-No, -Niego con la cabeza. -eso está en el aire y va a quien lo respire, es muy peligroso y no creo que lo vayamos a utilizar.
-Chicos -Alem asoma la cabeza por la puerta. -Ya lo he hecho, ¿No os importa que la haya invitado a casa no? -Dice mientras pasa completamente al cuarto.
-No, no importa. -Habla Josh.
-Gracias, vendrá en unas horas, o eso creo, ¿De que hablabais?
-De lo que conseguimos hacer juntando tu magia y mis poderes. -Río levemente.
-Oh, si, interesante.
-Si. -Dice Josh.
No se por qué pero el ambiente está tenso y lo único que quiero ahora mismo es escapar de allí.
-Voy al baño.
-Está bien. -Dicen los dos a la vez y yo suspiro.
-Voy a seguir con mi magia. -Escucho decir a Alem desde el baño de la habitación.
-Está bien. Por cierto, tu hermana nos ayudará ¿Verdad?
-Si, le he dicho que si quiere venir aquí tendrá que ayudarnos en la guerra, ¿Sabes? Ella es la mejor maga negra del Reino, me quitó el puesto cuando salí de allí.
-Genial, podremos juntar más magia para atacar.
Escucho los pasos de Alem alejarse y yo salgo del baño.
-Em, hay que tener cuidado, ya sabes que Alem sigue sin darme mucha confianza, al fin y al cabo es un mago negro y ahora por falta de uno vamos a tener dos, los dos mejores magos negros del Reino de los Magos en casa.
-Lo se, yo confío en él, hemos estado cincuenta años juntos.
ESTÁS LEYENDO
Mi mejor amigo vive debajo de mi cama [M.M.A.V.D.M.C.]
ParanormalA todo el mundo le parece normal tener amigos imaginarios cuando eres una pequeña porque piensan que a medida que vas creciendo estos amigos desaparecen pero no siempre es así, no conmigo. A medida que el tiempo pasa, a demás de ver a esas personas...