Mi mejor amigo vive debajo de mi cama [M.M.A.V.D.M.C.]

Mis poderes

Capítulo 20.

Cuando despertamos, Lau se va a su casa, no sin antes desayunar las tortitas que mamá preparó mucho antes de que nosotras estuviéramos en pie.

Nos despedimos y al mirar como se iba vi a Jenn mirándonos por la ventana. Hace unos años descubrimos que nos tenía envidia por la amistad que tenemos.

¿Os acordáis de las "secuaces" que la acompañaban siempre cuando éramos pequeñas?

Pues ya no están, Jenn las ponía verdes por detrás con sus otras amigas, las amiguitas pijas de hípica. Un día, una de sus amiguitas pijas se enfadó con ella porque le quitó el cepillo de su caballo y no se lo quería devolver, por lo tanto habló con las "secuaces" y les dijo todo lo que Jenn decía a sus espaldas. Sus "secuaces" dejaron de hablarle y ahora ella está sola aunque si que ha querido hacer nuevas amigas pero gracias a su egolatría y sus aires de idiota superior no lo ha conseguido.

Al ver que se fijaba en mi levanté una ceja y ella se fue de la ventana con cara de asco. ¡Qué sorpresa!
-Que veinte años, señores... -Digo negando con la cabeza.

Entro a casa y subo a mi cuarto para encontrarme a Josh en la cama con mi teléfono, tiene los cascos puestos y los ojos cerrados así que estará escuchando música. Me siento en la silla del escritorio y me pongo a pensar en como he llegado a tener todos estos poderes, porque no solo tengo los dos poderes que conocéis, tengo muchos más:

El primero que apareció fueron las visiones, ¿Lo de Bigotitos? Era una simple pesadilla, ahora es mayor y está gordo, no se mueve de mi cama para nada, solo para comer y beber, y obviamente para hacer sus necesidades, aunque eso es lo que suelen hacer los gatos, ¿no?

El segundo fue la capacidad de ver y hablar con otras personas muertas, lo de la cocina de hace unos años fue una mujer que se parecía ami madre, volvió a aparecer unos meses después y estuve hablando con ella y me dijo que era la bisabuela de mamá, mi tatarabuela, creo.

El tercero se presentó cuando pasé del colegio al instituto, fue la clariaudiencia, hasta que lo controlé podía escuchar a gente cuarto curso hablar y eso que estaban tres pisos arriba de nosotros. Me enteraba y me sigo enterando de cualquier secreto que haya en mis alrededores, aunque ya lo controlo, para hacerlo me tuve que poner tapones por la noche, sino no podía dormir. Josh me ayudaba a hacerlo pero a los pocos minutos me despertaba, era horrible.

Otro de mis poderes se presentó en un momento de ira con Jenn, bueno... es algo embarazoso pero casi la quemo viva, nadie veía las llamas que salían de mis manos a la vez que la insultaba, solo yo, ella las sentía y se retorcía en la pared acorralada por las llamas. A los pocos días me di cuenta de que cuando estaba triste pasaba lo mismo pero con agua, podía controlarla con mis manos. Josh me dijo que poseía hidrokinesis y pirokinesis.

El poder de sanación ya lo conocéis, ¿Verdad?

El último fue sobre el color de mis ojos, no es algo muy alucinante pero... el color de mis ojos cambia con mis emociones. Cuando estoy normal son verdes, es mi color natural, cuando estoy cansada son marrones, cuando estoy enfadada son rojos, cuando estoy contenta, amarillos, cuando estoy triste son azules, y bueno, sus variaciones cuando no me siento del todo así.

Se que no es mucho pero bueno...

-Em... -Josh chasquea sus dedos delante de mi cara.

-Uhm, ¿Qué pasa? -Si me lleva llamando un rato lo juro: no me he enterado de nada.

-Te llevo llamando un rato. -Efectivamente, no me he enterado de nada.

-¿Qué pasa? No me he enterado.

-Hay problemas en mi mundo, otra guerra. Esta es de las gordas.

-¿Cómo la segunda guerra mundial?

-Peor, me da a mi que va a ver muchísimos muertos más, tienes que venir con nosotros, por favor.

-Pero no estoy preparada...

-Llevas preparada desde hace mucho tiempo, solo que no te lo he dicho. Puedes traspasar la barrera de la muerte y volver sin ningún problema.

-Está bien, os ayudaré pero me tienes que contar como te enteraste de que podía traspasar esa barrera.

-Un día durmiendo te caíste de la cama y apareciste en la mía, yo te devolví a casa.

-Oh...

-¡Vámonos! -Josh me agarró la mano y rodamos debajo de la cama para ir a su mundo, ahora si, de forma consciente.

~~~~~~~~~~~~~~~~~

Jenn en la biblioteca.